MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
Página 2 de 7. • Comparte
Página 2 de 7. • 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
pobre serena y ese seiya desconsiderado , pero si serena es la madrastra de mattt quien es su mama? que le paso? esperare con ansias el siguiente cap
Amy Tsubasa- Sailor Outer Scout
- Mensajes : 470
Edad : 32
Sexo :
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
HOLA AMIWAS!!! QUE BUENO QUE LES HAYA GUSTADO LA ACTUALIZACION!!! INTENTARÉ NO TARDARME EN ACTUALIZAR AQUI LES DEJO UN PEQUEÑO INTRO AL CAPITULO 3 QUE SE TITULARA DE CARA AL PASADO PERO ANTES DE DEJARLES EL INTRO QUIERO ACLARAR LA DUDA DE AMY_TSUBASA, LA MAMA DE MATT MURIÓ AL POCO TIEMPO DE QUE EL NACIÓ Y SU MAMA ERA MICHIRU KAIOH UNA HERMOSA MODELO AMERICANA DE ASCENDENCIA JAPONESA, QUE CONOCIÓ A HARUKA TENOU EN UNA FIESTA OFRECIDA POR EL CAMPEONATO OBTENIDO POR EL, DESPUES DE UN TORRIDO ROMANCE DECIDEN CASARSE, Y AL POCO TIEMPO ELLA SE EMBARAZA DE MATT, ESTA MUERE A LOS POCOS MESES DE HABER NACIDO MATT, SOLO LA CONOCE POR FOTOGRAFIAS Y LO QUE LE PLATICABA SU PADRE DE ELLA, MATT HEREDÓ LOS PROFUNDO OJOS AGUAMARINA DE ELLA.
SAILOR MOON 4EVER- Sailor Outer Scout
- Mensajes : 355
Edad : 37
Sexo :
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
UPS!!! CREO QUE ME EXCEDI ESPERO HAYA QUEDADO ACLARADA TU DUDA AMY Y YA SABES CUALQUIER DUDA QUEJA O SUGERENCIA LA PUEDEN DEJAR OK???AQUI LES DEJO EL INTRO
Capitulo 3
DE CARA AL PASADO
La calle donde vivia serena podía servir de escenario a una pelicula, pensó seiya. Eran casas modestas, con arbustos y flores bien cuidadas, y buzones en una misma fila. Se oía el ruido de los motores de las podadoras sobre el cesped, el ladrido de los perros. habia unos niños en sus bicicletas en la acera.
Hora: un domingo por la tarde, a finales de verano. Lugar: un suburbio tipico.
Se preguntó lo que hacia serena, una antigua corredora profesional, acostumbrada a un estilo de vida internacional, en un sitio agradable como ese. Serena esatba en la cochera, lavando el toyota, y no lo oyó esatcionarse. Seiya entró por la pequeña reja y miró el jardin. Habia rosas por todas partes, arbustos, enredaderas que cubrian el portico de la entrada. Pensó que era una casa cubierta de rosas y frunció el ceño al pensar en el cliché. se dirigió por el jardin hacia serena, quien todavia no se percataba de su prescencia. Estaba descalza, vestia unos pantalones cortos y una camiseta y, alzandose sobre las puntas de los pies, enjabonaba el techo de su auto.
seiya admiró sus piernas con interes. muy bonitas. su uniforme no le ahcia justicia. sus caderas se movian de lado a lado mientras frotaba una mancha en el auto, y cuando se estiró más sus pantalocillos se elevaron y revelaron la curva mas palida de su trasero. seiya sonrió y tardó en anunciarse un minuto o dos para apreciar mejor a su chofer...
Capitulo 3
DE CARA AL PASADO
La calle donde vivia serena podía servir de escenario a una pelicula, pensó seiya. Eran casas modestas, con arbustos y flores bien cuidadas, y buzones en una misma fila. Se oía el ruido de los motores de las podadoras sobre el cesped, el ladrido de los perros. habia unos niños en sus bicicletas en la acera.
Hora: un domingo por la tarde, a finales de verano. Lugar: un suburbio tipico.
Se preguntó lo que hacia serena, una antigua corredora profesional, acostumbrada a un estilo de vida internacional, en un sitio agradable como ese. Serena esatba en la cochera, lavando el toyota, y no lo oyó esatcionarse. Seiya entró por la pequeña reja y miró el jardin. Habia rosas por todas partes, arbustos, enredaderas que cubrian el portico de la entrada. Pensó que era una casa cubierta de rosas y frunció el ceño al pensar en el cliché. se dirigió por el jardin hacia serena, quien todavia no se percataba de su prescencia. Estaba descalza, vestia unos pantalones cortos y una camiseta y, alzandose sobre las puntas de los pies, enjabonaba el techo de su auto.
seiya admiró sus piernas con interes. muy bonitas. su uniforme no le ahcia justicia. sus caderas se movian de lado a lado mientras frotaba una mancha en el auto, y cuando se estiró más sus pantalocillos se elevaron y revelaron la curva mas palida de su trasero. seiya sonrió y tardó en anunciarse un minuto o dos para apreciar mejor a su chofer...
SAILOR MOON 4EVER- Sailor Outer Scout
- Mensajes : 355
Edad : 37
Sexo :
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
prometo poner a trabajar mas mi imaginacion espero pronto terminar el capitulo, les mando muxos saludos!!! nos estamos leyendo!!!
SAILOR MOON 4EVER- Sailor Outer Scout
- Mensajes : 355
Edad : 37
Sexo :
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
Hola!!
Gracias por dejar aunque sea
un pedacito!! esta muy buena,
espero que la continues
pronto.... besos...
Gracias por dejar aunque sea
un pedacito!! esta muy buena,
espero que la continues
pronto.... besos...
Seluna_sk- Princesa Serena
- Mensajes : 889
Edad : 30
Sexo :
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
gracias por aclarar mi duda , seguire pendiente y tomate tu tiempo no te presiones nos estamos leyendo
Amy Tsubasa- Sailor Outer Scout
- Mensajes : 470
Edad : 32
Sexo :
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
amiga!!!
Queria decirte q me encanto,
lo lei desde ayer pero
no te pude dejar comentario
xq tuve muchos problemas
con el internet
pero espero q pronto subas lo demas!!!!
Queria decirte q me encanto,
lo lei desde ayer pero
no te pude dejar comentario
xq tuve muchos problemas
con el internet
pero espero q pronto subas lo demas!!!!
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
amiwas!!! sorry por tener abandonado mi fic es que las ideas entre este y mi otro fic se mezclan y como que me bloqueo [SERRISA] y no queria poner cualquier cosa, pero aqui estoy de regreso con un nuevo capitulo esperando que sea de su agrado no sin antes agradecer a tod@ aquell@s que se han tomado el tiempo para leerlo pero en especial a
NEO SAILOR MOON me da mucho gsuto saber que mi fic te agrada espero que este cap. sea de tu agrado.
AMY_TSUBASA gracias por leer mi fic y ya sabes cualquier duda aqui estoy para aclararla.
SELUNA_SK espero que este capitulo sea de tu agardo y grax por leer mi fic!!
bueno pues lo prometido es deuda, aqui les dejo el capitulo
NEO SAILOR MOON me da mucho gsuto saber que mi fic te agrada espero que este cap. sea de tu agrado.
AMY_TSUBASA gracias por leer mi fic y ya sabes cualquier duda aqui estoy para aclararla.
SELUNA_SK espero que este capitulo sea de tu agardo y grax por leer mi fic!!
bueno pues lo prometido es deuda, aqui les dejo el capitulo
SAILOR MOON 4EVER- Sailor Outer Scout
- Mensajes : 355
Edad : 37
Sexo :
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
Capitulo 3
2da. parte.
Es cierto que plantas rosas.
Escuché aquella voz tan penetrante, voltee con rapidez, sosteniendo con fuerza la esponja que tenía en la mano.
¿Qué hace aquí?- le exigí. Me pasé una mano por la frente y la llené de espuma.
¿Cuánto tiempo tardarías en vestirse?- Seiya miró con preocupación la esponja mojada.
No iré a ninguna parte- le hice saber.
Pensé que sería bueno dar un paseo juntos – comentó- podríamos hablar sobre Matt.
Le di la espalda y froté el techo del Toyota, haciendo volar copos de espuma. Seiya limpió uno que cayó en sus lentes de sol.
No gracias. Ayer hablé de Matt con Darién. Como todavía es el dueño de Ensigns me aseguró que no habrá ningún patrocinio.
Seiya empezó a impacientarse.
Las cosas cambian aun en un mausoleo como Ensigns. Darién no está en posición de prometer algo así. Tal vez no debería dar todo por sentado, serena.
Si usted tuviera algún peso, ya habría tomado el puesto de director para estas fechas.
Tengo mucho peso en la compañía – aseguró él- puedes no creerme pero, para que arriesgarse?
Enojada, bañé la parte trasera de mi auto con la mitad de una cubeta de agua jabonosa.
Si quieres hablar de Matt lo podemos hacer aquí.
