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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por usagui_px Sáb Nov 28, 2009 10:24 pm
hola amiga ahora si ya me lei los capitulos mas actuales no me lo imaginaba!!! y primero opense que diamante era el novio de serena ahora ya se que es seiya pero te encanta dejarme intrigada ¿quien es la chica? o no mi darien ¿se enamorara de ella? creo que las chicas tienen razon ojala serena no tarde en darse cuenta de su error saludos!!1
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por Usako Tenoh Mar Dic 01, 2009 12:15 am
HOLA CHICAS, TRAIGO EL CUARTO CAPITULO, YA SE QUE ESTA VEZ ME TARDE, LA VERDAD ES QUE NO TENGO ESCUSAS, ESPERO QUE LES GUSTE, PORQUE YO SIENTO QUE ALGO LE FALTO, PERO BUENO ESPERU SU VALIOSISIMA OPINION BESOS BYE
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Disclaimer: Sailor Moon es propiedad de Naoko Takeuchi.
Capitulo 4: Quiero saber de ti
Con la vista perdida y muy inmerso en sus pensamientos se encontraba Darien esperando a su acompañante, mientras tomaba el café y recordaba a la mujer que amaba, en aquel momento que una vez fue el más feliz de su vida y ahora le desmoronaba el alma. Las imágenes se revolvían en su mente y las palabras llegaban a su memoria, taladrándole el corazón por lo que una vez significaron. Cualquiera hubiera creído que con el tiempo estos se irían desvaneciendo, pero la realidad era que cada vez se hacían más nítidos.
— Darién, ¿verdad que nunca me vas a dejar?— resonaba en su mente esa pregunta, al igual que la respuesta.
— No Serena, nunca… Como podría hacerlo si eres la luz que ilumina mi vida, la razón de mi existencia. Sin ti la vida es nada.
—Mi Darién, me haces feliz, muy feliz. Yo también te amo mucho Darién, y nunca, nunca te voy a dejar. No hay otro hombre con el que yo quiera estar si no es contigo, pero me gustaría que me lo dijeras más seguido, sin necesidad de que te lo preguntara.
Él había sonreído ante la petición de su novia de forma dulce y luego le había dado un profundo beso.
Sonrió ante el recuerdo que ahora parecía producto de su imaginación, regresando a la realidad tras el llamado de su bella acompañante que acababa de llegar.
— Discúlpame Darién, es que con mis hermanas de visita, es difícil hacer mis labores cotidianas sin ser cuestionada.
— Descuida, acabo de llegar—respondió de forma educada, mientras sonreía con amabilidad.
— Mentiroso. Sé que tú eres muy puntual, así que debes de llevar un buen rato esperándome.
— Bueno Karmesite, digamos entonces que estoy acostumbrado a esperar —le confesó, restándole importancia al asunto.
— Vaya, vaya. ¿Quién aparte de mí, dejaría al apuesto Darién Chiba esperando?
Una sonrisa apenas visible se dibujó en el joven rostro del hombre. Serena casi siempre llegaba retrasada a sus citas y cuando llegaba temprano era sin duda un acontecimiento.
— Tú siempre tan directa con tus comentarios, pero dime ¿Quien fue la que te cuestionó esta vez? Kalaberite, Berjerite, o Petzite.
Karmesite soltó una risita divertida. Le había contado a Darién que tenía tres hermanas y se las había descrito con lujo de detalle, por lo que no le extrañaría si al final resultaba que las conocía mejor que ella. Después de reírse un poco, respondió.
— Berjerite… ya sabes que es la más curiosa. Pero no Darién Chiba, esta vez no me vas a sacar la vuelta —dijo lo último en forma más fuerte y a modo de reclamo, al tiempo que cruzaba sus brazos y hacía un gracioso puchero de indignación.
— ¿A qué te refieres? — preguntó evadiendo su mirada y fingiendo no entender.
— No te hagas el tonto Darién, nos conocemos hace tres meses y tú ya sabes todo de mi vida, en cambio yo, además de saber que eres mi vecino, estudias aquí por una beca, eres huérfano y sin más familia que tu prima. No conozco más de ti, así que creo que tengo derecho a saber más, además me lo debes por haberme tumbado en el aeropuerto el día que nos conocimos, porque recuerda que te dije que te lo iba a cobrar
Sí, como olvidar aquella amenaza, si había sido de lo más cómica diciéndoselo a viva voz, ocasionando las miradas curiosas de la gente del aeropuerto.
— Lo recuerdo, pero… —no concluyó la frase, quedándose un momento en silencio, dudando si debía o no confiar. Optó por acceder, después de todo, necesitaba hablar con alguien neutral—. Tienes razón. Dime ¿qué quieres saber?
— Perfecto, ya que estás disponible, iré al tocador y luego me dedico a escucharte. Tenemos toda la tarde.
Karmesite se levantó de su asiento, Darién la vio alejarse en medio de la gente, y como accidentalmente chocó con un mesero, eso ocasionó que las imágenes del pasado llegaran una vez más a su mente.
Se escabullía apresurado entre la gente que se encontraba dentro de las instalaciones del Crown Center, chocando con una de las meseras —. Disculpe no fue mi intención —le gritó, ya que no se detuvo junto a ella, siguiendo su paso apresurado.
— Lo lamento Serena, el profesor extendió la clase —se apresuró a explicar.
— Descuida Darién, tú siempre eres el que espera. Es justo que yo lo haga ahora.
— Gracias —estuvo a punto de agregar un apelativo cariñoso, pero no lo hizo porque su experiencia le decía que no todas las mujeres gustaban de arrumacos en público. Si tan sólo hubiera comprendido que Serena era distinta, no hubiera dudado en decirlo. Sin embargo, tenía un detalle para ella y agregó —. De todos modos te traje un detalle para disculparme.
Darién le entregó una rosa roja y una tarjeta que decía: "Para la única mujer que hace vibrar mi corazón”. Esto ocasionó que la chica se emocionara.
Esas eran las cosas que Darien hacía para alimentar su relación. Tal vez en público era frio y distante con ella pero a solas, solía tener los más extraordinarios detalles. Ella en un impulso lo abrazó mientras dijo:
— Gracias Darien. Mira, siente —tomó la mano del joven y la llevó a su corazón—. ¿Lo sientes? Hace boom-boom-boom. Tú eres el único que logra hacer latir mi corazón de esta manera.
Al joven le brillaron los ojos de emoción y solo respondió:
— Te amo Serena —dándole un casto beso.
Nuevamente la voz de su acompañante lo trajo a la actualidad.
— Ya estoy aquí de vuelta y esta vez no te me vas a escapar —amenazó, señalando con el dedo índice
—Claro, te dije que esta vez te diría todo, pero hazme un favor. Salgamos de aquí, te invito a tomar un té a mi departamento.
La chica se puso algo nerviosa. No es que él fuera un desconocido o que pensara que tuviera turbias intenciones para con ella, pero la sola idea de pisar el departamento del chico que la atraía de una forma inexplicable, la ponía algo tensa.
— A... a… ¿A tu departamento? —cuestionó con tartamudez, ocasionando la diversión del apuesto joven que tenía en frente.
—Tranquila, no te voy a comer —bromeó para aligerar el ambiente, y después aclaró —. Pero lo que tengo que contarte es demasiado privado y no me sentiría cómodo en un lugar público.
—Está bien. Disculpa mi actitud, pero uno nunca sabe cuándo un chico tan lindo quiera aprovecharse de una inocente damisela como yo —decidió continuar la broma, ocasionando las risas desbordadas de ambos. Eran pocos los momentos en que ellos bromeaban de esa manera, pero no era raro. Quizás lo fuera si no se conocieran bien, pero después de tres meses eso ya no era así y Karmesite había aprendido que Darien, a pesar de ser un hombre serio, solía tener sus arranques de picardía.
Después de pagar la cuenta salieron de la cafetería rumbo al apartamento de Darién
*
*
*
Serena dio una vuelta más en su cama. Llevaba horas tratando de dormir y los acontecimientos del día no la ayudaban. ¿Por qué Seiya había estado actuando tan raro? Recordó que había escupido el café cuándo ella le contó que Hotaru había terminado con Diamante, y luego le había reclamado que siempre hablaba de sus amigas cuándo estaba con él. Después se la pasó divagando en sus pensamientos sin prestarle atención y eso él nunca lo hacía. Últimamente sentía que la relación tan bonita que tenían antes de hacerse novios ya no era la misma, lo que la llevó a entristecerse.
De repente sus pensamientos cambiaron de rumbo y se dirigieron a donde se dirigían todas las noches: unos orbes zafiro que en su momento la habían vuelto loca y se encontró deseando volver a verlos. ¿Qué estaría haciendo Darien ahora? ¿Se acordaría de ella? Ojalá y pudiera saber de él. Tenía meses que no tenía noticias suyas. La verdad era que cada día lo extrañaba más y en ocasiones se encontraba pensando que si él estuviera en Tokio, lo buscaría, para después recriminarse por ser tan egoísta. Darien la había dejado ir y había sacrificado su corazón en ello, para que ella fuera feliz. Entonces decidió que lo que ella tenía que hacer era ser feliz con Seiya y luchar para que el sacrificio de Darien no fuera en vano. Suspiró resignada y aunque ahora tenía tomada una decisión, esta no le ayudó a conciliar el sueño.
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Capitulo 4: Quiero saber de ti
Con la vista perdida y muy inmerso en sus pensamientos se encontraba Darien esperando a su acompañante, mientras tomaba el café y recordaba a la mujer que amaba, en aquel momento que una vez fue el más feliz de su vida y ahora le desmoronaba el alma. Las imágenes se revolvían en su mente y las palabras llegaban a su memoria, taladrándole el corazón por lo que una vez significaron. Cualquiera hubiera creído que con el tiempo estos se irían desvaneciendo, pero la realidad era que cada vez se hacían más nítidos.
— Darién, ¿verdad que nunca me vas a dejar?— resonaba en su mente esa pregunta, al igual que la respuesta.
— No Serena, nunca… Como podría hacerlo si eres la luz que ilumina mi vida, la razón de mi existencia. Sin ti la vida es nada.
—Mi Darién, me haces feliz, muy feliz. Yo también te amo mucho Darién, y nunca, nunca te voy a dejar. No hay otro hombre con el que yo quiera estar si no es contigo, pero me gustaría que me lo dijeras más seguido, sin necesidad de que te lo preguntara.
Él había sonreído ante la petición de su novia de forma dulce y luego le había dado un profundo beso.
Sonrió ante el recuerdo que ahora parecía producto de su imaginación, regresando a la realidad tras el llamado de su bella acompañante que acababa de llegar.
— Discúlpame Darién, es que con mis hermanas de visita, es difícil hacer mis labores cotidianas sin ser cuestionada.
— Descuida, acabo de llegar—respondió de forma educada, mientras sonreía con amabilidad.
— Mentiroso. Sé que tú eres muy puntual, así que debes de llevar un buen rato esperándome.
— Bueno Karmesite, digamos entonces que estoy acostumbrado a esperar —le confesó, restándole importancia al asunto.
— Vaya, vaya. ¿Quién aparte de mí, dejaría al apuesto Darién Chiba esperando?
Una sonrisa apenas visible se dibujó en el joven rostro del hombre. Serena casi siempre llegaba retrasada a sus citas y cuando llegaba temprano era sin duda un acontecimiento.
— Tú siempre tan directa con tus comentarios, pero dime ¿Quien fue la que te cuestionó esta vez? Kalaberite, Berjerite, o Petzite.
Karmesite soltó una risita divertida. Le había contado a Darién que tenía tres hermanas y se las había descrito con lujo de detalle, por lo que no le extrañaría si al final resultaba que las conocía mejor que ella. Después de reírse un poco, respondió.
— Berjerite… ya sabes que es la más curiosa. Pero no Darién Chiba, esta vez no me vas a sacar la vuelta —dijo lo último en forma más fuerte y a modo de reclamo, al tiempo que cruzaba sus brazos y hacía un gracioso puchero de indignación.
— ¿A qué te refieres? — preguntó evadiendo su mirada y fingiendo no entender.
— No te hagas el tonto Darién, nos conocemos hace tres meses y tú ya sabes todo de mi vida, en cambio yo, además de saber que eres mi vecino, estudias aquí por una beca, eres huérfano y sin más familia que tu prima. No conozco más de ti, así que creo que tengo derecho a saber más, además me lo debes por haberme tumbado en el aeropuerto el día que nos conocimos, porque recuerda que te dije que te lo iba a cobrar
Sí, como olvidar aquella amenaza, si había sido de lo más cómica diciéndoselo a viva voz, ocasionando las miradas curiosas de la gente del aeropuerto.
— Lo recuerdo, pero… —no concluyó la frase, quedándose un momento en silencio, dudando si debía o no confiar. Optó por acceder, después de todo, necesitaba hablar con alguien neutral—. Tienes razón. Dime ¿qué quieres saber?
— Perfecto, ya que estás disponible, iré al tocador y luego me dedico a escucharte. Tenemos toda la tarde.
Karmesite se levantó de su asiento, Darién la vio alejarse en medio de la gente, y como accidentalmente chocó con un mesero, eso ocasionó que las imágenes del pasado llegaran una vez más a su mente.
Se escabullía apresurado entre la gente que se encontraba dentro de las instalaciones del Crown Center, chocando con una de las meseras —. Disculpe no fue mi intención —le gritó, ya que no se detuvo junto a ella, siguiendo su paso apresurado.
— Lo lamento Serena, el profesor extendió la clase —se apresuró a explicar.
— Descuida Darién, tú siempre eres el que espera. Es justo que yo lo haga ahora.
— Gracias —estuvo a punto de agregar un apelativo cariñoso, pero no lo hizo porque su experiencia le decía que no todas las mujeres gustaban de arrumacos en público. Si tan sólo hubiera comprendido que Serena era distinta, no hubiera dudado en decirlo. Sin embargo, tenía un detalle para ella y agregó —. De todos modos te traje un detalle para disculparme.
Darién le entregó una rosa roja y una tarjeta que decía: "Para la única mujer que hace vibrar mi corazón”. Esto ocasionó que la chica se emocionara.
Esas eran las cosas que Darien hacía para alimentar su relación. Tal vez en público era frio y distante con ella pero a solas, solía tener los más extraordinarios detalles. Ella en un impulso lo abrazó mientras dijo:
— Gracias Darien. Mira, siente —tomó la mano del joven y la llevó a su corazón—. ¿Lo sientes? Hace boom-boom-boom. Tú eres el único que logra hacer latir mi corazón de esta manera.
Al joven le brillaron los ojos de emoción y solo respondió:
— Te amo Serena —dándole un casto beso.
Nuevamente la voz de su acompañante lo trajo a la actualidad.
— Ya estoy aquí de vuelta y esta vez no te me vas a escapar —amenazó, señalando con el dedo índice
—Claro, te dije que esta vez te diría todo, pero hazme un favor. Salgamos de aquí, te invito a tomar un té a mi departamento.
La chica se puso algo nerviosa. No es que él fuera un desconocido o que pensara que tuviera turbias intenciones para con ella, pero la sola idea de pisar el departamento del chico que la atraía de una forma inexplicable, la ponía algo tensa.
— A... a… ¿A tu departamento? —cuestionó con tartamudez, ocasionando la diversión del apuesto joven que tenía en frente.
—Tranquila, no te voy a comer —bromeó para aligerar el ambiente, y después aclaró —. Pero lo que tengo que contarte es demasiado privado y no me sentiría cómodo en un lugar público.
—Está bien. Disculpa mi actitud, pero uno nunca sabe cuándo un chico tan lindo quiera aprovecharse de una inocente damisela como yo —decidió continuar la broma, ocasionando las risas desbordadas de ambos. Eran pocos los momentos en que ellos bromeaban de esa manera, pero no era raro. Quizás lo fuera si no se conocieran bien, pero después de tres meses eso ya no era así y Karmesite había aprendido que Darien, a pesar de ser un hombre serio, solía tener sus arranques de picardía.
Después de pagar la cuenta salieron de la cafetería rumbo al apartamento de Darién
*
*
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Serena dio una vuelta más en su cama. Llevaba horas tratando de dormir y los acontecimientos del día no la ayudaban. ¿Por qué Seiya había estado actuando tan raro? Recordó que había escupido el café cuándo ella le contó que Hotaru había terminado con Diamante, y luego le había reclamado que siempre hablaba de sus amigas cuándo estaba con él. Después se la pasó divagando en sus pensamientos sin prestarle atención y eso él nunca lo hacía. Últimamente sentía que la relación tan bonita que tenían antes de hacerse novios ya no era la misma, lo que la llevó a entristecerse.
De repente sus pensamientos cambiaron de rumbo y se dirigieron a donde se dirigían todas las noches: unos orbes zafiro que en su momento la habían vuelto loca y se encontró deseando volver a verlos. ¿Qué estaría haciendo Darien ahora? ¿Se acordaría de ella? Ojalá y pudiera saber de él. Tenía meses que no tenía noticias suyas. La verdad era que cada día lo extrañaba más y en ocasiones se encontraba pensando que si él estuviera en Tokio, lo buscaría, para después recriminarse por ser tan egoísta. Darien la había dejado ir y había sacrificado su corazón en ello, para que ella fuera feliz. Entonces decidió que lo que ella tenía que hacer era ser feliz con Seiya y luchar para que el sacrificio de Darien no fuera en vano. Suspiró resignada y aunque ahora tenía tomada una decisión, esta no le ayudó a conciliar el sueño.
Última edición por USAKO-TENHOU el Sáb Ago 01, 2015 12:22 pm, editado 3 veces
Usako Tenoh- Neo Reina Serena
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por Gaby-Chan!! Mar Dic 01, 2009 12:30 am
muy bueno el capt!!
osea q la muchacha con la q se tropezo
Darien es Karmesite vd?
aay pobre Darien aun piensa n Serena
aa pero q es lo q le tiene q decir Darien n
privado?? q es?? aa me djast con semejant duda
espero q actualizes pronto![[SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015 - Página 2 38341](/users/2513/14/93/41/smiles/38341.gif)
osea q la muchacha con la q se tropezo
Darien es Karmesite vd?
aay pobre Darien aun piensa n Serena
aa pero q es lo q le tiene q decir Darien n
privado?? q es?? aa me djast con semejant duda
espero q actualizes pronto
Gaby-Chan!!- Neo Reina Serena
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por haruka-moon Mar Dic 01, 2009 12:32 am
pero como se atreve darien a invitarla a su departamento ![[SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015 - Página 2 728827](/users/2513/14/93/41/smiles/728827.gif)
aunk yo con un chiko asi voy encantada de la vida
y si te falto algo :[NOSERENA]:
k lo hicieras un pokito mas largo :[SEREJEM]:
pero ese coketeo de darien no me gusto
bueno amix hasta la proxima
aunk yo con un chiko asi voy encantada de la vida
y si te falto algo :[NOSERENA]:
k lo hicieras un pokito mas largo :[SEREJEM]:
pero ese coketeo de darien no me gusto
bueno amix hasta la proxima
haruka-moon- Neo Reina Serena
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por princess*moon Mar Dic 01, 2009 12:36 am
waw esta tan hermoso, kuando llego seiya a konocer a hotaru the lo juro ke pense ke era Serena[XD], pero cuando vi ke era Hotaru iiio dije waw, esta niña sabe lo ke hace ![[SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015 - Página 2 553629](/users/2513/14/93/41/smiles/553629.gif)
, espero ke actualizez pronto, gracias por dejar mP para avisarme chula, nos vemos en el proximo capitulo, y por otro lado te invito a ke leas el mio, va a salir abajo de mi firma, nos vemos, biie
besos
sayonara!!!
, espero ke actualizez pronto, gracias por dejar mP para avisarme chula, nos vemos en el proximo capitulo, y por otro lado te invito a ke leas el mio, va a salir abajo de mi firma, nos vemos, biiebesos
sayonara!!!
princess*moon- Sailor Inner Scout
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por Leslie.Sailor_Mercury Mar Dic 01, 2009 11:49 am
ya lei el cap. y me parecio un poco coqueto de ambas partes...pero pobre Darien....lo que le hace sufrir Serena....jejeje..buena idea de meter a las 4 hermanas de la persecucion en la historia..jaja ...gracias por avisarme (que lindo detalle de tu parte..jeje)..bueno espero la actualizacion...quiero saber si Darien le contara TODO osea lo de las sailors scouts...ACTUALIZA PRONTO!!!..saludos..bye
...gracias por avisarme (que lindo detalle de tu parte..jeje)..bueno espero la actualizacion...quiero saber si Darien le contara TODO osea lo de las sailors scouts...ACTUALIZA PRONTO!!!..saludos..bye 
Leslie.Sailor_Mercury- Reina Serenity
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por irma Miér Dic 02, 2009 1:44 pm
en verdad no entiendo a serena , en fin estuvo muy padre esta historia es muy diferente a las demas en serio espero y no tardes ok besos
irma- Sailor Scout
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por Serenity Chiba Jue Dic 03, 2009 2:12 am
kiero seguire leyendooo :D
Serenity Chiba- Sailor Inner Scout
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por seiloraraceli Jue Dic 03, 2009 5:26 pm
te felicito
escribes muii
lindo
bueno
aun me falta
basstante por leer
pero me gusto
espero quer me abises cuando actulises
a te invito a que leeas
mi ficc
que aparecen en mi firma
adios
escribes muii
lindo
bueno
aun me falta
basstante por leer
pero me gusto
espero quer me abises cuando actulises
a te invito a que leeas
mi ficc
que aparecen en mi firma
adios
seiloraraceli- Sailor Outer Scout
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por usagui_px Sáb Dic 05, 2009 1:02 am
AMIX YA ME LEI TU ACTUALIZACION POBRECITO MI DARIEN SE VE QUE SUFRE MUCHO AY !!!!! Y KARMESITE SE VE TAQN LINDA Y QUE SE LLEVAN BIEN, ESO ME PREOCUPA UN POCO, ME PREGUNTO ¿QUE LE CONTARA' QUISIERA SABER POR VERSION DE DARIEN COMO FUERON LAS COSAS!!! ESPERO QUE ACTUALICES PRONTO AMIGA CUIDATE TE MANDO UN BESOTE
usagui_px- Neo Reina Serena
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por sweetkitymoon Sáb Dic 05, 2009 1:44 am
Ahhhhh, está lindo tu fic, aunque no comprendo porque dicen que mi Seiya es sólo una ilusión , aunque Darien es también muy lindo, es cierto que es un coqueto, mira que cotillear con Karmesite 
, no tiene remedio,jejeje, pero bueno, veremos qué pasa con estas parejitas, mientras tanto actualiza pronto si?, que me tienes en ascuas,jejeje, cuídate mucho y te invito que pases a mi fic, "un encuentro inesperado"; por mi Sweetkitymoon ![[SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015 - Página 2 184233](/users/2513/14/93/41/smiles/184233.gif)
y me dices qué opinas va 
, en fin, nos vemos que ya me duermo,jejeje ![[SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015 - Página 2 716140](/users/2513/14/93/41/smiles/716140.gif)
, byeee
, aunque Darien es también muy lindo, es cierto que es un coqueto, mira que cotillear con Karmesite , no tiene remedio,jejeje, pero bueno, veremos qué pasa con estas parejitas, mientras tanto actualiza pronto si?, que me tienes en ascuas,jejeje, cuídate mucho y te invito que pases a mi fic, "un encuentro inesperado"; por mi Sweetkitymoon y me dices qué opinas va , en fin, nos vemos que ya me duermo,jejeje , byeee 
sweetkitymoon- Scout Aprendiz
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por Usako Tenoh Mar Dic 08, 2009 12:23 am
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CAPITULO 5: REMOVIENDO EL PASADO
La observaba fascinado por el hermoso semblante que había adquirido su joven y hermoso rostro. Siempre le había gustado verla sonreír, pero la expresión de deslumbramiento que tenía en ese momento, combinado con esa sonrisa, la hacían verse aún más hermosa.