No me agrada la idea; no con tu vecino mirándome como un lince – señaló al hombre que vigilaba todo mientras podaba su jardín- claro, es probable que solo mire tus piernas.
Me enojé ante este comentario, tratando de ignorarlo lo más posible.
No me puedes forzar a no apoyar a Matt- continuó Seiya- y tu lo sabes. Pero puedes convencerme de lo contrario.- me dijo con una sonrisa provocadora.
Ah, convencer, ¿verdad?- lo miré con desprecio.
Si, bombón- se burló- déjame salirme con la mía ahora o te arrepentirás. Vamos, actúa de acuerdo con tu edad, serena – añadió sin nada de diversión por el comentario que el hice-. Hasta ahora solo he presenciado una actitud histérica y muy poco amistosa de tu parte y necedad de parte de Darién. Acepto que tu desees una concesión de mi parte; pero no suelo negociar con mujeres impulsivas que quieren pegarme. Habla conmigo, dame tu punto de vista, explícate ¿son suficientes quince minutos para que te vistas? – observó mis pies descalzos, mis piernas llenas de jabón, mi cabello alborotado y sonrió- bueno mejor media hora.
Era como un reto para que probara que podía estar lista en menos de media hora, así que me tomé treinta minutos completos. Que espere, pensé. Me bañe, me sequé y me examiné en el espejo, “puede convencerme” había dicho Seiya, quizá debería intentarlo. Quizá si me maquillaba un poco, me ponía un poco de perfume y un vestido que mostrara mis piernas, lo lograría. Parecía que a Seiya le agradaban mis piernas. Al pensar en ello, una extraña sensación me recorrió.
En mi dormitorio, miré por la ventana y lo ví parado cerca de un arbusto de rosas. Observé como tomaba una rosa bien abierta y algo ajada y se inclinó para olerla. En ese instante, deje caer la cortina. Cualquier tentativa de coqueteo con él desapareció de inmediato. Seiya no era el tipo de hombre que fuera ganado con sonrisas y atractivo sexual. Y yo no era el tipo de mujer que hiciera una actuación de esa clase.
Me puse unos pantalones grises, una blusa rosa y unos zapatos sin tacón. Me recogí el cabello y me puse un poco de brillo labial. Tomé mi perfume, cuando apreté el atomizador, solo recibí aire en el cuello; descubrí que solo quedaba una línea delgada de color dorado en el fondo del frasco. Mi perfume favorito debió evaporarse hacia siglos sin que me percatara de ello.
Seiya me abrió la puerta de su automóvil. Y se dirigió al asiento del conductor, rea mucho mejor como antes: yo al volante del Rolls, el revisando sus papeles en el asiento trasero y el vidrio divisorio en medio. De pronto, añoré asa ventana divisoria.
Seiya me recorrió con la mirada y sonrió, sarcástico.
Veo que de nuevo te pones ropa para disfrazarte.
No se a que te refieres.- le respondí.
“la señora ama de casa de suburbio”- se burló- deberías deshacerte de esos pantalones cortos. No van de acuerdo con la imagen.
¿De que estas hablando?- le pregunté.
Solo sonrió y cerró la puerta para sentarse frente al volante.
Espero no me critiques mucho- comentó Seiya al encender el motor- acerca de mi modo de conducir- explicó cuando lo miré perpleja- me siento nervioso.
¿Nervioso? ¿Acaso alguna vez sientes nerviosismo?
Nunca antes he llevado a una corredora profesional como pasajero.
Ex profesional- lo corregí y su diversión desapareció- no significa nada ahora.
Tu sobresaliste en uno de los campos más difíciles y dominado por los hombres. Significa que tienes el valor, la dedicación y la fuerza de voluntad necesarios, al igual que el talento. Tengo que confesar que estoy impresionado.
Lo observé, atónita. Había sinceridad y admiración en su voz. El “difícil de complacer” Seiya Kou me admiraba. Bueno, maldita sea, no quería su admiración, ni la de nadie; durante años la evadí como si fuera peste… pero, aun cuando rechazaba esa admiración, experimenté un placer momentáneo.
Pensé que el objeto de este breve paseo era hablar de Matt- le recordé de forma inexpresiva.
¿Nunca tuviste deseos de volver a conducir, después de enviudar?- prosiguió como si no me hubiera oído.
No.
Perdiste el coraje cuando tu esposo se mató?
Cualquiera que tuviese algo de tacto no haría una pregunta como esa.- le respondí.
La corredora profesional que llegó en primer lugar en un Touring car classic, que ocupó uno de los tres primeros sitios en bathurst y que todavía tiene el record de vueltas en una practica en lakeside, se pone nerviosa al conducir un Rolls por las calles de la ciudad. A mi me parece una pregunta justa.
Como averiguó todo eso?- pregunté.
Todo esta en los archivos.
Archivos?- dije tragando saliva.
Los archivos de periódico. He creado un expediente pequeño y completo acerca de serena Tsukino- me miró con burla- He estado leyendo todo acerca de ti.
No todo, pensé. No todo estaba en el archivo.
Eso pertenece a la prehistoria- comenté cortadamente.
“en nuestro pasado yace nuestro presente”. Estoy citando a alguien, pero usted sabe a que me refiero.
Me hizo sentir muy vulnerable. Pero recordé que era la tutora de Matt y que era normal que Seiya investigara al respecto, puesto que podía entrar en un trato financiero con Matt.
Entonces sabrás que me retiré cuando me casé con Haruka. En un matrimonio no puede haber dos corredores profesionales, así que yo lo dejé. Cuando se mató, no quise tener nada más que ver con las carreras. Para que lo sepas, no me agrada conducir ahora, pero como el administrador de Haruka lo despojó, quedó poco dinero después de saldar todas las deudas; como necesito un trabajo, eso me forzó a conducir. ¿Ya estas satisfecho?
No, pero tendrá que bastar por ahora ¿Cómo se llama esa rosa de color rosa?
¿Qué rosa?- quedé confundida por el súbito cambio de tema.
La que miraba mientras me espiabas por la ventana.
Yo no… - negué pero me interrumpí molesta. Seiya era muy observador. Incomoda le di la información- es una princess Margaret ¿Por qué?
Me agrada. Puede que compre uno o dos arbustos.
¿Quieres comprar rosas?- le pregunté sorprendida.
Para mi jardín. ¿Crecen en macetas?
Me explicó que estaba renovando un lugar que compró como inversión hacia años, antes de irse al extranjero.
Originalmente, era una bodega. La compré a buen precio porque estaba derruida y cerca de unas vías de tren.
¿No te molesta el ruido?
No. Me encanta el sonido de los trenes. De chico, me enloquecían. Claro, nunca vivimos en un sitio tan plebeyo como las vías de un tren. A mis padres no les agradaría un lugar así.
Cualquiera tendría reservas ante un lugar así, pensé; los padres de Seiya Vivian en las zonas residenciales de lujo de Tokio.
Pero eso hace que tu casa sea aun más atractiva ¿verdad?- adiviné.
¿Qué te hace decir eso?-se sorprendió Seiya.
Por lo que veo, a ti te encanta impresionar a tu familia. ¿Qué no eres un poco mayorcito para seguir siendo rebelde?
Seiya rió.
En mi familia o te conformas o te rebelas. Nunca logré conformarme.
No pudo ser tan malo como lo haces ver…- pero me detuve al descubrir que el camino tomado por Seiya me era familiar- ¿A dónde vamos en este breve paseo?- después de todo, el camino llevaba a otros sitios. La mirada de Seiya me dio la respuesta. Mi corazón se aceleró.
¡No!- grité- llévame a casa.
El tema de nuestra discusión es Matt. Y tu nunca lo has visto correr.
¿Verlo correr? La adrenalina inundó mis venas. Me sentí mareada, con nauseas.
No quiero verlo, detén el auto…
Mira- su tono fue razonable- entiendo que sea difícil para ti, después de lo que le pasó a tu marido, pero tienes que verlo correr algún día.
Cuando el tránsito disminuyó de velocidad, tomé el picaporte de la puerta, pero Seiya fue más rápido. Presionó le botón de cerrado de las puertas. La puerta no se movió.
Déjame salir- grité furiosa al ver que la puerta no abría- siento nausea- le advertí.
Hay unos pañuelos desechables en al guantera- no pareció conmoverse ante mi amenaza de que podría vomitar el asiento- pero no creo que devuelvas.
No entraré. No miraré.
Como quieras. Pero como no daré marcha atrás, puedes dejar de hacer berrinches.
El auto se dirigió hacia ele estacionamiento de la pista. En el momento que logré salir, tuve la intención de correr hacia la salida mas próxima. Pero el sonido me detuvo…
El sonido de los autos compitiendo. Era un zumbido distante que se convirtió en un rugido cuando pasaron las toneladas de acero a gran velocidad. Y también sentí el olor de la pista; era tan familiar, como si nunca hubiera dejado de olerlo. Gasolina, aceite y hule lubricado. Era casi como un sabor dulce y amargo en mi boca y en mis narices.