— Lindo departamento, tiene una muy buena vista. Me encantan las ventanas grandes, dejan pasar mucha luz.
El dulce tono con que fueron pronunciadas las palabras lo sacaron de su trance.
— Me alegra que te guste. Puedes venir cuando quieras.
Ella lo miró con los ojos brillantes de emoción. Darien era muy poco expresivo, por lo que le sorprendía que cuando estaba con ella a solas dijera más de unas cuantas palabras; aunque siempre creyó que era para hacerle más ameno el tiempo que pasaba con él.
Ahora la invitaba a visitarlo cuando quisiese. En el poco tiempo que lo conocía, sabía que él jamás haría una invitación solo por compromiso, pero quiso asegurarse ello.
— ¿De verdad no te molesta que venga?
—Claro que no. Me gusta mucho tu compañía, la paso muy bien a tu lado, además eres una chica muy agradable y muy linda. Estaré encantado de que me visites.
— Darien, que cosas dices.
El hermoso matiz que fue adquiriendo el rostro de la chica, hicieron olvidar a Darien el autocontrol que lo caracterizaba y no pudo evitar hacerle un cumplido.
— Te vez linda cuando te sonrojas, Serena.
Con bastante nerviosismo ella le respondió:
— Ay Darien, deja de jugar y mejor pongámonos a estudiar, que para eso vine, para que me expliques el dichoso teorema de Pitágoras
— Discúlpame, tienes razón —le contesto él, adquiriendo nuevamente su pose seria e indicándole que se sentara para empezar la clase —. El Teorema de Pitágoras establece que en un triángulo rectángulo…
— Darien, ¿estás bien? —lo cuestionó su acompañante, sacándolo de aquellos hermosos, aunque dolorosos, recuerdos.
— Sí, claro ¿Por qué?
— Te dije que era un lindo departamento y te quedaste perdido en tus pensamientos
— ¿De verdad? Lo lamento Karmesite, no fue mi intención; es solo que los recuerdos todavía me persiguen. Pero toma asiento, yo iré a preparar el té
Karmesite se encontraba impaciente. El chico apenas y había dicho unas cuantas palabras desde su salida de la cafetería, y ahora se encontraba en la cocina preparando el té. Por su parte ella estaba sentada en un sofá, recorriendo el departamento con la mirada, hasta que algo captó su atención y se levantó del sofá, dirigiéndose hacia el retrato que tanta curiosidad le causaba. Lo miró fijamente por varios minutos sin percatarse que un par de orbes zafiro la observaban.
— ¿Es linda, verdad?
La pregunta repentina pudo haberla sobresaltado, pero no fue así, por lo que con toda tranquilidad, le respondió sinceramente.
— Si, mucho. Pero en realidad no es ella la que me llamó la atención en este retrato, sino tú.
— ¿Yo? ¿Qué hay de raro en mí, si ya me conoces? —le respondió, con toda la sorpresa reflejada en su rostro.
— No Darien, no te conozco, o al menos no conozco al Darien del retrato. Tan solo mírate, tienes una sonrisa radiante y un brillo especial en tus ojos que ya no tienes ahora y me hace preguntar, ¿Qué paso Darien? ¿Dónde quedó la chispa que reflejas en el retrato?
— Desapareció el día que subí a un avión rumbo a Estados Unidos.
— ¿El día que subiste al avión?
— Si, ese día —con un suspiro de resignación, decidió que era momento de dejar salir todo aquello que lo atormentaba —. Creo que para que entiendas por qué perdí la chispa de la que hablas, tengo que contarte todo desde el principio y de cómo fue que perdí a la mujer que amo… Todo se remonta a la muerte de mis padres. Después de esa pérdida me sentí tan vacío y triste, nunca volví a ser el mismo chico, solo me dediqué a los estudios, no tenía vida social y tampoco muchos amigos. A decir verdad solo tenía uno, Drew. Mi vida era tan monótona, pero según decía Drew, era un chico con suerte ya que muchas chicas, a pesar de la escasez de mis palabras, se morían por mí, según él, por lo enigmático que era. Nunca le di importancia a lo que él me decía y me parecían graciosas sus conversaciones, hasta que un día a Drew se le ocurrió que sería bueno que saliéramos en una cita doble. Yo me negué rotundamente y aun no entiendo cómo me convenció, pero después de esa cita, mi vida dio un giro completo, ya que los acontecimientos que seguirían, me marcarían para siempre.
Acostumbraba a tomar su café, todas las mañanas en el Crown Center, ya que era un lugar tranquilo. No podía decirse que se conservara igual durante las tardes, pues muchos jovencitos de los distintos colegios que se encontraban cerca, solían pasar a distraerse ahí después de clases. Actitud bastante irresponsable según los pensamientos de Darien.
Acababa de dar el último sorbo a su café, cuando el saludo, demasiado entusiasta, de su joven amigo encargado del lugar, rompió con su tranquilidad.
—Darien, amigo del alma, tanto tiempo sin verte ¿Qué haces tan solito por aquí?
Demasiada amabilidad y la pregunta, bastante tonta su parecer, hicieron sospechar a Darien de su actitud.
— Andrew, de una vez dime ¿Qué es lo que tramas? —cuestionó con interés.
— Darien, amigo, me ofendes ¿Por qué esa desconfianza?
Darien pensó que la actitud inocente y ofendida no le quedaba nada a su amigo de infancia. Tal hecho lo divirtió, pero supo ocultarlo perfectamente, por lo que con el ceño fruncido y un fingido enojo le dijo:
— No te hagas el ofendido. Sabes bien que tramas algo y lo sé por dos cosas: primero que nada, nos vimos ayer; y segundo, yo siempre estoy solo o en su defecto contigo, así que es de suponerse que tanta euforia al saludarme no se debe a que te de gusto verme.
— Estás equivocado. A mí siempre me da gusto verte… pero está bien, esta vez me atrapaste. La verdad es que si hay una razón para tanta euforia: convencí a Reika de salir conmigo y es por eso que estoy tan feliz
— Me da gusto por ti, pero ¿por qué siento que de alguna manera yo tengo que ver con tu logro?
Andrew se sintió por segunda vez atrapado. A decir verdad, no entendía como era que había creído que podía burlar a su mejor amigo, ya que si había alguien que lo conocía ese era Darien.
— Nada se te escapa verdad. Pues es cierto, algo tienes que ver, pero antes de que te diga cómo, debes prometer que no te molestarás y accederás a lo que te pida.
La actitud sospechosa de Drew puso en alerta los sentidos de Darien. El rubio era todo un caso.
— Drew, me estás pidiendo algo que no sé si me convenga aceptar. Uno nunca sabe con lo que Andrew Furuhata saldrá.
— Anda, promételo. Te juro que no es nada malo, y hasta saldrás beneficiado
Darién dudaba que eso pudiera ser, aunque sea un poco, algo acertado. Y aunque presentía que aquel juramento no dejaría nada bueno, no podía evitar hacerlo. Andrew había sido su amigo desde la infancia y había estado con él en los peores momentos.
—Está bien Drew, y aunque creo que me arrepentiré después, prometo no enfadarme y acceder a lo que me pides.
— ¡Perfecto! Bueno verás, Reika accedió a salir conmigo después de insistirle innumerables veces. Me dijo que no es que no quisiera salir conmigo, sino que sus padres son muy estrictos con ella y no la dejan salir con un chico a solas; así que la única forma era que su prima nos acompañara, cosa que al principio me disgustó bastante, pero después pensé, claro por qué no, mi amigo Darien puede salir con Saori y yo con Reika, así todos contentos. Se lo dije a Reika y ella quedó encantada con la idea.
— ¿Todos contentos? —preguntó Darién con el ceño fruncido —¿Qué hay de mí? Yo no estaré muy contento por salir con una chica a la que ni siquiera conozco.
Andrew sonrió y contestó alegremente.
— Vamos Dar. Si es prima de Reika, debe ser una chica muy linda, no seas cerrado. Además ya dijiste que sí, así que nos vemos el sábado a las 4:00 PM aquí en el Crown, para ir por las chicas. Bueno ahora me voy, tengo trabajo.
Andrew se retiró, dejándolo ahí solo, lamentándose por haber hecho una promesa de la cual sabía de antemano, se arrepentiría después.
La semana pasó rápidamente, pese a los deseos de Darién, y de pronto ya se encontraba frente a un gran edificio junto con Andrew, esperando a que las chicas bajaran. Se sentía algo incómodo porque saldría con una chica a la cual no conocía y eso lo inquietaba. Nunca había sido de los chicos que se fijaran en el aspecto físico de una persona, y menos de una chica, así que eso no era lo que le preocupaba, sin embargo, temía que fuera una chica superficial, de esas que solo hablan de ropa y de chicos guapos, como todas las que había conocido hasta ahora y la verdad, eso le desagradaba bastante.
Minutos después las chicas bajaron, Darien conocía a Reika de la secundaria, así que ella lo saludo e hizo las respectivas presentaciones
— ¡Hola Darien! Qué bueno que viniste. Mira, te presento a mi prima Saori
— Mucho gusto Saori. Yo soy Darien Chiba
— Un placer Darien, pero creo que debemos irnos ya que se nos hará tarde
Esa tarde la pasó muy bien. Saori resultó ser una chica linda y agradable, además de ser muy inteligente, y platicaron de muchas cosas de interés mutuo.
Pasaron los meses y las salidas con las chicas se volvieron cada vez más frecuentes. Darien descubrió que se la pasaba muy bien con Saori; tenían mucho en común y ella siempre se portaba de forma dulce con él, así que con el tiempo creyó estar enamorado de ella y un día le pidió que fuera su novia.
Competían para ver quién de los dos llegaba primero al cine. El que lo hiciera escogería la película, ya que Reika y Andrew no pudieron acompañarlos aquella vez
— Te gané Darien —le presumía con la voz bastante agitada —, así que veremos “La maldición".
— ¿Una de terror? No me lo esperaba.
—Pues te llevarás grandes sorpresas conmigo.
Darién se daría cuenta más tarde, de cuanta verdad encerraban aquellas palabras.
La película resultó ser bastante aterradora pero lo que realmente le sorprendió, fue ver a Saori como si nada. Salieron de ahí, y si creía que Saori no podía sorprenderlo más, sin duda se equivocó.
— Esperaba que esta película fuera más tétrica. Que decepción.
— Eres extraña, ¿sabes?
— ¿Por qué lo dices? —preguntó con los ojos abiertos por la sorpresa.
— Por nada, olvídalo
Después de llevarla hasta su casa, ella se disponía a entrar en esta, cuando Darién se lo impidió.
— ¿Sucede algo Darien? —cuestionó con bastante contrariedad.
— Sucede que no puedo dejar pasar esta oportunidad Saori, y… quiero pedirte que seas mi novia.
La sonrisa maliciosa que se dibujó en el rostro de la joven no fue notada por Darién, quien se encontraba esperando la respuesta.
— Te tardaste mucho en pedirlo.
Al decir esto, Saori se lanzó, sin ningún pudor, a los brazos del moreno, dándole un apasionado beso que lo dejo desconcertado. No esperaba una reacción así de su parte y esa actitud era extraña, pero no le tomó importancia. Pronto descubriría que fue un grave error.
Después de esa noche, su relación iba de lo mejor, o al menos eso creía Darien. Salían, se divertían, todo estaba bien. Darien, a pesar de no ser muy expresivo, se desvivía por demostrarle a Saori lo mucho que la quería, entre detalles, mimos y arrumacos. Nunca le importó si estaban en un lugar público lleno de gente o a solas. Lo importante era que ella supiera que la quería.
Llegó la hora de graduarse. Era algo que tenía emocionados a todos, sobre todo a Darien y sus amigos, ya que habían dispuesto entrar en la misma preparatoria los cuatro, lo que significaba más tiempo juntos.
Al fin entraron a la prepa y el primer mes todo parecía estar bien con Saori. Según Andrew, las chicas le tenían envidia, porque tenía a un novio tan apuesto como él; eso le hacía sentir bien, porque creía que hacia feliz a Saori.
Después de dos meses, ella empezó a actuar de forma extraña. Ya casi no salían y siempre lo evadía en la escuela.
El fin de curso llegó, y por primera vez se le hizo largo. La relación con Saori estaba bastante deshecha y no sabía cuál era la razón.
Por fin, era el último día de clases, pero Drew y Darien tenían que preparar las cosas para el baile de despedida de último grado, ya que estaban comisionados.
—Bien Darien, ya está todo listo; solo falta colocar las sillas de la mesa de honor. La Directora me dijo que estaban en la bodega así que iré por ellas. Tú espera aquí ¿sí? y pórtate bien.
— Andrew, tú y tus comentarios. Mejor ve y apúrate que ya me quiero ir
Habían pasado 5 minutos solamente, cuando Andrew volvió, con la cara pálida y bastante agitado.
— ¿Qué pasa Drew? ¿Dónde están las sillas? … y ¿Por qué parece que viste un fantasma?
— Darien yo… Darien es que no sé cómo decirte. Perdóname Darien, aunque no me agrada ser el portador de esta noticia, pero tienes que saberlo… es decir, no puedo permitir que ella… bueno Darien, encontré a Saori en la bodega.
Darién sabía que eso no tenía nada de malo, ¿Pero por qué Andrew lucia pálido? No tenía un buen presentimiento de ello y aunque lo correcto hubiera sido preguntarle el porqué de su aspecto, fue otra cosa lo que salió de sus labios.
— ¿Por qué no le pediste que te ayudara con las sillas? —pregunta que más tarde le pareció estúpida.
— Darien… es que ella… no estaba sola.
De acuerdo, esto ahora si le parecía sospechoso y nada bueno. El autocontrol del que siempre había sido poseedor, se estaba yendo directo al caño y sin importarle que estuviera hablando con su mejor amigo, elevó la voz gritándole exasperado y con temor.
—Explícate Andrew Furuhata y déjate de rodeos.
— Que me encontré a Saori con otro chico y no estaban precisamente dándose la hora —le contestó bastante alterado e indignado por el asunto.
No supo cómo ni cuándo, pero de repente ya se hallaba corriendo hacia la bodega de la escuela, esperanzado de que fuera una broma de mal gusto de Andrew, y que después él, Reika, y Saori se burlarían de su persona toda la semana.
Llegó con los pies temblorosos, todo estaba en silencio. Se acercó poco a poco, y pudo encontrarla, ahí recogiendo los desastres de su encuentro, con nada más y nada menos que Rubeus, un chico al que consideraba su amigo y al cual había ayudado a estudiar para aprobar el año. No se percataron de su presencia, así que hablaron descaradamente.
— Esto fue excitante, como todos nuestros encuentros claro, pero este lo superó.
—Claro primor y puede ser aún mejor esta noche. Que dices ¿nos vemos en el baile? Será excitante. ¿Por qué no? Bueno, eso si logras deshacerte del insulso hombre que tienes por novio.
— Ni me digas. Ya me tiene harta con sus ridiculeces.
Entonces sucedió. Ellos se besaron enfrente de Darien y fue demasiado para él. No toleraría seguir siendo la burla de esos dos, así que salió de su escondite y gritó enfurecido
— Si tanto te molesta ¿Por qué no decírmelo Saori? ¿Por qué dejarme hacer el ridículo?
Al principio los amantes se alteraron y sus rostros reflejaron angustia. Después la angustia se transformó en sorpresa, para dar paso a la burla. La sonora y descarada carcajada que Saori soltó, sorprendió tanto a Darién como a Rubeus.
— Así que ya me descubriste. Mejor, así me ahorras el trabajo de darte explicaciones. Estoy harta de ti, tan estúpido, que dejaste de ser tú mismo para mantenerme contenta… Pues fíjate que ni así lo lograste. Tus ridiculeces y cursilerías me ahogan. Las mujeres como yo, no vivimos de detallitos tontos que solo muestran la inmadurez de un hombre. Lo que queremos las mujeres es un hombre de verdad, no una imitación. Y bueno, no te lo dije porque no me convenía. Mis tíos te aprueban Darien, solo tenía que decir “Voy con Darien” y no ponían peros a un permiso. Si terminaba contigo, perdería todo aquello, aunque ahora tendré que buscarte un remplazo. Ni modo, que se le va a hacer.
Se quedó totalmente en shock. No supo que decir, se sentía aturdido y solo podía escuchar la escandalosa risa de Saori que se dirigía a la salida, tan triunfante de haberle dicho todo eso que parecía disfrutarlo. Darién se sintió herido, ninguna pizca de vergüenza existía en esa mujer.,
—Después de eso mi vida se volvió más fría y monótona. La relación con Andrew se dañó, nos distanciamos por un año y no volvimos a hablarnos hasta tercer año. No es que culpara a Drew o a Reika, pero estar cerca, los perjudicaría más a ellos que a mí. No podía ponerlos a escoger entre Saori y yo, porque sería una decisión dividida, ya que Saori era prima de Reika.
Los recuerdos habían hecho que a Darién se le pusiera la voz ronca.
— Entonces, la chica de la foto, ¿es Saori?
—No, ella es otra historia. Te conté lo de Saori, porque querías conocerme y creo que lo sucedido con ella perjudicó mi relación con Serena, que es la chica de la foto. Lo de Serena fue distinto —no pudo evitar que una cálida sonrisa se pintara en su rostro al pronunciar su nombre —… pero mira esto, se acabó el té. Iré a preparar más y te cuento
Darien se retiró a la cocina mientras Karmesite se quedó en la sala observando una y otra vez el retrato.
HASTA AQUÍ CHICAS, YA SABEN ESPERO SUS OPINIONES Y LAS PEDRADAS QUE QUIERAN DARME, POR NO SER TAN BUENA ESCRITORA
GABY_MOON12: Si la chica del aeropuerto es Karmesite
haruka-moon: Querida Haruka, no fueron a hacer nada malo a el departamento, en que estas pensando mujer y bueno este capitulo si esta largo, espero te guste
Leslie.Sailor_Mercury: Nena, esta historia alterna las scout, no existen, espero no haberte decepcionado, mil disculpas si alguien mas se confundió
Irma: Bienvenida al fic, me alegra que te guste
Serenity Chiva: Bienvenida al fic, y aquí te dejo otro capi para que sigas leyendo
seiloraraceli: Nena bienvenida, no dispongo de mucho tiempo, pero créeme, voy a leer tu fic en cuanto pueda y dejare los respectivos comentarios
Usagui: Amiga, se cumplirá tu deseo, sabrás como fueron las cosas, pero hasta el próximo capitulo
sweetkitymoon: Gracias por leer el fic nena, me alegra que te guste, leí algunos capítulos de el tuyo, pero no dispongo de mucho tiempo para hacerlo, así que mas adelante me pongo al corriente, aunque no me gusto que pintaras tan malo a mi Darién.
CAPITULO 5: REMOVIENDO EL PASADO
La observaba fascinado por el hermoso semblante que había adquirido su joven y hermoso rostro. Siempre le había gustado verla sonreír, pero la expresión de deslumbramiento que tenía en ese momento, combinado con esa sonrisa, la hacían verse aún más hermosa.
— Lindo departamento, tiene una muy buena vista. Me encantan las ventanas grandes, dejan pasar mucha luz.
El dulce tono con que fueron pronunciadas las palabras lo sacaron de su trance.
— Me alegra que te guste. Puedes venir cuando quieras.
Ella lo miró con los ojos brillantes de emoción. Darien era muy poco expresivo, por lo que le sorprendía que cuando estaba con ella a solas dijera más de unas cuantas palabras; aunque siempre creyó que era para hacerle más ameno el tiempo que pasaba con él.
Ahora la invitaba a visitarlo cuando quisiese. En el poco tiempo que lo conocía, sabía que él jamás haría una invitación solo por compromiso, pero quiso asegurarse ello.
— ¿De verdad no te molesta que venga?
—Claro que no. Me gusta mucho tu compañía, la paso muy bien a tu lado, además eres una chica muy agradable y muy linda. Estaré encantado de que me visites.
— Darien, que cosas dices.
El hermoso matiz que fue adquiriendo el rostro de la chica, hicieron olvidar a Darien el autocontrol que lo caracterizaba y no pudo evitar hacerle un cumplido.
— Te vez linda cuando te sonrojas, Serena.
Con bastante nerviosismo ella le respondió:
— Ay Darien, deja de jugar y mejor pongámonos a estudiar, que para eso vine, para que me expliques el dichoso teorema de Pitágoras
— Discúlpame, tienes razón —le contesto él, adquiriendo nuevamente su pose seria e indicándole que se sentara para empezar la clase —. El Teorema de Pitágoras establece que en un triángulo rectángulo…
— Darien, ¿estás bien? —lo cuestionó su acompañante, sacándolo de aquellos hermosos, aunque dolorosos, recuerdos.
— Sí, claro ¿Por qué?
— Te dije que era un lindo departamento y te quedaste perdido en tus pensamientos
— ¿De verdad? Lo lamento Karmesite, no fue mi intención; es solo que los recuerdos todavía me persiguen. Pero toma asiento, yo iré a preparar el té
Karmesite se encontraba impaciente. El chico apenas y había dicho unas cuantas palabras desde su salida de la cafetería, y ahora se encontraba en la cocina preparando el té. Por su parte ella estaba sentada en un sofá, recorriendo el departamento con la mirada, hasta que algo captó su atención y se levantó del sofá, dirigiéndose hacia el retrato que tanta curiosidad le causaba. Lo miró fijamente por varios minutos sin percatarse que un par de orbes zafiro la observaban.
— ¿Es linda, verdad?
La pregunta repentina pudo haberla sobresaltado, pero no fue así, por lo que con toda tranquilidad, le respondió sinceramente.
— Si, mucho. Pero en realidad no es ella la que me llamó la atención en este retrato, sino tú.
— ¿Yo? ¿Qué hay de raro en mí, si ya me conoces? —le respondió, con toda la sorpresa reflejada en su rostro.
— No Darien, no te conozco, o al menos no conozco al Darien del retrato. Tan solo mírate, tienes una sonrisa radiante y un brillo especial en tus ojos que ya no tienes ahora y me hace preguntar, ¿Qué paso Darien? ¿Dónde quedó la chispa que reflejas en el retrato?
— Desapareció el día que subí a un avión rumbo a Estados Unidos.
— ¿El día que subiste al avión?
— Si, ese día —con un suspiro de resignación, decidió que era momento de dejar salir todo aquello que lo atormentaba —. Creo que para que entiendas por qué perdí la chispa de la que hablas, tengo que contarte todo desde el principio y de cómo fue que perdí a la mujer que amo… Todo se remonta a la muerte de mis padres. Después de esa pérdida me sentí tan vacío y triste, nunca volví a ser el mismo chico, solo me dediqué a los estudios, no tenía vida social y tampoco muchos amigos. A decir verdad solo tenía uno, Drew. Mi vida era tan monótona, pero según decía Drew, era un chico con suerte ya que muchas chicas, a pesar de la escasez de mis palabras, se morían por mí, según él, por lo enigmático que era. Nunca le di importancia a lo que él me decía y me parecían graciosas sus conversaciones, hasta que un día a Drew se le ocurrió que sería bueno que saliéramos en una cita doble. Yo me negué rotundamente y aun no entiendo cómo me convenció, pero después de esa cita, mi vida dio un giro completo, ya que los acontecimientos que seguirían, me marcarían para siempre.