Cuando Seiya me tomó del brazo, lo seguí sin resistirme: estaba bombardeada por las emociones evocadas por la carrera. Alegría, triunfo, desolación, dolor, miedo. Cuando llegamos al césped y nos unimos a los otros espectadores, me encontraba petrificada por el miedo. La última vez que estuve en una pista de carreras, alguien a quien amé, murió.
2da. parte.
Es cierto que plantas rosas.
Escuché aquella voz tan penetrante, voltee con rapidez, sosteniendo con fuerza la esponja que tenía en la mano.
¿Qué hace aquí?- le exigí. Me pasé una mano por la frente y la llené de espuma.
¿Cuánto tiempo tardarías en vestirse?- Seiya miró con preocupación la esponja mojada.
No iré a ninguna parte- le hice saber.
Pensé que sería bueno dar un paseo juntos – comentó- podríamos hablar sobre Matt.
Le di la espalda y froté el techo del Toyota, haciendo volar copos de espuma. Seiya limpió uno que cayó en sus lentes de sol.
No gracias. Ayer hablé de Matt con Darién. Como todavía es el dueño de Ensigns me aseguró que no habrá ningún patrocinio.
Seiya empezó a impacientarse.
Las cosas cambian aun en un mausoleo como Ensigns. Darién no está en posición de prometer algo así. Tal vez no debería dar todo por sentado, serena.
Si usted tuviera algún peso, ya habría tomado el puesto de director para estas fechas.
Tengo mucho peso en la compañía – aseguró él- puedes no creerme pero, para que arriesgarse?
Enojada, bañé la parte trasera de mi auto con la mitad de una cubeta de agua jabonosa.
Si quieres hablar de Matt lo podemos hacer aquí.
No me agrada la idea; no con tu vecino mirándome como un lince – señaló al hombre que vigilaba todo mientras podaba su jardín- claro, es probable que solo mire tus piernas.
Me enojé ante este comentario, tratando de ignorarlo lo más posible.
No me puedes forzar a no apoyar a Matt- continuó Seiya- y tu lo sabes. Pero puedes convencerme de lo contrario.- me dijo con una sonrisa provocadora.
Ah, convencer, ¿verdad?- lo miré con desprecio.
Si, bombón- se burló- déjame salirme con la mía ahora o te arrepentirás. Vamos, actúa de acuerdo con tu edad, serena – añadió sin nada de diversión por el comentario que el hice-. Hasta ahora solo he presenciado una actitud histérica y muy poco amistosa de tu parte y necedad de parte de Darién. Acepto que tu desees una concesión de mi parte; pero no suelo negociar con mujeres impulsivas que quieren pegarme. Habla conmigo, dame tu punto de vista, explícate ¿son suficientes quince minutos para que te vistas? – observó mis pies descalzos, mis piernas llenas de jabón, mi cabello alborotado y sonrió- bueno mejor media hora.
Era como un reto para que probara que podía estar lista en menos de media hora, así que me tomé treinta minutos completos. Que espere, pensé. Me bañe, me sequé y me examiné en el espejo, “puede convencerme” había dicho Seiya, quizá debería intentarlo. Quizá si me maquillaba un poco, me ponía un poco de perfume y un vestido que mostrara mis piernas, lo lograría. Parecía que a Seiya le agradaban mis piernas. Al pensar en ello, una extraña sensación me recorrió.
En mi dormitorio, miré por la ventana y lo ví parado cerca de un arbusto de rosas. Observé como tomaba una rosa bien abierta y algo ajada y se inclinó para olerla. En ese instante, deje caer la cortina. Cualquier tentativa de coqueteo con él desapareció de inmediato. Seiya no era el tipo de hombre que fuera ganado con sonrisas y atractivo sexual. Y yo no era el tipo de mujer que hiciera una actuación de esa clase.
Me puse unos pantalones grises, una blusa rosa y unos zapatos sin tacón. Me recogí el cabello y me puse un poco de brillo labial. Tomé mi perfume, cuando apreté el atomizador, solo recibí aire en el cuello; descubrí que solo quedaba una línea delgada de color dorado en el fondo del frasco. Mi perfume favorito debió evaporarse hacia siglos sin que me percatara de ello.
Seiya me abrió la puerta de su automóvil. Y se dirigió al asiento del conductor, rea mucho mejor como antes: yo al volante del Rolls, el revisando sus papeles en el asiento trasero y el vidrio divisorio en medio. De pronto, añoré asa ventana divisoria.
Seiya me recorrió con la mirada y sonrió, sarcástico.
Veo que de nuevo te pones ropa para disfrazarte.
No se a que te refieres.- le respondí.
“la señora ama de casa de suburbio”- se burló- deberías deshacerte de esos pantalones cortos. No van de acuerdo con la imagen.
¿De que estas hablando?- le pregunté.
Solo sonrió y cerró la puerta para sentarse frente al volante.
Espero no me critiques mucho- comentó Seiya al encender el motor- acerca de mi modo de conducir- explicó cuando lo miré perpleja- me siento nervioso.
¿Nervioso? ¿Acaso alguna vez sientes nerviosismo?
Nunca antes he llevado a una corredora profesional como pasajero.
Ex profesional- lo corregí y su diversión desapareció- no significa nada ahora.
Tu sobresaliste en uno de los campos más difíciles y dominado por los hombres. Significa que tienes el valor, la dedicación y la fuerza de voluntad necesarios, al igual que el talento. Tengo que confesar que estoy impresionado.
Lo observé, atónita. Había sinceridad y admiración en su voz. El “difícil de complacer” Seiya Kou me admiraba. Bueno, maldita sea, no quería su admiración, ni la de nadie; durante años la evadí como si fuera peste… pero, aun cuando rechazaba esa admiración, experimenté un placer momentáneo.
Pensé que el objeto de este breve paseo era hablar de Matt- le recordé de forma inexpresiva.
¿Nunca tuviste deseos de volver a conducir, después de enviudar?- prosiguió como si no me hubiera oído.
No.
Perdiste el coraje cuando tu esposo se mató?
Cualquiera que tuviese algo de tacto no haría una pregunta como esa.- le respondí.
La corredora profesional que llegó en primer lugar en un Touring car classic, que ocupó uno de los tres primeros sitios en bathurst y que todavía tiene el record de vueltas en una practica en lakeside, se pone nerviosa al conducir un Rolls por las calles de la ciudad. A mi me parece una pregunta justa.
Como averiguó todo eso?- pregunté.
Todo esta en los archivos.
Archivos?- dije tragando saliva.
Los archivos de periódico. He creado un expediente pequeño y completo acerca de serena Tsukino- me miró con burla- He estado leyendo todo acerca de ti.
No todo, pensé. No todo estaba en el archivo.
Eso pertenece a la prehistoria- comenté cortadamente.
“en nuestro pasado yace nuestro presente”. Estoy citando a alguien, pero usted sabe a que me refiero.
Me hizo sentir muy vulnerable. Pero recordé que era la tutora de Matt y que era normal que Seiya investigara al respecto, puesto que podía entrar en un trato financiero con Matt.
Entonces sabrás que me retiré cuando me casé con Haruka. En un matrimonio no puede haber dos corredores profesionales, así que yo lo dejé. Cuando se mató, no quise tener nada más que ver con las carreras. Para que lo sepas, no me agrada conducir ahora, pero como el administrador de Haruka lo despojó, quedó poco dinero después de saldar todas las deudas; como necesito un trabajo, eso me forzó a conducir. ¿Ya estas satisfecho?
No, pero tendrá que bastar por ahora ¿Cómo se llama esa rosa de color rosa?
¿Qué rosa?- quedé confundida por el súbito cambio de tema.
La que miraba mientras me espiabas por la ventana.
Yo no… - negué pero me interrumpí molesta. Seiya era muy observador. Incomoda le di la información- es una princess Margaret ¿Por qué?
Me agrada. Puede que compre uno o dos arbustos.
¿Quieres comprar rosas?- le pregunté sorprendida.
Para mi jardín. ¿Crecen en macetas?
Me explicó que estaba renovando un lugar que compró como inversión hacia años, antes de irse al extranjero.
Originalmente, era una bodega. La compré a buen precio porque estaba derruida y cerca de unas vías de tren.
¿No te molesta el ruido?
No. Me encanta el sonido de los trenes. De chico, me enloquecían. Claro, nunca vivimos en un sitio tan plebeyo como las vías de un tren. A mis padres no les agradaría un lugar así.
Cualquiera tendría reservas ante un lugar así, pensé; los padres de Seiya Vivian en las zonas residenciales de lujo de Tokio.
Pero eso hace que tu casa sea aun más atractiva ¿verdad?- adiviné.
¿Qué te hace decir eso?-se sorprendió Seiya.
Por lo que veo, a ti te encanta impresionar a tu familia. ¿Qué no eres un poco mayorcito para seguir siendo rebelde?
Seiya rió.
En mi familia o te conformas o te rebelas. Nunca logré conformarme.
No pudo ser tan malo como lo haces ver…- pero me detuve al descubrir que el camino tomado por Seiya me era familiar- ¿A dónde vamos en este breve paseo?- después de todo, el camino llevaba a otros sitios. La mirada de Seiya me dio la respuesta. Mi corazón se aceleró.