Acostumbraba a tomar su café, todas las mañanas en el Crown Center, ya que era un lugar tranquilo. No podía decirse que se conservara igual durante las tardes, pues muchos jovencitos de los distintos colegios que se encontraban cerca, solían pasar a distraerse ahí después de clases. Actitud bastante irresponsable según los pensamientos de Darien.
Acababa de dar el último sorbo a su café, cuando el saludo, demasiado entusiasta, de su joven amigo encargado del lugar, rompió con su tranquilidad.
—Darien, amigo del alma, tanto tiempo sin verte ¿Qué haces tan solito por aquí?
Demasiada amabilidad y la pregunta, bastante tonta su parecer, hicieron sospechar a Darien de su actitud.
— Andrew, de una vez dime ¿Qué es lo que tramas? —cuestionó con interés.
— Darien, amigo, me ofendes ¿Por qué esa desconfianza?
Darien pensó que la actitud inocente y ofendida no le quedaba nada a su amigo de infancia. Tal hecho lo divirtió, pero supo ocultarlo perfectamente, por lo que con el ceño fruncido y un fingido enojo le dijo:
— No te hagas el ofendido. Sabes bien que tramas algo y lo sé por dos cosas: primero que nada, nos vimos ayer; y segundo, yo siempre estoy solo o en su defecto contigo, así que es de suponerse que tanta euforia al saludarme no se debe a que te de gusto verme.
— Estás equivocado. A mí siempre me da gusto verte… pero está bien, esta vez me atrapaste. La verdad es que si hay una razón para tanta euforia: convencí a Reika de salir conmigo y es por eso que estoy tan feliz
— Me da gusto por ti, pero ¿por qué siento que de alguna manera yo tengo que ver con tu logro?
Andrew se sintió por segunda vez atrapado. A decir verdad, no entendía como era que había creído que podía burlar a su mejor amigo, ya que si había alguien que lo conocía ese era Darien.
— Nada se te escapa verdad. Pues es cierto, algo tienes que ver, pero antes de que te diga cómo, debes prometer que no te molestarás y accederás a lo que te pida.
La actitud sospechosa de Drew puso en alerta los sentidos de Darien. El rubio era todo un caso.
— Drew, me estás pidiendo algo que no sé si me convenga aceptar. Uno nunca sabe con lo que Andrew Furuhata saldrá.
— Anda, promételo. Te juro que no es nada malo, y hasta saldrás beneficiado
Darién dudaba que eso pudiera ser, aunque sea un poco, algo acertado. Y aunque presentía que aquel juramento no dejaría nada bueno, no podía evitar hacerlo. Andrew había sido su amigo desde la infancia y había estado con él en los peores momentos.
—Está bien Drew, y aunque creo que me arrepentiré después, prometo no enfadarme y acceder a lo que me pides.
— ¡Perfecto! Bueno verás, Reika accedió a salir conmigo después de insistirle innumerables veces. Me dijo que no es que no quisiera salir conmigo, sino que sus padres son muy estrictos con ella y no la dejan salir con un chico a solas; así que la única forma era que su prima nos acompañara, cosa que al principio me disgustó bastante, pero después pensé, claro por qué no, mi amigo Darien puede salir con Saori y yo con Reika, así todos contentos. Se lo dije a Reika y ella quedó encantada con la idea.
— ¿Todos contentos? —preguntó Darién con el ceño fruncido —¿Qué hay de mí? Yo no estaré muy contento por salir con una chica a la que ni siquiera conozco.
Andrew sonrió y contestó alegremente.
— Vamos Dar. Si es prima de Reika, debe ser una chica muy linda, no seas cerrado. Además ya dijiste que sí, así que nos vemos el sábado a las 4:00 PM aquí en el Crown, para ir por las chicas. Bueno ahora me voy, tengo trabajo.
Andrew se retiró, dejándolo ahí solo, lamentándose por haber hecho una promesa de la cual sabía de antemano, se arrepentiría después.
La semana pasó rápidamente, pese a los deseos de Darién, y de pronto ya se encontraba frente a un gran edificio junto con Andrew, esperando a que las chicas bajaran. Se sentía algo incómodo porque saldría con una chica a la cual no conocía y eso lo inquietaba. Nunca había sido de los chicos que se fijaran en el aspecto físico de una persona, y menos de una chica, así que eso no era lo que le preocupaba, sin embargo, temía que fuera una chica superficial, de esas que solo hablan de ropa y de chicos guapos, como todas las que había conocido hasta ahora y la verdad, eso le desagradaba bastante.
Minutos después las chicas bajaron, Darien conocía a Reika de la secundaria, así que ella lo saludo e hizo las respectivas presentaciones
— ¡Hola Darien! Qué bueno que viniste. Mira, te presento a mi prima Saori
— Mucho gusto Saori. Yo soy Darien Chiba
— Un placer Darien, pero creo que debemos irnos ya que se nos hará tarde
Esa tarde la pasó muy bien. Saori resultó ser una chica linda y agradable, además de ser muy inteligente, y platicaron de muchas cosas de interés mutuo.
Pasaron los meses y las salidas con las chicas se volvieron cada vez más frecuentes. Darien descubrió que se la pasaba muy bien con Saori; tenían mucho en común y ella siempre se portaba de forma dulce con él, así que con el tiempo creyó estar enamorado de ella y un día le pidió que fuera su novia.
Competían para ver quién de los dos llegaba primero al cine. El que lo hiciera escogería la película, ya que Reika y Andrew no pudieron acompañarlos aquella vez
— Te gané Darien —le presumía con la voz bastante agitada —, así que veremos “La maldición".
— ¿Una de terror? No me lo esperaba.
—Pues te llevarás grandes sorpresas conmigo.
Darién se daría cuenta más tarde, de cuanta verdad encerraban aquellas palabras.
La película resultó ser bastante aterradora pero lo que realmente le sorprendió, fue ver a Saori como si nada. Salieron de ahí, y si creía que Saori no podía sorprenderlo más, sin duda se equivocó.
— Esperaba que esta película fuera más tétrica. Que decepción.
— Eres extraña, ¿sabes?
— ¿Por qué lo dices? —preguntó con los ojos abiertos por la sorpresa.
— Por nada, olvídalo
Después de llevarla hasta su casa, ella se disponía a entrar en esta, cuando Darién se lo impidió.
— ¿Sucede algo Darien? —cuestionó con bastante contrariedad.
— Sucede que no puedo dejar pasar esta oportunidad Saori, y… quiero pedirte que seas mi novia.
La sonrisa maliciosa que se dibujó en el rostro de la joven no fue notada por Darién, quien se encontraba esperando la respuesta.
— Te tardaste mucho en pedirlo.
Al decir esto, Saori se lanzó, sin ningún pudor, a los brazos del moreno, dándole un apasionado beso que lo dejo desconcertado. No esperaba una reacción así de su parte y esa actitud era extraña, pero no le tomó importancia. Pronto descubriría que fue un grave error.
Después de esa noche, su relación iba de lo mejor, o al menos eso creía Darien. Salían, se divertían, todo estaba bien. Darien, a pesar de no ser muy expresivo, se desvivía por demostrarle a Saori lo mucho que la quería, entre detalles, mimos y arrumacos. Nunca le importó si estaban en un lugar público lleno de gente o a solas. Lo importante era que ella supiera que la quería.
Llegó la hora de graduarse. Era algo que tenía emocionados a todos, sobre todo a Darien y sus amigos, ya que habían dispuesto entrar en la misma preparatoria los cuatro, lo que significaba más tiempo juntos.
Al fin entraron a la prepa y el primer mes todo parecía estar bien con Saori. Según Andrew, las chicas le tenían envidia, porque tenía a un novio tan apuesto como él; eso le hacía sentir bien, porque creía que hacia feliz a Saori.
Después de dos meses, ella empezó a actuar de forma extraña. Ya casi no salían y siempre lo evadía en la escuela.
El fin de curso llegó, y por primera vez se le hizo largo. La relación con Saori estaba bastante deshecha y no sabía cuál era la razón.
Por fin, era el último día de clases, pero Drew y Darien tenían que preparar las cosas para el baile de despedida de último grado, ya que estaban comisionados.
—Bien Darien, ya está todo listo; solo falta colocar las sillas de la mesa de honor. La Directora me dijo que estaban en la bodega así que iré por ellas. Tú espera aquí ¿sí? y pórtate bien.
— Andrew, tú y tus comentarios. Mejor ve y apúrate que ya me quiero ir
Habían pasado 5 minutos solamente, cuando Andrew volvió, con la cara pálida y bastante agitado.
— ¿Qué pasa Drew? ¿Dónde están las sillas? … y ¿Por qué parece que viste un fantasma?
— Darien yo… Darien es que no sé cómo decirte. Perdóname Darien, aunque no me agrada ser el portador de esta noticia, pero tienes que saberlo… es decir, no puedo permitir que ella… bueno Darien, encontré a Saori en la bodega.
Darién sabía que eso no tenía nada de malo, ¿Pero por qué Andrew lucia pálido? No tenía un buen presentimiento de ello y aunque lo correcto hubiera sido preguntarle el porqué de su aspecto, fue otra cosa lo que salió de sus labios.
— ¿Por qué no le pediste que te ayudara con las sillas? —pregunta que más tarde le pareció estúpida.
— Darien… es que ella… no estaba sola.
De acuerdo, esto ahora si le parecía sospechoso y nada bueno. El autocontrol del que siempre había sido poseedor, se estaba yendo directo al caño y sin importarle que estuviera hablando con su mejor amigo, elevó la voz gritándole exasperado y con temor.
—Explícate Andrew Furuhata y déjate de rodeos.
— Que me encontré a Saori con otro chico y no estaban precisamente dándose la hora —le contestó bastante alterado e indignado por el asunto.
No supo cómo ni cuándo, pero de repente ya se hallaba corriendo hacia la bodega de la escuela, esperanzado de que fuera una broma de mal gusto de Andrew, y que después él, Reika, y Saori se burlarían de su persona toda la semana.
Llegó con los pies temblorosos, todo estaba en silencio. Se acercó poco a poco, y pudo encontrarla, ahí recogiendo los desastres de su encuentro, con nada más y nada menos que Rubeus, un chico al que consideraba su amigo y al cual había ayudado a estudiar para aprobar el año. No se percataron de su presencia, así que hablaron descaradamente.
— Esto fue excitante, como todos nuestros encuentros claro, pero este lo superó.
—Claro primor y puede ser aún mejor esta noche. Que dices ¿nos vemos en el baile? Será excitante. ¿Por qué no? Bueno, eso si logras deshacerte del insulso hombre que tienes por novio.
— Ni me digas. Ya me tiene harta con sus ridiculeces.
Entonces sucedió. Ellos se besaron enfrente de Darien y fue demasiado para él. No toleraría seguir siendo la burla de esos dos, así que salió de su escondite y gritó enfurecido
— Si tanto te molesta ¿Por qué no decírmelo Saori? ¿Por qué dejarme hacer el ridículo?
Al principio los amantes se alteraron y sus rostros reflejaron angustia. Después la angustia se transformó en sorpresa, para dar paso a la burla. La sonora y descarada carcajada que Saori soltó, sorprendió tanto a Darién como a Rubeus.
— Así que ya me descubriste. Mejor, así me ahorras el trabajo de darte explicaciones. Estoy harta de ti, tan estúpido, que dejaste de ser tú mismo para mantenerme contenta… Pues fíjate que ni así lo lograste. Tus ridiculeces y cursilerías me ahogan. Las mujeres como yo, no vivimos de detallitos tontos que solo muestran la inmadurez de un hombre. Lo que queremos las mujeres es un hombre de verdad, no una imitación. Y bueno, no te lo dije porque no me convenía. Mis tíos te aprueban Darien, solo tenía que decir “Voy con Darien” y no ponían peros a un permiso. Si terminaba contigo, perdería todo aquello, aunque ahora tendré que buscarte un remplazo. Ni modo, que se le va a hacer.
Se quedó totalmente en shock. No supo que decir, se sentía aturdido y solo podía escuchar la escandalosa risa de Saori que se dirigía a la salida, tan triunfante de haberle dicho todo eso que parecía disfrutarlo. Darién se sintió herido, ninguna pizca de vergüenza existía en esa mujer.,
—Después de eso mi vida se volvió más fría y monótona. La relación con Andrew se dañó, nos distanciamos por un año y no volvimos a hablarnos hasta tercer año. No es que culpara a Drew o a Reika, pero estar cerca, los perjudicaría más a ellos que a mí. No podía ponerlos a escoger entre Saori y yo, porque sería una decisión dividida, ya que Saori era prima de Reika.
Los recuerdos habían hecho que a Darién se le pusiera la voz ronca.
— Entonces, la chica de la foto, ¿es Saori?
—No, ella es otra historia. Te conté lo de Saori, porque querías conocerme y creo que lo sucedido con ella perjudicó mi relación con Serena, que es la chica de la foto. Lo de Serena fue distinto —no pudo evitar que una cálida sonrisa se pintara en su rostro al pronunciar su nombre —… pero mira esto, se acabó el té. Iré a preparar más y te cuento
Darien se retiró a la cocina mientras Karmesite se quedó en la sala observando una y otra vez el retrato.
HASTA AQUÍ CHICAS, YA SABEN ESPERO SUS OPINIONES Y LAS PEDRADAS QUE QUIERAN DARME, POR NO SER TAN BUENA ESCRITORA
GABY_MOON12: Si la chica del aeropuerto es Karmesite
haruka-moon: Querida Haruka, no fueron a hacer nada malo a el departamento, en que estas pensando mujer y bueno este capitulo si esta largo, espero te guste
Leslie.Sailor_Mercury: Nena, esta historia alterna las scout, no existen, espero no haberte decepcionado, mil disculpas si alguien mas se confundió
Irma: Bienvenida al fic, me alegra que te guste
Serenity Chiva: Bienvenida al fic, y aquí te dejo otro capi para que sigas leyendo
seiloraraceli: Nena bienvenida, no dispongo de mucho tiempo, pero créeme, voy a leer tu fic en cuanto pueda y dejare los respectivos comentarios
Usagui: Amiga, se cumplirá tu deseo, sabrás como fueron las cosas, pero hasta el próximo capitulo
sweetkitymoon: Gracias por leer el fic nena, me alegra que te guste, leí algunos capítulos de el tuyo, pero no dispongo de mucho tiempo para hacerlo, así que mas adelante me pongo al corriente, aunque no me gusto que pintaras tan malo a mi Darién.
Última edición por USAKO-TENHOU el Sáb Ago 01, 2015 12:53 pm, editado 4 veces
Usako Tenoh- Neo Reina Serena
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por haruka-moon Mar Dic 08, 2009 12:43 am
oye amiga pobrecito de darien ![[SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015 - Página 2 671489](/users/2513/14/93/41/smiles/671489.gif)
como le pudo hacer eso la zorra de saori
y k contara de serena![[SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015 - Página 2 3289](/users/2513/14/93/41/smiles/3289.gif)
no tardes mucho xq me dejaste muy triste
por darien aahhhhh nos vemios :Adios:
como le pudo hacer eso la zorra de saori
y k contara de serena
no tardes mucho xq me dejaste muy triste
por darien
aahhhhh nos vemios :Adios:
haruka-moon- Neo Reina Serena
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por Seiya-Moon Mar Dic 08, 2009 12:46 am
uhhhh pobre darien 2 chicas lo dejaron por otro.....
Seiya-Moon- Neo Reina Serena
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por irma Mar Dic 08, 2009 10:03 pm
saori es una tonta como pudo engañar a un bombom como darien, imposible perdonarla ,serena es muy cruel con mi darien le robo todo hasta su corazon tambien ella es una tonta por dejar a un hombresote como darien por un niño seiya, gracias por la bienvenida a tu finc.besos ![[SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015 - Página 2 260747](/users/2513/14/93/41/smiles/260747.gif)
irma- Sailor Scout
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por Serenity Chiba Miér Dic 09, 2009 8:10 pm
Pobre de mi Darien pero yo quiero leer la historia de el y Serena ![[SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015 - Página 2 389229](/users/2513/14/93/41/smiles/389229.gif)
y que esa Serena tonta se de cuanta que Darien es el amor de su vida!!
pero yo quiero leer la historia de el y Serena y que esa Serena tonta se de cuanta que Darien es el amor de su vida!!
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por seiloraraceli Jue Dic 10, 2009 4:32 pm
aii
serena no cambia![[SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015 - Página 2 979295](/users/2513/14/93/41/smiles/979295.gif)
te felicito0muii bueno el capitulo
felicidades escribes
lindo
a te invito a leer mi ficc
adio0s
serena no cambia
te felicito0muii bueno el capitulo
felicidades escribes
lindo
a te invito a leer mi ficc
adio0s
seiloraraceli- Sailor Outer Scout
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por Leslie.Sailor_Mercury Jue Dic 10, 2009 7:37 pm
ay amiga perdon por escribirte recien...pero este capitulo estuvo muy revelador....mm..esa Saori que descarada...mm..y con Rubeus...ah!.ahora quiero saber lo que dira de serena..spero que no sea tan mala como la descripcion de la situacion con saori..eh!..jeje..no te confundo mas solo espero que ACTUALIZES PRONTO!!!...saludos..bye
Leslie.Sailor_Mercury- Reina Serenity
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por Usako Tenoh Vie Dic 11, 2009 10:32 pm
Capitulo 6 Parte 1: La mujer que amo
Había comenzado a llover hacía diez minutos. Desde el marco de la ventana del departamento de Darien, ubicado en el centro de Manhattan, el moreno y su amiga veían caer las gotas de agua.
—Vaya, la lluvia es algo traicionera ¿no crees? Hace unas horas, el sol estaba en todo su esplendor y mira ahora, el cielo es gris… ¿Sabes Darien? No me gusta la lluvia —confesó Karmesite con sinceridad, mientras miraba hacia la gran ciudad.
El joven la miró con una sonrisa torcida. Era la primera vez que no estaban de acuerdo en algo.
— A mí me encanta la lluvia —le dijo con añoranza, evocando aquellos recuerdos llenos de dicha; tan lejanos y tan cercanos al mismo tiempo.
La chica que estaba frente a él, lo miró con los ojos muy abiertos y aspecto de extrañeza.
— Y… ¿Se puede saber cuál es la razón? — preguntó, ya que, según su parecer, era raro que a alguien le gustara la lluvia.
Darien esbozó su mejor sonrisa y en ella se podía notar la felicidad que embargaba a aquel hombre.
— Porque conocí a la mujer que amo en medio de la lluvia, y también fue en un día de lluvia cuando la besé por primera vez.
— ¿Quieres contarme? —preguntó nuevamente Karmesite, esperando no ser imprudente.
— Claro, pero ¿te importaría que fuera aquí? Quiero seguir viendo las gotas de lluvia caer —expresó él, con voz cálida y esperanzada.
La chica asintió, dejando notar que no tenía ningún problema, por lo que Darién dio comienzo a su relato, sumergiéndose en los recuerdos y las imágenes que llegaban a su mente como un calidoscopio.
.
.
.
Corría sobre la acera de una gran avenida, parecía ir discutiendo con alguien, pero en realidad iba solo, ya que se auto reclamaba a sí mismo.
— ¡Bonito día escogiste para ir caminando a la prepa, Darien Chiba! Si tan solo hubieses hecho caso del pronóstico del clima, esto no te estaría pasando. Ahora tendrás que comprar un cuaderno nuevo y encima pasar todos los apuntes —le repetía su fuero interno —. Claro me vas a decir; ¿De qué te quejas? Te sirve para repasar. Si claro, pero por lo menos hubieras cogido un paraguas y un suéter, ¿Y si te resfrías, qué? Obviamente podrías perder días de clases.
Iba tan concentrado en sus reclamos internos, cuando de repente pudo distinguir como una chica rubia era lanzada al frío piso por un bruto que no se fijaba por donde iba. Como buen samaritano, y caballero sobre todo, Darien se acerca a la chica para ofrecerle ayuda.
La chica aun en el piso, con la cabeza agachada y sollozando, no prestó mucha atención al chico y empezó a murmurar:
— Son unos brutos. ¿No se pueden fijar por dónde van? Ha sido un pésimo día para mí y encima tengo que soportar que un desconsiderado me tumbe al suelo ¿Qué falta ahora? Que pase un auto y me salpique todita… ¡Ah sí! Eso sería lo último para que mi día fuera perfecto.
El tono sarcástico con el que pronunciaba aquellas palabras, era notorio para cualquiera que la escuchara, y por inercia, miró hacia el frente para percatarse que un auto se aproximaba. Al darse cuenta de que no tendría tiempo para levantarse, automáticamente llevó sus manos a su cara, para evitar que el agua le entre a los ojos.
Esperaba que en cualquier momento le llegara el chapuzón al cuerpo, pero en vez de sentir eso, siente como unos cálidos brazos la envuelven y la atraen contra el pecho del dueño de estos, al mismo tiempo que la va levantando y arrimando más adentro de la acera, evitando que sea salpicada por otro auto o tumbada por alguien más.
La joven aún estaba desconcentrada, a tal punto que no había visto siquiera el rostro del chico; sin embargo no sintió incomodidad, y por alguna extraña razón, no quería que la soltara. Deseó quedarse así por mucho tiempo, pero pese a sus deseos, el chico se fue separando lentamente de ella, al mismo tiempo que le ofrecía una disculpa.
— ¿Se encuentra bien? —le pregunta, separándose despacio de ella —. Disculpe señorita, no quise tomar tal confianza con usted, pero es que escuche que tuvo un mal día y un accidente así la dejaría en un estado de frustración incontenible.
La rubia quedo perpleja ¿Acaso habría escuchado lo que ella murmuraba? “Claro que te escuchó Serena tonta, es obvio”, se decía a sí misma. Lentamente, fue subiendo la cabeza, al mismo tiempo que pronuncia un “ Gra…gracias” entrecortado; porque al encontrarse con los ojos de él, pudo distinguir la mirada media noche más encantadora que jamás imaginó ver. Era cierto que había conocido a chicos con el mismo color de ojos, pero a esos otros les había faltado aquel brillo especial que aquel desconocido poseía. Era una mirada, que con tan solo una vez, ya la tenía hechizada por completo y no se podía explicar cuál era la razón. Pero si su mirada la había cautivado, el oír más claramente su voz, la dejo prendada de aquel caballero.
— Descuide, necesitaba ayuda y yo estaba ahí para dársela. Debo irme... que le vaya bien —respondió el chico, quien retomó su camino y se alejó rápidamente.
Serena se quedó un poco decepcionada. El chico había sido bastante educado, pero muy frio a su parecer, aun así susurró: “Me llamo Serena”... Serena tonta, porque no le dijiste que te esperara y que le invitabas un café en agradecimiento. Así ahora sabrías su nombre y él sabría el tuyo… ¿Pero qué estoy diciendo?, de haberlo hecho, quién sabe cómo lo hubiera tomado; seguramente hubiese creído que le coqueteaba. Es mejor que se haya ido… aunque tiene los ojos más encantadores que he visto. Sacudió su cabeza ante tal pensamiento mientras alisaba un poco su faldita de uniforme. Cuando creyó que estaba lista, retomó su camino, sin embargo, sus pensamientos seguían con el joven de orbes zafiro. Serena jamás se había fijado en nadie que no fuera su amigo de la infancia, y por eso había rechazado a muchos pretendientes, esperando su regreso. Debido a eso, ahora la desconcertaba haber quedado prendada de aquel desconocido.
HORAS MÁS TARDE, EN EL CROWN CENTER
Darien tomaba su café, como siempre, en una de las mesas más alejadas y solas del lugar. Nunca le había gustado sociabilizar con los demás, pero en el último año y medio se había vuelto aún más cerrado. Las malas experiencias transcurridas el año pasado, habían dejado una herida profunda en su corazón y ahora le costaba más trabajo confiar en los demás. Con todo y ello, se alegraba de volver a relacionarse con su amigo de infancia, que se acababa de sentar para saludarlo.