¡No!- grité- llévame a casa.
El tema de nuestra discusión es Matt. Y tu nunca lo has visto correr.
¿Verlo correr? La adrenalina inundó mis venas. Me sentí mareada, con nauseas.
No quiero verlo, detén el auto…
Mira- su tono fue razonable- entiendo que sea difícil para ti, después de lo que le pasó a tu marido, pero tienes que verlo correr algún día.
Cuando el tránsito disminuyó de velocidad, tomé el picaporte de la puerta, pero Seiya fue más rápido. Presionó le botón de cerrado de las puertas. La puerta no se movió.
Déjame salir- grité furiosa al ver que la puerta no abría- siento nausea- le advertí.
Hay unos pañuelos desechables en al guantera- no pareció conmoverse ante mi amenaza de que podría vomitar el asiento- pero no creo que devuelvas.
No entraré. No miraré.
Como quieras. Pero como no daré marcha atrás, puedes dejar de hacer berrinches.
El auto se dirigió hacia ele estacionamiento de la pista. En el momento que logré salir, tuve la intención de correr hacia la salida mas próxima. Pero el sonido me detuvo…
El sonido de los autos compitiendo. Era un zumbido distante que se convirtió en un rugido cuando pasaron las toneladas de acero a gran velocidad. Y también sentí el olor de la pista; era tan familiar, como si nunca hubiera dejado de olerlo. Gasolina, aceite y hule lubricado. Era casi como un sabor dulce y amargo en mi boca y en mis narices.
Cuando Seiya me tomó del brazo, lo seguí sin resistirme: estaba bombardeada por las emociones evocadas por la carrera. Alegría, triunfo, desolación, dolor, miedo. Cuando llegamos al césped y nos unimos a los otros espectadores, me encontraba petrificada por el miedo. La última vez que estuve en una pista de carreras, alguien a quien amé, murió.
SAILOR MOON 4EVER- Sailor Outer Scout
- Mensajes : 355
Edad : 37
Sexo :
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
espero les haya agradado amiwas!! que toda la buena vibra llene sus vidas!! nos estamos leyendo!!!
SAILOR MOON 4EVER- Sailor Outer Scout
- Mensajes : 355
Edad : 37
Sexo :
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
amiga me encanto la actualizacion
espero q no te demoras con la proxima!!!
espero q no te demoras con la proxima!!!
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
valio la pena la espera , me gusto el capitulo entiendo que Serena este un poco traumada por lo de Haruka , pero debe entender que Matt debe seguir sus sueños y espero que vuelva a las carreras gracias amiga por la actualizacion
Amy Tsubasa- Sailor Outer Scout
- Mensajes : 470
Edad : 32
Sexo :
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
Hola!!
Hay que emocionante esta la historia,
pobre serena, haber que pasa, cada
vez se pone mas interesante tu historia
y me gusta mucho... continuala pronto, besos...
Hay que emocionante esta la historia,
pobre serena, haber que pasa, cada
vez se pone mas interesante tu historia
y me gusta mucho... continuala pronto, besos...
Seluna_sk- Princesa Serena
- Mensajes : 889
Edad : 30
Sexo :
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
holaa
soy nueva en tu fic
me encanto
espero que puedas actualizar pronto
saludos
soy nueva en tu fic
me encanto
espero que puedas actualizar pronto
saludos
yesi- Sailor Inner Scout
- Mensajes : 136
Edad : 28
Sexo :
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
Olaaa soy nueva en tu fic y es muy bonito me encanto!!!!
actualiza pronto!!!
actualiza pronto!!!
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
Hola!!
espero que estes bien, me gusta mucho
tu historia, espero que la continues pronto!!
besos....!!
espero que estes bien, me gusta mucho
tu historia, espero que la continues pronto!!
besos....!!
Seluna_sk- Princesa Serena
- Mensajes : 889
Edad : 30
Sexo :
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
amiga espero q actualices pront xq tu fic esta
muy bueno y ya te demoraste y quiero sguir leyendo
muy bueno y ya te demoraste y quiero sguir leyendo
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
amiwas!!! aqui les traigo la actualizacion!!! perdon por al demora :[SEREJEM]: pero antes de pasar a la actualizacion, les quiero dar las garcias a tod@s l@s que han leido mi fic, especialmente a:
princesa luna: muchas gracias por tus coments amiwa, espero te agrade este capitulo!!
neo sailor moon: amiwa!!! por fin terminé la actualizacion, espero te guste!!!
amy_tsubasa: amiwa gracias por tus coments, tengo la idea de regresar a serena a las carreras, espero que cuando tenga listo ese capitulo, te guste.
seluna_sk: amiwa, me da mucho gusto saber que te gusta mi fic, muchas gracias por tus comentarios!!!
yesi: gracias por tus coments, y espero leer muchos mas!!
princesaselene: bienvenida a mific, me da mucho gustosaber que te gusto, espero leer mas coments tuyos!!!
Y ahora si, lo prometido es deuda.
princesa luna: muchas gracias por tus coments amiwa, espero te agrade este capitulo!!
neo sailor moon: amiwa!!! por fin terminé la actualizacion, espero te guste!!!
amy_tsubasa: amiwa gracias por tus coments, tengo la idea de regresar a serena a las carreras, espero que cuando tenga listo ese capitulo, te guste.
seluna_sk: amiwa, me da mucho gusto saber que te gusta mi fic, muchas gracias por tus comentarios!!!
yesi: gracias por tus coments, y espero leer muchos mas!!
princesaselene: bienvenida a mific, me da mucho gustosaber que te gusto, espero leer mas coments tuyos!!!
Y ahora si, lo prometido es deuda.
SAILOR MOON 4EVER- Sailor Outer Scout
- Mensajes : 355
Edad : 37
Sexo :
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
CAPITULO 4
La carrera actual terminaría en dos vueltas más. No miré la pista. En un intento de distracción, miré a al gente a mi alrededor, preguntándome cuantos de ellos habrían visto el accidente de Haruka por televisión. Era gente común y corriente. Empecé a sudar y me enjuagué la ceja con dedos temblorosos. Una de las mujeres de edad mediana me miró con preocupación y supuse que debía estar muy pálida.
El ganador recibió aplausos de los espectadores. Eso también era un recuerdo conocido que parte de mí amaba y parte odiaba.
¿No te sientes bien verdad?- Seiya me miró con interés clínico, no con simpatía; eso hizo que me enojara nuevamente.
-nunca sabrás lo que es, ni te importará.
Seiya no me respondió nada, pero cuando los autos que participarían en la siguiente carrera se formaron para el inicio, dijo:
-el auto de Matt es el numero ocho- me pasó un brazo por los hombros ignorando mi intento por volverme. Para eso era ese brazo que me abrazaba; para forzarme, no para consolarme, pensé con amargura.
Intenté no ver, pero mis ojos se desviaron hacia el grupo de autos que revolucionaban sus motores. Cuando la carrera empezó, seguí con la vista el numero ocho. No tuvo buen arrancan, pensé.
-demasiado embrague…-murmuré inconcientemente-le diría a Matt que debería…- sentí la mirada de Seiya e inmediatamente me detuve. Claro que no se lo diría. Aconsejar a Matt acerca de cómo ser más eficiente sería justo lo que nunca haría. Mi ceja estaba mojada por el sudor ahora, y recé por la seguridad de Matt e hice la promesa de que alejaría a Matt del deporte que fue mi propia vida. Pero una parte no reprimida de mi, funcionó de modo independiente y noté las cualidades y defectos del auto y del conductor.
Matt terminó en tercer lugar.
-pensé que lo haría mejor-comentó Seiya.
-está vivo-me alegré al ver que parecía desilusionado con la conducción de Matt- eso es todo lo que me interesa. Eso y asegurarme de que desista.
-pero para su edad y experiencia muestra tener algo de habilidad.
-tiene pocas habilidades- le dije-. Matt tiene talento y buenos reflejos, pero no disciplina. Es un adolescente todavía. Lo que necesita es mejorar su…- me mordí el labio- lo que necesita es dejar de perder el tiempo y concentrarse en sus estudios.
-pero no creo que lo haga-Seiya sonrió y seguí la dirección de su mirada; descubrí que Matt era besado con febril entusiasmo por las chicas fanáticas de las carreras.
-ese es el lado atrayente cuando se es chico. No muchos superan la etapa de sentirse dioses. Es demasiado difícil. Cuando descubren lo duro que es llegar a un nivel decente, abandonan las carreras- le dije un poco agitada, y me di cuenta de que Matt parecía estar muy a gusto en la pista y que era mucho mejor conductor de lo que quería reconocer, ante este hecho, un súbito escalofrío recorrió todo mi ser- ¿nos vamos ahora? No quiero que Matt me vea.
-Mm…-Seiya estaba pensativo- suponiendo que supere la etapa de la admiración, aun esta verde. Lo que necesita es estar en una escuela de conductores decente, un par de años de entrenamiento duro y aun así quizá no sea un ganador.