— ¡Hola Darien! Veo que hoy viniste más temprano —saludó sonriente su único amigo.
— Si, termine mis labores a buena hora. Solo tengo que pasar unos apuntes a un nuevo cuaderno, ya que el otro se mojó, pero eso lo haré más tarde. No son tan urgentes —informó con parsimonia. Ahora que estaba solo, tiempo era lo que más tenía.
— ¿Darien? —preguntó dubitativo Andrew, mientras jugaba con los dedos sobre la mesa.
— Dime —contestó serio, pues ese claro signo de nerviosismo era común en Andrew cuando estaba tramando algo. Y que Dios lo ayudara si era así, porque no quería volver a distanciarse de él.
El rubio estaba un poco nervioso, pero al mal paso darle prisa, y con la voz temblorosa dijo:
— Amigo, sé que la última vez que te pedí un favor, todo terminó mal, y además hace poco tiempo que retomamos nuestra amistad, y de verdad, verdad, que no quiero que nos volvamos a distanciar. Y aunque creas que abuso de nuestra amistad, quiero pedirte un favor.
— No saldré en una cita a ciegas, Andrew —contestó el pelinegro con fastidio. La última vez que Andrew le había pedido un favor, organizó una cita a ciegas, que en su momento le gustó, pero que también le dañó el corazón.
— No se trata de eso amigo —respondió Drew bastante contrariado y dolido, pues sabía las razones de Darién para negarse a tener una cita y menos a ciegas.
— ¿Entonces? —cuestionó Darién frunciendo el ceño porque algo no le cuadraba. Andrew no era un hombre que necesitara muchos favores y cuando los necesitaba, siempre era porque había una chica de por medio. Pronto se daría cuenta que esta no sería la excepción.
— Se trata de esto —le respondió, mientras le extendía una hoja de papel para que la tomara.
El chico lo miró con cara de espanto y desaprobación, y en un tono algo irritado le dijo:
— No me digas que estás engañando a Reika con una niña tonta de secundaria, que ni siquiera puede aprobar un examen de matemáticas con preguntas que cualquier niño de primaria solucionaría.
El rubio se exaltó. Como podía Darién pensar semejante cosa. Él amaba a Reika por sobre todas las cosas y jamás la traicionaría. Así que, levantándose de su asiento y obstruyéndole la vista del panorama a Darien, le dijo en el mismo tono de voz.
— Como se te ocurre, Darien… claro que no. Yo a Serena la veo como a mi hermanita y es por eso que quiero que la ayudes a estudiar, ya que tú eres un chico muy inteligente. Si sigue reprobando, perderá el año, ya que matemáticas es una materia básica.
— Serena ¿Quién es ella? —preguntó, arqueando una ceja.
— Es una amiga mía y las matemáticas no son su fuerte. Tú sabes lo importante que es esa materia y si no la aprueba, va a perder el año —declaró el rubio preocupado.
— Sé perfectamente bien eso, Drew, pero porque no mejor le dices a la cabeza hueca dueña de este examen, que se vaya acostumbrando a la idea de repetir el año, ya que solo un milagro podría ayudarla —le espetó en tono arrogante, observando la hoja de papel y los 30 puntos del examen —. No podrá meterse en la cabeza, en unos días, lo que no pudo aprenderse durante medio semestre.
Ambos estaban tan sumergidos en su discusión, que no se percataron que detrás de Andrew se encontraba Serena, la dueña del examen, que sin querer había alcanzado a escuchar las últimas palabras de Darien. Un poco avergonzada, decidió hacerse notar.
— Andrew, solo vine a despedirme. Ya es tarde y tengo que regresar a casa.
La rubia tenía los ojos cristalizados. Sin duda estaba haciendo un gran esfuerzo por contener las lágrimas, ya que reconoció al chico que la había ayudado esa misma tarde, y por una extraña razón, sentía una daga en el pecho por el hecho de que él se expresara así de ella.
No entendía porque se sentía de esa manera, ya que antes le habían dicho que era una cabeza hueca. De hecho, Reí se lo decía todo el tiempo; sin embargo, que esas palabras vinieran de él, le dolían mucho y eso que apenas lo conocía.
— En serio Drew, gracias por quererme ayudar, pero tu amigo tiene razón. Es mejor que me acostumbre a la idea de repetir el año —agregó con una voz más triste que antes.
— Serena, espera —la detuvo Andrew, mientras se hacía a un lado permitiéndole a Darien apreciar el rostro de la joven dueña del examen.
Al verla se quedó en estado de shock, al darse cuenta que era la misma dueña de esos hermosos ojos azul celeste que esa tarde lo habían cautivado, dejándolo con el enorme deseo de volver a verlos. Aquella a la que había soltado de mala gana de sus brazos esa tarde, ya que él hubiera querido tenerla así por siempre. En ese momento se percató de que la chica comenzaba a darse vuelta para retirarse y en automático, se levantó apresuradamente y la tomó del brazo.
— Espera, no te vayas. No quise ser grosero pero es que también tuve un mal día —le trató de explicar y en su tono podía distinguirse la súplica y la desesperación.
El corazón de la rubia se alegró al escuchar esas palabras. Él la recordaba porque de no hacerlo, no hubiera usado el término "también"; además de eso, le estaba pidiendo disculpas y pidiéndole que se quedara. Sin embargo, en ese momento su orgullo floreció, recordándole lo que él había dicho segundos antes, por lo que decidió contestar de forma negativa.
— Descuida, no quiero incomodarte, ni tampoco que te sientas comprometido conmigo solo porque te pillé hablando mal de mí.
— No, espera. No me siento comprometido, de verdad lamento lo que dije. No te vayas… Además, ha empezado a llover otra vez y no queremos que termines en el suelo una vez más o peor, que esta vez pase un auto y yo no esté ahí para rescatarte.
Andrew los miró, incrédulo
Aunque en realidad a Darien no le preocupaba que él no estuviera ahí para ayudarla, sino que alguien más lo hiciera; que alguien más la tuviera entre sus brazos. Ese privilegio solo podía ser de él. Mientras, Serena sintió su corazón palpitar más rápido de lo normal. La recordaba, ahora podía estar segura de que él la recordaba.
— Quédate por favor —suplicó el joven apenado —. Mira, qué te parece si te quedas hasta que pare la lluvia y mientras tanto yo te explico que fue lo que hiciste mal en el examen — la gran sonrisa que se dibujó en su rostro podía convencer a cualquiera, y la rubia no fue la excepción.
Por un minuto, Serena pensó en darle una negativa, pero la sonrisa de Darien la conquistó y muy alegremente le preguntó:
— ¿De verdad? ¿Eso quiere decir que si me vas a dar las tutorías?
— ¿Tutorías? —preguntó Darién, confundido.
— Sí. Drewy dijo que tenía un amigo muy listo que me podía dar tutorías para aprobar el año. Luego se dirigió hacia ti y después pasó lo que ambos sabemos… pero ¿me las darás verdad? —su voz sonaba alegre y llena de esperanza, por lo que si en algún momento Darién pensó en negarse, sin duda lo hizo cambiar de opinión.
Con una gran sonrisa el pelinegro contestó sin demora.
— Sí, no hay problema. Te las daré —volviendo a regalarle una sonrisa encantadora a la joven rubia, provocando su sonrojo.
Ambos estaban tan concentrados el uno en el otro, que se habían olvidado de cierto rubio que se encontraba allí cerca. Andrew se encontraba confundido. Darien no era de los que se retractaba tan fácilmente cuando decía algo. Él había dicho que Serena era una cabeza hueca, y sin embargo, ahora se había disculpado y además había aceptado ayudarla. Eso era realmente extraño para él, pero decidió no incomodar preguntando qué era lo que sucedía, y solo dijo:
— Perfecto, ahora Serenita podrá aprobar el año. En agradecimiento, hoy invito yo Darien, así que ya sabes, pide lo que quieras.
— ¡Sí! ¡Viva! Entonces yo quiero chocolate caliente junto con unos panecillos —comenzó a pedir Serena, dando brinquitos y provocando el nerviosismo de Andrew, que no la había contemplado en la invitación.
— Sere, en realidad la invitación era solo para Darien.
— Entonces, ¿Eso quiere decir que no me los traerás? —preguntó en tono melodramático y con un puchero de decepción bastante gracioso.
Darien, divertido y a la vez conmovido los pucheros de Serena, le dijo a su mejor amigo:
— Andrew, tráelos. Haz de cuenta de que es para mí, ya que yo solo quiero un café.
El rubio asintió y se dio la vuelta para dirigirse a la barra para solicitar y traer el pedido, mientras Serena y Darien se sentaron en la mesa que era ocupada, minutos antes, solo por él.
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Hasta aquí chicas, este capitulo me esta quedando realmente largo, así que lo dividiré en tres partes, espero sus comentarios o sugerencias si quieren aportar algo de que les gustaría tuviera este capitulo, ya saben nos vemos en la segunda parte del capitulo.
Había comenzado a llover hacía diez minutos. Desde el marco de la ventana del departamento de Darien, ubicado en el centro de Manhattan, el moreno y su amiga veían caer las gotas de agua.
—Vaya, la lluvia es algo traicionera ¿no crees? Hace unas horas, el sol estaba en todo su esplendor y mira ahora, el cielo es gris… ¿Sabes Darien? No me gusta la lluvia —confesó Karmesite con sinceridad, mientras miraba hacia la gran ciudad.
El joven la miró con una sonrisa torcida. Era la primera vez que no estaban de acuerdo en algo.
— A mí me encanta la lluvia —le dijo con añoranza, evocando aquellos recuerdos llenos de dicha; tan lejanos y tan cercanos al mismo tiempo.
La chica que estaba frente a él, lo miró con los ojos muy abiertos y aspecto de extrañeza.
— Y… ¿Se puede saber cuál es la razón? — preguntó, ya que, según su parecer, era raro que a alguien le gustara la lluvia.
Darien esbozó su mejor sonrisa y en ella se podía notar la felicidad que embargaba a aquel hombre.
— Porque conocí a la mujer que amo en medio de la lluvia, y también fue en un día de lluvia cuando la besé por primera vez.
— ¿Quieres contarme? —preguntó nuevamente Karmesite, esperando no ser imprudente.
— Claro, pero ¿te importaría que fuera aquí? Quiero seguir viendo las gotas de lluvia caer —expresó él, con voz cálida y esperanzada.
La chica asintió, dejando notar que no tenía ningún problema, por lo que Darién dio comienzo a su relato, sumergiéndose en los recuerdos y las imágenes que llegaban a su mente como un calidoscopio.
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Corría sobre la acera de una gran avenida, parecía ir discutiendo con alguien, pero en realidad iba solo, ya que se auto reclamaba a sí mismo.
— ¡Bonito día escogiste para ir caminando a la prepa, Darien Chiba! Si tan solo hubieses hecho caso del pronóstico del clima, esto no te estaría pasando. Ahora tendrás que comprar un cuaderno nuevo y encima pasar todos los apuntes —le repetía su fuero interno —. Claro me vas a decir; ¿De qué te quejas? Te sirve para repasar. Si claro, pero por lo menos hubieras cogido un paraguas y un suéter, ¿Y si te resfrías, qué? Obviamente podrías perder días de clases.
Iba tan concentrado en sus reclamos internos, cuando de repente pudo distinguir como una chica rubia era lanzada al frío piso por un bruto que no se fijaba por donde iba. Como buen samaritano, y caballero sobre todo, Darien se acerca a la chica para ofrecerle ayuda.
La chica aun en el piso, con la cabeza agachada y sollozando, no prestó mucha atención al chico y empezó a murmurar:
— Son unos brutos. ¿No se pueden fijar por dónde van? Ha sido un pésimo día para mí y encima tengo que soportar que un desconsiderado me tumbe al suelo ¿Qué falta ahora? Que pase un auto y me salpique todita… ¡Ah sí! Eso sería lo último para que mi día fuera perfecto.