Al escuchar estas palabras, pensé que eso era algo muy optimista. Ahora me daba cuenta que no había abordado a Seiya de la manera correcta. El estaba orientado a las ganancias y veía el asunto en términos de ganancias para su negocio. Mi problema era que estaba demasiado mezclada en términos emocionales y era claro que las emociones no lo influirían; me esforcé por aclarar mi mente.
-¿Por qué arriesgar el dinero en un novato, cuando hay corredores establecidos que ganan carreras, que atraen a multitudes y que piden a gritos un patrocinio?- le dije al salir del sitio, en un intento de hacerle ver lo que Ensigns podría aprovechar al apoyar a un corredor establecido- .Claro, que deberías de considerar si las carreras de autos te brindaran el tipo de promoción que deseas. Es lógico que las compañías de autopartes, de cigarros y de cerveza patrocinen las carreras; pero ¿también es así con los productos de cuero? No estoy segura.
-¿te refieres a que si se podrán vender las maletas de gimnasia?- murmuró y sus ojos brillaron de diversión.
-Creo que un quipo de futbol seria mejor publicidad- le respondí.
-O un golfista-dijo a su vez Seiya.
-Un golfista sería ideal- acepte con demasiada rapidez. Seiya sonrío y me tomó del brazo.
-Podrías tener razón.- me dijo con una seductora sonrisa, que hizo que me sonrojara e inmediatamente caminé con rapidez. El trauma de esta tarde valdría la pena si lograba desalentar a Seiya, quien a su vez desalentaría a Matt.
-Perdón- una voz jadeó a mis espaldas, justo antes de entrar al estacionamiento. Era la mujer de edad mediana que me miró con fijeza antes-. ¿No es usted serena Tsukino?-la mujer tenia un programa de las carreras y una pluma; sin pensarlo los tomé y firmé. Me quede mirando la firma mientras la mujer se disculpaba por no haberme reconocido antes- ¿regresarás a las carreras serena? Desearía que lo hicieras ¡gracias por el autógrafo!
Solté los objetos y observé a la mujer alejarse.
-Debe ser como andar en bicicleta- comentó Seiya al darse cuenta de la confusión- nunca se olvida.
Mientras tomábamos el camino de regreso a mi casa, me puse a pensar en lo sucedido esta tarde; ¡había pasado tanto tiempo! Como corredora, pertenecía al pasado, pero sólo bastaron unas horas en el autodromo para que mis sentidos reaccionaran como si nunca me hubiera marchado. Di el autógrafo sin dudarlo… Serena Tsukino ¿a caso mis demás reflejos estarían tan fijos en mi como ese? Apreté fuertemente la mandíbula y miré por la ventana del auto. Nunca sabría la respuesta a eso.
Finalmente llegamos a mi casa.
-Adiós- se despidió Seiya- ha sido una tarde reveladora- y diciendo esto se marchó.
¡Así que pensaba que había sido reveladora! Me había expuesto hasta la medula, debilitándome, y llamaba a eso revelador. Seiya tenía tanta sensibilidad como un rinoceronte. Pero, ¿Por qué rebajar a un rinoceronte?, pensé. Al dirigirme al interior de mi casa, vi la rosa que Seiya olió antes. Hermosa, abierta, intacta, se mecía en su tallo largo. Sonreí recordando la forma descuidada con la que Seiya la tomó.
Matt regresó a casa esa tarde y me contó una sarta de mentiras acerca de que había estado estudiando en casa de Chris. La tentación de decirle que ya sabía la verdad era mucha, pero la resistí. Esperaría a que Seiya lo desengañara, para ver que sucedía. Matt, convencido de que al ser el hijo de Haruka Tenou sería apoyado por un patrocinador, quizá perdería el interés al ver que no era así. Y tal vez si esperaba, Matt confiaría en mí. Seguramente, desilusionado, acudiría a mi lado, esto era muy importante para mi.
El lunes, no llevé a Seiya a ninguna parte, ni el martes. El humor de Matt pasaba del jubilo a la culpa, y recordé lo tonta que fui, al haber creído que Matt estaba enamorado. Pero nada sucedió. Perdí el apetito y el sueño, y cuando dormía, aquella pesadilla regresaba una y otra vez.
El miércoles, tenía que llevar a Seiya a una cita de negocios. Me miró con una sonrisa recordatoria.
-Preferiría los pantaloncitos cortos mucho más- comentó al meterse al auto, provocando un leve sonrojo en mí.
-¿ya habló con Matt?- le pregunté en un intento de no recordar el domingo.
-si- me respondió.
-¿Cuándo fue eso?
-el lunes.
-¿lunes?-repetí y me ruboricé. Toda esa espera y preocupación por nada- ¿Por qué no me lo dijiste?
-¿Por qué no te lo dijo Matt?- me preguntó retóricamente.
Era un golpe certero a mi punto más débil. Por el espejo retrovisor nuestras miradas se encontraron; me miraba con el mismo interés y falta de simpatía que me enfurecían. “como madre, eres un fracaso”, parecía decirme Seiya con la mirada.
-No parecía estar muy desilusionado- me aventuré a decir, tragándome todo mi resentimiento.
-El motivo es porque no lo desilusioné por completo.
El Rolls brincó hacia delante y luego los neumáticos rechinaron cuando di un volantazo.
-pero pensé que buscarías un equipo de futbol o un golfista…-dije en un murmullo que apenas era audible.
-Es obvio que ahora no es el momento propicio para discutir el asunto- comentó con sequedad mientras recogía los papeles desparramados por el asiento- de todas formas, tengo muchísimo trabajo ¿Qué te parece si esta noche voy a tu casa y hablamos del tema?
Con mucha facilidad, me ignoró, a punto de estallar le dije.
-Quizá no convenga que vayas a mi casa.
-¿A caso esta noche peleas en lodo?-me dijo con una gran sonrisa, el hecho de que pudiera ser gracioso en un momento como este sólo aumentó mi enojo.
-Dime lo que le dijiste a Matt- le exigí.
-No mientras conduces. Tengo fuertes instintos de supervivencia- y diciendo eso, nuevamente me ignoro.
-Está bien, detendré el auto y entonces podrás contármelo.
-Serena Tsukino- dijo mi nombre un poco molesto- harás tu trabajo por el cual recibes un salario y conducirás.
Lo miré con odio por el espejo retrovisor, tipejo dictatorial, pensé. No era mucho pedir que se detuvieran unos minutos para que dejara de angustiarme. Pero, a menos de secuestrarlo, tendría que esperar la noche. Secuestro. Pensé en la idea por unos minutos. Yo controlaba el coche, y el más o menos estaba atrapado en la parte trasera del auto. Entonces… pensé en los argumentos éticos, pero los deseché al pensar que solo eran justicia poética. Unos cuantos minutos después, cambié de dirección. Seiya, que miraba un montón de papeles, no se dio cuenta. Ni cuando llegamos al parque numero 10, el alzó la vista. No lo hizo sino hasta que el Rolls se detuvo.
Tomé las llaves del auto y los duplicados que se hallaban en la guantera y abrí la puerta. Un Seiya Kou incrédulo salió del auto. Con los hombros tensos habría sido la viva imagen de un toro a punto de atacar.
-¿Qué rayos estamos haciendo en un parque para niños?- preguntó al señalar los columpios y demás juegos.
-¿Qué quisiste decir con eso de que no desilusionaste por completo a Matt?- insistí.
Seiya me miró con fijeza.
-¿a caso debo entender que estas en huelga?
-Tu aceptaste que Matt está todavía verde y que seria mejor patrocinar a un golfista, así que, ¿Por qué no le dijiste que no estabas interesado en el?
Seiya se puso las manos en las caderas; era un gesto amenazador. Eso acentuaba lo ancho de sus hombros y agrandaba su pecho, haciéndome sentir insegura.
-¿Por qué yo?- dijo dramáticamente mientras miraba al cielo- ¿Por qué yo tuve que tener como chofer a una mujer loca, con un pasado difícil? Diablos, al principio me pareció ser una persona normal -acusó- luego al veo en al oficina de Darién, después entra a mi oficina e intenta golpearme, después resulta que eres una antigua corredora de autos con un hijastro, quien acude a mi para que lo patrocine. Es como una telenovela que sigue y sigue… creo que Darién te ordenó ser mi chofer a propósito, para lograr que, con tanta presión, yo desista- negó con exasperación- y pensar que estuve apunto de invitarla a cenar… en algún sitio tranquilo, quizá a bailar- se rió con burla- ¡que desastre habría sido!
-no se planteó nunca el desastre, por que si mal no recuerdo yo me negué- dije acaloradamente.
-Habría podido hacerte cambiar de idea, de haber insistido.
-eres….- en ese momento me encontraba realmente furiosa, así que casi gritando le dije- ¡un presumido e ignorante! Tu eres uno de eso hombres primitivos que sigue creyendo que cuando una mujer dice no, lo que quiere decir es sí. Pues bien, déjame decirte que…
En ese instante me interrumpió.
-Ahórrame la actuación- dijo mirando nuevamente al cielo- ya tengo bastante con intentar que Darién y el consejo entren al siglo veintiuno. No tengo necesidad de un drama extra. Lo que requiero es de un chofer amable, callado eficiente que no me de problemas, y una mujer calida y estable que se apasione por algo mas que su vida domestica.
-En otras palabras, estas buscando un tapete que diga “bienvenido”- me burlé- si tan a disgusto estas conmigo ¿Por qué no has pedido que te asignen otro chofer?
Vi como ladeó la cabeza y me recorrió con la mirada, provocando que me sonrojara.
-Los demás tienen piernas velludas- dijo divertido por su comentario. Causando que me molestara.
-Quiero saber lo que le dijo a Matt- insistí con una firmeza, que estaba lejos de sentir. Me sentía un poco mareada por estar en el sol. No dormí lo suficiente, no desayuné y estaba soportando a Seiya… una combinación perfecta para marear a cualquiera.
-Ya te lo dije… lo discutiremos esta noche- miró su reloj y se enojó- ya estoy retrasado en mi cita, así que déjate de tonterías y llévame a Takatsu o te quitaré las llaves por la fuerza y conduciré.
Esperó por un momento y luego se inclinó hacia mí para tomar las llaves. Retrocedí un poco, me abrí los dos primeros botones de la blusa y metí las llaves del Rolls en la copa derecha de mi sostén y las de repuesto en al izquierda.
-Allí se quedarán hasta que me cuente lo sucedido- afirmé, conciente de que el ultimátum perdió un poco de fuerza al respingar porque la punta de una llave me lastimó.
Hubo una larga pausa. Moví mi hombro en un esfuerzo discreto de que la llave bajara. Seiya se apoyó en el auto y me miró cruzando los pies.
-No se si sentirme alagado o insultado…- empezó a decir Seiya.
Flexioné mi caja torácica, pero la llave conservó su doloroso lugar.
-…de que pienses que eso está a salvo allí- estudió con los ojos el frente de la blusa- me refiero a las llaves- añadió Seiya con sarcasmo e hizo una pausa para que entendiera el doble significado- o bien crees que soy un caballero o que me intimida la idea de hurgar en un sostén ocupado.
Ese comentario me causo un gran sonrojo ¿hurgar en un sostén ocupado? Miré sus manos largas y hábiles y retrocedí un paso. Si se proponía quitármelas ¿logaría meterme en el auto primero? Seiya sonrió con malicia al ver como medía con la vista la distancia.
-te daré una ventaja de diez segundos, si quieres- me ofreció.
-Este no es motivo de bromas. Tu señalaste que un golfista seria mejor idea.
-Cambié de opinión.
-¡¿Por qué?!
-Soy un masoquista- se burló- no pude resistirme a un chico insistente de diecisiete años y a su madrastra traumada.
Al escuchar esto, me llevé una mano a los ojos, con un temblor.
-¿de nuevo actúas? Olvídalo… soy demasiado astuto para ser engañado con el truco de la tragedia de la heroína.
-¿Qué?- mi mente se encontraba en blanco.
-mira… hablé de nuevo con Matt y quedé impresionado. Parece decidido a correr, decidido a hacerlo a espaldas de ti, y arriesgarse a soportar tu ira. De alguna manera, tiene intenciones de conseguir un financiamiento. Me dijo que desea ser el mejor, como su padre.
Me tambalee y alargue una mano en busca de apoyo, peor no hallé ninguno.
-Solo es una fase por la que atraviesa- comenté con desesperación- casi todos los chicos desean ser un corredor de autos, un astronauta o un cantante. El compró una guitarra eléctrica, aprendió unas notas, formó una banda y perdió el interés en ello; todo ocurrió en cuatro meses, el año pasado. Y perderá el interés si se le deja en paz…
-¿Y que harás si no lo pierde? Pronto cumplirá dieciocho años y legalmente puede realizar cualquier trato que desee. Cuanto mas pronto enfrentes ese hecho, mas pronto podrás hacer algo para protegerlo, ¿A caso preferirías enterrar la cabeza en la arena y dejar que Matt tome decisiones desastrosas para su futuro?
La tensión de los últimos tres años hacia presión sobre mi pecho y me cortaba el aliento.
-No tienes ni un gramo de simpatía ¿verdad?-alcancé a decir.
-No es simpatía lo que se necesita- replicó- por lo que veo, parece que la gente te ha tratado con delicadeza en estos años y ha permitido que te escondas en un mundo de fantasía de casas cubiertas de rosas y un suburbio seguro. ¿De verdad pensaste que Matt, con sus antecedentes, quedaría satisfecho con rosas y un trabajo de nueve a cinco? ¿O a caso eres demasiado egoísta para que eso te importe?
-¿Egoísta? ¿Cómo te atreves a decir?...
-Matt sufre mucho al pensar solo en la forma como te dirá que desea lo único que tú odias. La culpa lo roe y cada vez que logra controlarla, supongo, que tu despiertas después de una terrible pesadilla a gritos, algo muy conveniente, y de nuevo él se siente como un canalla. Ya pasaron tres años ¿Qué no es hora de que las pesadillas terminen, sin importar si son genuinas o fingidas?
-¿Genuinas?- me sentí herida-¿Qué es lo que implicas?
-Digo que es muy sencillo manipular a Matt, que se debate entre lo que quiere y el deseo de protegerla.
Palidecí ante este comentario.
-Tú no sabes nada… yo desearía que no fueran genuinas. Desearía que mis sueños terminaran. Nunca usaría algo así para entristecer a Matt. Trato de ocultarle las pesadillas, maldita sea- sollocé y Seiya parpadeó un poco y frunció el ceño.
-Tú tienes la experiencia para ayudar a Matt- Seiya suavizó un poco la voz- deja de fingir que eres un ama de casa con un hijo que será contador. Tú eres una antigua corredora y Matt es un futuro corredor.
-No. ¡No!- el paisaje tranquilo se onduló, y cerré los ojos- no Matt también… no podría soportarlo- hubo un zumbido en mis oídos y supe que caía; entonces recibí el soporte que deseaba, sentí el brazo que rodeaba mi cintura. Fui abrazada por un cuerpo calido y fuerte que olía muy bien, muy masculino. Sentí un dolor agudo en el pecho, antes de que todo se oscureciera.
La carrera actual terminaría en dos vueltas más. No miré la pista. En un intento de distracción, miré a al gente a mi alrededor, preguntándome cuantos de ellos habrían visto el accidente de Haruka por televisión. Era gente común y corriente. Empecé a sudar y me enjuagué la ceja con dedos temblorosos. Una de las mujeres de edad mediana me miró con preocupación y supuse que debía estar muy pálida.
El ganador recibió aplausos de los espectadores. Eso también era un recuerdo conocido que parte de mí amaba y parte odiaba.
¿No te sientes bien verdad?- Seiya me miró con interés clínico, no con simpatía; eso hizo que me enojara nuevamente.
-nunca sabrás lo que es, ni te importará.
Seiya no me respondió nada, pero cuando los autos que participarían en la siguiente carrera se formaron para el inicio, dijo:
-el auto de Matt es el numero ocho- me pasó un brazo por los hombros ignorando mi intento por volverme. Para eso era ese brazo que me abrazaba; para forzarme, no para consolarme, pensé con amargura.
Intenté no ver, pero mis ojos se desviaron hacia el grupo de autos que revolucionaban sus motores. Cuando la carrera empezó, seguí con la vista el numero ocho. No tuvo buen arrancan, pensé.
-demasiado embrague…-murmuré inconcientemente-le diría a Matt que debería…- sentí la mirada de Seiya e inmediatamente me detuve. Claro que no se lo diría. Aconsejar a Matt acerca de cómo ser más eficiente sería justo lo que nunca haría. Mi ceja estaba mojada por el sudor ahora, y recé por la seguridad de Matt e hice la promesa de que alejaría a Matt del deporte que fue mi propia vida. Pero una parte no reprimida de mi, funcionó de modo independiente y noté las cualidades y defectos del auto y del conductor.
Matt terminó en tercer lugar.
-pensé que lo haría mejor-comentó Seiya.
-está vivo-me alegré al ver que parecía desilusionado con la conducción de Matt- eso es todo lo que me interesa. Eso y asegurarme de que desista.
-pero para su edad y experiencia muestra tener algo de habilidad.
-tiene pocas habilidades- le dije-. Matt tiene talento y buenos reflejos, pero no disciplina. Es un adolescente todavía. Lo que necesita es mejorar su…- me mordí el labio- lo que necesita es dejar de perder el tiempo y concentrarse en sus estudios.
-pero no creo que lo haga-Seiya sonrió y seguí la dirección de su mirada; descubrí que Matt era besado con febril entusiasmo por las chicas fanáticas de las carreras.
-ese es el lado atrayente cuando se es chico. No muchos superan la etapa de sentirse dioses. Es demasiado difícil. Cuando descubren lo duro que es llegar a un nivel decente, abandonan las carreras- le dije un poco agitada, y me di cuenta de que Matt parecía estar muy a gusto en la pista y que era mucho mejor conductor de lo que quería reconocer, ante este hecho, un súbito escalofrío recorrió todo mi ser- ¿nos vamos ahora? No quiero que Matt me vea.
-Mm…-Seiya estaba pensativo- suponiendo que supere la etapa de la admiración, aun esta verde. Lo que necesita es estar en una escuela de conductores decente, un par de años de entrenamiento duro y aun así quizá no sea un ganador.
Al escuchar estas palabras, pensé que eso era algo muy optimista. Ahora me daba cuenta que no había abordado a Seiya de la manera correcta. El estaba orientado a las ganancias y veía el asunto en términos de ganancias para su negocio. Mi problema era que estaba demasiado mezclada en términos emocionales y era claro que las emociones no lo influirían; me esforcé por aclarar mi mente.
-¿Por qué arriesgar el dinero en un novato, cuando hay corredores establecidos que ganan carreras, que atraen a multitudes y que piden a gritos un patrocinio?- le dije al salir del sitio, en un intento de hacerle ver lo que Ensigns podría aprovechar al apoyar a un corredor establecido- .Claro, que deberías de considerar si las carreras de autos te brindaran el tipo de promoción que deseas. Es lógico que las compañías de autopartes, de cigarros y de cerveza patrocinen las carreras; pero ¿también es así con los productos de cuero? No estoy segura.
-¿te refieres a que si se podrán vender las maletas de gimnasia?- murmuró y sus ojos brillaron de diversión.
-Creo que un quipo de futbol seria mejor publicidad- le respondí.
-O un golfista-dijo a su vez Seiya.
-Un golfista sería ideal- acepte con demasiada rapidez. Seiya sonrío y me tomó del brazo.
-Podrías tener razón.- me dijo con una seductora sonrisa, que hizo que me sonrojara e inmediatamente caminé con rapidez. El trauma de esta tarde valdría la pena si lograba desalentar a Seiya, quien a su vez desalentaría a Matt.
-Perdón- una voz jadeó a mis espaldas, justo antes de entrar al estacionamiento. Era la mujer de edad mediana que me miró con fijeza antes-. ¿No es usted serena Tsukino?-la mujer tenia un programa de las carreras y una pluma; sin pensarlo los tomé y firmé. Me quede mirando la firma mientras la mujer se disculpaba por no haberme reconocido antes- ¿regresarás a las carreras serena? Desearía que lo hicieras ¡gracias por el autógrafo!
Solté los objetos y observé a la mujer alejarse.
-Debe ser como andar en bicicleta- comentó Seiya al darse cuenta de la confusión- nunca se olvida.
Mientras tomábamos el camino de regreso a mi casa, me puse a pensar en lo sucedido esta tarde; ¡había pasado tanto tiempo! Como corredora, pertenecía al pasado, pero sólo bastaron unas horas en el autodromo para que mis sentidos reaccionaran como si nunca me hubiera marchado. Di el autógrafo sin dudarlo… Serena Tsukino ¿a caso mis demás reflejos estarían tan fijos en mi como ese? Apreté fuertemente la mandíbula y miré por la ventana del auto. Nunca sabría la respuesta a eso.
Finalmente llegamos a mi casa.
-Adiós- se despidió Seiya- ha sido una tarde reveladora- y diciendo esto se marchó.
¡Así que pensaba que había sido reveladora! Me había expuesto hasta la medula, debilitándome, y llamaba a eso revelador. Seiya tenía tanta sensibilidad como un rinoceronte. Pero, ¿Por qué rebajar a un rinoceronte?, pensé. Al dirigirme al interior de mi casa, vi la rosa que Seiya olió antes. Hermosa, abierta, intacta, se mecía en su tallo largo. Sonreí recordando la forma descuidada con la que Seiya la tomó.
Matt regresó a casa esa tarde y me contó una sarta de mentiras acerca de que había estado estudiando en casa de Chris. La tentación de decirle que ya sabía la verdad era mucha, pero la resistí. Esperaría a que Seiya lo desengañara, para ver que sucedía. Matt, convencido de que al ser el hijo de Haruka Tenou sería apoyado por un patrocinador, quizá perdería el interés al ver que no era así. Y tal vez si esperaba, Matt confiaría en mí. Seguramente, desilusionado, acudiría a mi lado, esto era muy importante para mi.
El lunes, no llevé a Seiya a ninguna parte, ni el martes. El humor de Matt pasaba del jubilo a la culpa, y recordé lo tonta que fui, al haber creído que Matt estaba enamorado. Pero nada sucedió. Perdí el apetito y el sueño, y cuando dormía, aquella pesadilla regresaba una y otra vez.
El miércoles, tenía que llevar a Seiya a una cita de negocios. Me miró con una sonrisa recordatoria.
-Preferiría los pantaloncitos cortos mucho más- comentó al meterse al auto, provocando un leve sonrojo en mí.
-¿ya habló con Matt?- le pregunté en un intento de no recordar el domingo.
-si- me respondió.
-¿Cuándo fue eso?
-el lunes.
-¿lunes?-repetí y me ruboricé. Toda esa espera y preocupación por nada- ¿Por qué no me lo dijiste?
-¿Por qué no te lo dijo Matt?- me preguntó retóricamente.
Era un golpe certero a mi punto más débil. Por el espejo retrovisor nuestras miradas se encontraron; me miraba con el mismo interés y falta de simpatía que me enfurecían. “como madre, eres un fracaso”, parecía decirme Seiya con la mirada.
-No parecía estar muy desilusionado- me aventuré a decir, tragándome todo mi resentimiento.
-El motivo es porque no lo desilusioné por completo.
El Rolls brincó hacia delante y luego los neumáticos rechinaron cuando di un volantazo.
-pero pensé que buscarías un equipo de futbol o un golfista…-dije en un murmullo que apenas era audible.
-Es obvio que ahora no es el momento propicio para discutir el asunto- comentó con sequedad mientras recogía los papeles desparramados por el asiento- de todas formas, tengo muchísimo trabajo ¿Qué te parece si esta noche voy a tu casa y hablamos del tema?
Con mucha facilidad, me ignoró, a punto de estallar le dije.
-Quizá no convenga que vayas a mi casa.
-¿A caso esta noche peleas en lodo?-me dijo con una gran sonrisa, el hecho de que pudiera ser gracioso en un momento como este sólo aumentó mi enojo.
-Dime lo que le dijiste a Matt- le exigí.
-No mientras conduces. Tengo fuertes instintos de supervivencia- y diciendo eso, nuevamente me ignoro.
-Está bien, detendré el auto y entonces podrás contármelo.
-Serena Tsukino- dijo mi nombre un poco molesto- harás tu trabajo por el cual recibes un salario y conducirás.
Lo miré con odio por el espejo retrovisor, tipejo dictatorial, pensé. No era mucho pedir que se detuvieran unos minutos para que dejara de angustiarme. Pero, a menos de secuestrarlo, tendría que esperar la noche. Secuestro. Pensé en la idea por unos minutos. Yo controlaba el coche, y el más o menos estaba atrapado en la parte trasera del auto. Entonces… pensé en los argumentos éticos, pero los deseché al pensar que solo eran justicia poética. Unos cuantos minutos después, cambié de dirección. Seiya, que miraba un montón de papeles, no se dio cuenta. Ni cuando llegamos al parque numero 10, el alzó la vista. No lo hizo sino hasta que el Rolls se detuvo.
Tomé las llaves del auto y los duplicados que se hallaban en la guantera y abrí la puerta. Un Seiya Kou incrédulo salió del auto. Con los hombros tensos habría sido la viva imagen de un toro a punto de atacar.
-¿Qué rayos estamos haciendo en un parque para niños?- preguntó al señalar los columpios y demás juegos.
-¿Qué quisiste decir con eso de que no desilusionaste por completo a Matt?- insistí.
Seiya me miró con fijeza.
-¿a caso debo entender que estas en huelga?
-Tu aceptaste que Matt está todavía verde y que seria mejor patrocinar a un golfista, así que, ¿Por qué no le dijiste que no estabas interesado en el?
Seiya se puso las manos en las caderas; era un gesto amenazador. Eso acentuaba lo ancho de sus hombros y agrandaba su pecho, haciéndome sentir insegura.
-¿Por qué yo?- dijo dramáticamente mientras miraba al cielo- ¿Por qué yo tuve que tener como chofer a una mujer loca, con un pasado difícil? Diablos, al principio me pareció ser una persona normal -acusó- luego al veo en al oficina de Darién, después entra a mi oficina e intenta golpearme, después resulta que eres una antigua corredora de autos con un hijastro, quien acude a mi para que lo patrocine. Es como una telenovela que sigue y sigue… creo que Darién te ordenó ser mi chofer a propósito, para lograr que, con tanta presión, yo desista- negó con exasperación- y pensar que estuve apunto de invitarla a cenar… en algún sitio tranquilo, quizá a bailar- se rió con burla- ¡que desastre habría sido!
-no se planteó nunca el desastre, por que si mal no recuerdo yo me negué- dije acaloradamente.
-Habría podido hacerte cambiar de idea, de haber insistido.
-eres….- en ese momento me encontraba realmente furiosa, así que casi gritando le dije- ¡un presumido e ignorante! Tu eres uno de eso hombres primitivos que sigue creyendo que cuando una mujer dice no, lo que quiere decir es sí. Pues bien, déjame decirte que…
En ese instante me interrumpió.
-Ahórrame la actuación- dijo mirando nuevamente al cielo- ya tengo bastante con intentar que Darién y el consejo entren al siglo veintiuno. No tengo necesidad de un drama extra. Lo que requiero es de un chofer amable, callado eficiente que no me de problemas, y una mujer calida y estable que se apasione por algo mas que su vida domestica.
-En otras palabras, estas buscando un tapete que diga “bienvenido”- me burlé- si tan a disgusto estas conmigo ¿Por qué no has pedido que te asignen otro chofer?
Vi como ladeó la cabeza y me recorrió con la mirada, provocando que me sonrojara.
-Los demás tienen piernas velludas- dijo divertido por su comentario. Causando que me molestara.
-Quiero saber lo que le dijo a Matt- insistí con una firmeza, que estaba lejos de sentir. Me sentía un poco mareada por estar en el sol. No dormí lo suficiente, no desayuné y estaba soportando a Seiya… una combinación perfecta para marear a cualquiera.
-Ya te lo dije… lo discutiremos esta noche- miró su reloj y se enojó- ya estoy retrasado en mi cita, así que déjate de tonterías y llévame a Takatsu o te quitaré las llaves por la fuerza y conduciré.
Esperó por un momento y luego se inclinó hacia mí para tomar las llaves. Retrocedí un poco, me abrí los dos primeros botones de la blusa y metí las llaves del Rolls en la copa derecha de mi sostén y las de repuesto en al izquierda.
-Allí se quedarán hasta que me cuente lo sucedido- afirmé, conciente de que el ultimátum perdió un poco de fuerza al respingar porque la punta de una llave me lastimó.
Hubo una larga pausa. Moví mi hombro en un esfuerzo discreto de que la llave bajara. Seiya se apoyó en el auto y me miró cruzando los pies.
-No se si sentirme alagado o insultado…- empezó a decir Seiya.
Flexioné mi caja torácica, pero la llave conservó su doloroso lugar.
-…de que pienses que eso está a salvo allí- estudió con los ojos el frente de la blusa- me refiero a las llaves- añadió Seiya con sarcasmo e hizo una pausa para que entendiera el doble significado- o bien crees que soy un caballero o que me intimida la idea de hurgar en un sostén ocupado.
Ese comentario me causo un gran sonrojo ¿hurgar en un sostén ocupado? Miré sus manos largas y hábiles y retrocedí un paso. Si se proponía quitármelas ¿logaría meterme en el auto primero? Seiya sonrió con malicia al ver como medía con la vista la distancia.
-te daré una ventaja de diez segundos, si quieres- me ofreció.
-Este no es motivo de bromas. Tu señalaste que un golfista seria mejor idea.
-Cambié de opinión.
-¡¿Por qué?!
-Soy un masoquista- se burló- no pude resistirme a un chico insistente de diecisiete años y a su madrastra traumada.
Al escuchar esto, me llevé una mano a los ojos, con un temblor.
-¿de nuevo actúas? Olvídalo… soy demasiado astuto para ser engañado con el truco de la tragedia de la heroína.
-¿Qué?- mi mente se encontraba en blanco.
-mira… hablé de nuevo con Matt y quedé impresionado. Parece decidido a correr, decidido a hacerlo a espaldas de ti, y arriesgarse a soportar tu ira. De alguna manera, tiene intenciones de conseguir un financiamiento. Me dijo que desea ser el mejor, como su padre.
Me tambalee y alargue una mano en busca de apoyo, peor no hallé ninguno.
-Solo es una fase por la que atraviesa- comenté con desesperación- casi todos los chicos desean ser un corredor de autos, un astronauta o un cantante. El compró una guitarra eléctrica, aprendió unas notas, formó una banda y perdió el interés en ello; todo ocurrió en cuatro meses, el año pasado. Y perderá el interés si se le deja en paz…
-¿Y que harás si no lo pierde? Pronto cumplirá dieciocho años y legalmente puede realizar cualquier trato que desee. Cuanto mas pronto enfrentes ese hecho, mas pronto podrás hacer algo para protegerlo, ¿A caso preferirías enterrar la cabeza en la arena y dejar que Matt tome decisiones desastrosas para su futuro?
La tensión de los últimos tres años hacia presión sobre mi pecho y me cortaba el aliento.
-No tienes ni un gramo de simpatía ¿verdad?-alcancé a decir.
-No es simpatía lo que se necesita- replicó- por lo que veo, parece que la gente te ha tratado con delicadeza en estos años y ha permitido que te escondas en un mundo de fantasía de casas cubiertas de rosas y un suburbio seguro. ¿De verdad pensaste que Matt, con sus antecedentes, quedaría satisfecho con rosas y un trabajo de nueve a cinco? ¿O a caso eres demasiado egoísta para que eso te importe?
-¿Egoísta? ¿Cómo te atreves a decir?...
-Matt sufre mucho al pensar solo en la forma como te dirá que desea lo único que tú odias. La culpa lo roe y cada vez que logra controlarla, supongo, que tu despiertas después de una terrible pesadilla a gritos, algo muy conveniente, y de nuevo él se siente como un canalla. Ya pasaron tres años ¿Qué no es hora de que las pesadillas terminen, sin importar si son genuinas o fingidas?
-¿Genuinas?- me sentí herida-¿Qué es lo que implicas?
-Digo que es muy sencillo manipular a Matt, que se debate entre lo que quiere y el deseo de protegerla.
Palidecí ante este comentario.
-Tú no sabes nada… yo desearía que no fueran genuinas. Desearía que mis sueños terminaran. Nunca usaría algo así para entristecer a Matt. Trato de ocultarle las pesadillas, maldita sea- sollocé y Seiya parpadeó un poco y frunció el ceño.
-Tú tienes la experiencia para ayudar a Matt- Seiya suavizó un poco la voz- deja de fingir que eres un ama de casa con un hijo que será contador. Tú eres una antigua corredora y Matt es un futuro corredor.
-No. ¡No!- el paisaje tranquilo se onduló, y cerré los ojos- no Matt también… no podría soportarlo- hubo un zumbido en mis oídos y supe que caía; entonces recibí el soporte que deseaba, sentí el brazo que rodeaba mi cintura. Fui abrazada por un cuerpo calido y fuerte que olía muy bien, muy masculino. Sentí un dolor agudo en el pecho, antes de que todo se oscureciera.
SAILOR MOON 4EVER- Sailor Outer Scout
- Mensajes : 355
Edad : 37
Sexo :
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
ESPERO LES HAYA GUSTADO AMIWAS!!! PROMETO NO TARDARME TANTO CON LA PROXIMA ACTUALIZACION!!! SALUDOS AMIWAS!!! QUE TODA LA BUENA VIBRA LLENE SUS VIDAS!!! NOS ESTAMOS LEYENDO!!!
SAILOR MOON 4EVER- Sailor Outer Scout
- Mensajes : 355
Edad : 37
Sexo :
bombon95- Neo Reina Serena
- Mensajes : 4135
Edad : 29
Sexo :
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
amiga me encanto la actualizacion
estuvo super!!!!
espero no te tardes en la proxima actualizacion
estuvo super!!!!
espero no te tardes en la proxima actualizacion
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
Me Encanto !!
No Puedo Esperar A Que Actualizes !
Saludos
Espero Que Estes Bien
yesi- Sailor Inner Scout
- Mensajes : 136
Edad : 28
Sexo :
Re: MI ADORABLE CHOFER EPILOGO (S/S) Angst WAFF
Hola!!
Me gusto mucho el capitulo,
muy interesante ahora, que
pasara?? que hara serena??
que pasara con matt??
waaaa..... muy buena
cuidate, saluditos, besitos...!!
Me gusto mucho el capitulo,
muy interesante ahora, que
pasara?? que hara serena??
que pasara con matt??
waaaa..... muy buena
cuidate, saluditos, besitos...!!
Seluna_sk- Princesa Serena
- Mensajes : 889
Edad : 30
Sexo :
Página 2 de 7. • 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7
Temas similares
» EL TRIANGULO DE LA LUZ WAFF/ANGST/PFF/X-OVER
» EL JEFE Y YO [S/D] Angst y WAFF COMPLETADO
» El amor más grande [S/D] [Angst] [WAFF]
» Entre 2 amores [S/D/S] [Angst][WAFF] Cap. 44 FINAL PARTE II
» NO PUEDO VIVIR SIN TI [S/D] [Angst /WAFF]
» EL JEFE Y YO [S/D] Angst y WAFF COMPLETADO
» El amor más grande [S/D] [Angst] [WAFF]
» Entre 2 amores [S/D/S] [Angst][WAFF] Cap. 44 FINAL PARTE II
» NO PUEDO VIVIR SIN TI [S/D] [Angst /WAFF]
Página 2 de 7.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
|
|