El tono sarcástico con el que pronunciaba aquellas palabras, era notorio para cualquiera que la escuchara, y por inercia, miró hacia el frente para percatarse que un auto se aproximaba. Al darse cuenta de que no tendría tiempo para levantarse, automáticamente llevó sus manos a su cara, para evitar que el agua le entre a los ojos.
Esperaba que en cualquier momento le llegara el chapuzón al cuerpo, pero en vez de sentir eso, siente como unos cálidos brazos la envuelven y la atraen contra el pecho del dueño de estos, al mismo tiempo que la va levantando y arrimando más adentro de la acera, evitando que sea salpicada por otro auto o tumbada por alguien más.
La joven aún estaba desconcentrada, a tal punto que no había visto siquiera el rostro del chico; sin embargo no sintió incomodidad, y por alguna extraña razón, no quería que la soltara. Deseó quedarse así por mucho tiempo, pero pese a sus deseos, el chico se fue separando lentamente de ella, al mismo tiempo que le ofrecía una disculpa.
— ¿Se encuentra bien? —le pregunta, separándose despacio de ella —. Disculpe señorita, no quise tomar tal confianza con usted, pero es que escuche que tuvo un mal día y un accidente así la dejaría en un estado de frustración incontenible.
La rubia quedo perpleja ¿Acaso habría escuchado lo que ella murmuraba? “Claro que te escuchó Serena tonta, es obvio”, se decía a sí misma. Lentamente, fue subiendo la cabeza, al mismo tiempo que pronuncia un “ Gra…gracias” entrecortado; porque al encontrarse con los ojos de él, pudo distinguir la mirada media noche más encantadora que jamás imaginó ver. Era cierto que había conocido a chicos con el mismo color de ojos, pero a esos otros les había faltado aquel brillo especial que aquel desconocido poseía. Era una mirada, que con tan solo una vez, ya la tenía hechizada por completo y no se podía explicar cuál era la razón. Pero si su mirada la había cautivado, el oír más claramente su voz, la dejo prendada de aquel caballero.
— Descuide, necesitaba ayuda y yo estaba ahí para dársela. Debo irme... que le vaya bien —respondió el chico, quien retomó su camino y se alejó rápidamente.
Serena se quedó un poco decepcionada. El chico había sido bastante educado, pero muy frio a su parecer, aun así susurró: “Me llamo Serena”... Serena tonta, porque no le dijiste que te esperara y que le invitabas un café en agradecimiento. Así ahora sabrías su nombre y él sabría el tuyo… ¿Pero qué estoy diciendo?, de haberlo hecho, quién sabe cómo lo hubiera tomado; seguramente hubiese creído que le coqueteaba. Es mejor que se haya ido… aunque tiene los ojos más encantadores que he visto. Sacudió su cabeza ante tal pensamiento mientras alisaba un poco su faldita de uniforme. Cuando creyó que estaba lista, retomó su camino, sin embargo, sus pensamientos seguían con el joven de orbes zafiro. Serena jamás se había fijado en nadie que no fuera su amigo de la infancia, y por eso había rechazado a muchos pretendientes, esperando su regreso. Debido a eso, ahora la desconcertaba haber quedado prendada de aquel desconocido.
HORAS MÁS TARDE, EN EL CROWN CENTER
Darien tomaba su café, como siempre, en una de las mesas más alejadas y solas del lugar. Nunca le había gustado sociabilizar con los demás, pero en el último año y medio se había vuelto aún más cerrado. Las malas experiencias transcurridas el año pasado, habían dejado una herida profunda en su corazón y ahora le costaba más trabajo confiar en los demás. Con todo y ello, se alegraba de volver a relacionarse con su amigo de infancia, que se acababa de sentar para saludarlo.
— ¡Hola Darien! Veo que hoy viniste más temprano —saludó sonriente su único amigo.
— Si, termine mis labores a buena hora. Solo tengo que pasar unos apuntes a un nuevo cuaderno, ya que el otro se mojó, pero eso lo haré más tarde. No son tan urgentes —informó con parsimonia. Ahora que estaba solo, tiempo era lo que más tenía.
— ¿Darien? —preguntó dubitativo Andrew, mientras jugaba con los dedos sobre la mesa.
— Dime —contestó serio, pues ese claro signo de nerviosismo era común en Andrew cuando estaba tramando algo. Y que Dios lo ayudara si era así, porque no quería volver a distanciarse de él.
El rubio estaba un poco nervioso, pero al mal paso darle prisa, y con la voz temblorosa dijo:
— Amigo, sé que la última vez que te pedí un favor, todo terminó mal, y además hace poco tiempo que retomamos nuestra amistad, y de verdad, verdad, que no quiero que nos volvamos a distanciar. Y aunque creas que abuso de nuestra amistad, quiero pedirte un favor.
— No saldré en una cita a ciegas, Andrew —contestó el pelinegro con fastidio. La última vez que Andrew le había pedido un favor, organizó una cita a ciegas, que en su momento le gustó, pero que también le dañó el corazón.
— No se trata de eso amigo —respondió Drew bastante contrariado y dolido, pues sabía las razones de Darién para negarse a tener una cita y menos a ciegas.
— ¿Entonces? —cuestionó Darién frunciendo el ceño porque algo no le cuadraba. Andrew no era un hombre que necesitara muchos favores y cuando los necesitaba, siempre era porque había una chica de por medio. Pronto se daría cuenta que esta no sería la excepción.
— Se trata de esto —le respondió, mientras le extendía una hoja de papel para que la tomara.
El chico lo miró con cara de espanto y desaprobación, y en un tono algo irritado le dijo:
— No me digas que estás engañando a Reika con una niña tonta de secundaria, que ni siquiera puede aprobar un examen de matemáticas con preguntas que cualquier niño de primaria solucionaría.
El rubio se exaltó. Como podía Darién pensar semejante cosa. Él amaba a Reika por sobre todas las cosas y jamás la traicionaría. Así que, levantándose de su asiento y obstruyéndole la vista del panorama a Darien, le dijo en el mismo tono de voz.
— Como se te ocurre, Darien… claro que no. Yo a Serena la veo como a mi hermanita y es por eso que quiero que la ayudes a estudiar, ya que tú eres un chico muy inteligente. Si sigue reprobando, perderá el año, ya que matemáticas es una materia básica.
— Serena ¿Quién es ella? —preguntó, arqueando una ceja.
— Es una amiga mía y las matemáticas no son su fuerte. Tú sabes lo importante que es esa materia y si no la aprueba, va a perder el año —declaró el rubio preocupado.
— Sé perfectamente bien eso, Drew, pero porque no mejor le dices a la cabeza hueca dueña de este examen, que se vaya acostumbrando a la idea de repetir el año, ya que solo un milagro podría ayudarla —le espetó en tono arrogante, observando la hoja de papel y los 30 puntos del examen —. No podrá meterse en la cabeza, en unos días, lo que no pudo aprenderse durante medio semestre.
Ambos estaban tan sumergidos en su discusión, que no se percataron que detrás de Andrew se encontraba Serena, la dueña del examen, que sin querer había alcanzado a escuchar las últimas palabras de Darien. Un poco avergonzada, decidió hacerse notar.
— Andrew, solo vine a despedirme. Ya es tarde y tengo que regresar a casa.
La rubia tenía los ojos cristalizados. Sin duda estaba haciendo un gran esfuerzo por contener las lágrimas, ya que reconoció al chico que la había ayudado esa misma tarde, y por una extraña razón, sentía una daga en el pecho por el hecho de que él se expresara así de ella.
No entendía porque se sentía de esa manera, ya que antes le habían dicho que era una cabeza hueca. De hecho, Reí se lo decía todo el tiempo; sin embargo, que esas palabras vinieran de él, le dolían mucho y eso que apenas lo conocía.
— En serio Drew, gracias por quererme ayudar, pero tu amigo tiene razón. Es mejor que me acostumbre a la idea de repetir el año —agregó con una voz más triste que antes.
— Serena, espera —la detuvo Andrew, mientras se hacía a un lado permitiéndole a Darien apreciar el rostro de la joven dueña del examen.
Al verla se quedó en estado de shock, al darse cuenta que era la misma dueña de esos hermosos ojos azul celeste que esa tarde lo habían cautivado, dejándolo con el enorme deseo de volver a verlos. Aquella a la que había soltado de mala gana de sus brazos esa tarde, ya que él hubiera querido tenerla así por siempre. En ese momento se percató de que la chica comenzaba a darse vuelta para retirarse y en automático, se levantó apresuradamente y la tomó del brazo.
— Espera, no te vayas. No quise ser grosero pero es que también tuve un mal día —le trató de explicar y en su tono podía distinguirse la súplica y la desesperación.
El corazón de la rubia se alegró al escuchar esas palabras. Él la recordaba porque de no hacerlo, no hubiera usado el término "también"; además de eso, le estaba pidiendo disculpas y pidiéndole que se quedara. Sin embargo, en ese momento su orgullo floreció, recordándole lo que él había dicho segundos antes, por lo que decidió contestar de forma negativa.
— Descuida, no quiero incomodarte, ni tampoco que te sientas comprometido conmigo solo porque te pillé hablando mal de mí.
— No, espera. No me siento comprometido, de verdad lamento lo que dije. No te vayas… Además, ha empezado a llover otra vez y no queremos que termines en el suelo una vez más o peor, que esta vez pase un auto y yo no esté ahí para rescatarte.
Andrew los miró, incrédulo
Aunque en realidad a Darien no le preocupaba que él no estuviera ahí para ayudarla, sino que alguien más lo hiciera; que alguien más la tuviera entre sus brazos. Ese privilegio solo podía ser de él. Mientras, Serena sintió su corazón palpitar más rápido de lo normal. La recordaba, ahora podía estar segura de que él la recordaba.
— Quédate por favor —suplicó el joven apenado —. Mira, qué te parece si te quedas hasta que pare la lluvia y mientras tanto yo te explico que fue lo que hiciste mal en el examen — la gran sonrisa que se dibujó en su rostro podía convencer a cualquiera, y la rubia no fue la excepción.
Por un minuto, Serena pensó en darle una negativa, pero la sonrisa de Darien la conquistó y muy alegremente le preguntó:
— ¿De verdad? ¿Eso quiere decir que si me vas a dar las tutorías?
— ¿Tutorías? —preguntó Darién, confundido.
— Sí. Drewy dijo que tenía un amigo muy listo que me podía dar tutorías para aprobar el año. Luego se dirigió hacia ti y después pasó lo que ambos sabemos… pero ¿me las darás verdad? —su voz sonaba alegre y llena de esperanza, por lo que si en algún momento Darién pensó en negarse, sin duda lo hizo cambiar de opinión.
Con una gran sonrisa el pelinegro contestó sin demora.
— Sí, no hay problema. Te las daré —volviendo a regalarle una sonrisa encantadora a la joven rubia, provocando su sonrojo.
Ambos estaban tan concentrados el uno en el otro, que se habían olvidado de cierto rubio que se encontraba allí cerca. Andrew se encontraba confundido. Darien no era de los que se retractaba tan fácilmente cuando decía algo. Él había dicho que Serena era una cabeza hueca, y sin embargo, ahora se había disculpado y además había aceptado ayudarla. Eso era realmente extraño para él, pero decidió no incomodar preguntando qué era lo que sucedía, y solo dijo:
— Perfecto, ahora Serenita podrá aprobar el año. En agradecimiento, hoy invito yo Darien, así que ya sabes, pide lo que quieras.
— ¡Sí! ¡Viva! Entonces yo quiero chocolate caliente junto con unos panecillos —comenzó a pedir Serena, dando brinquitos y provocando el nerviosismo de Andrew, que no la había contemplado en la invitación.
— Sere, en realidad la invitación era solo para Darien.
— Entonces, ¿Eso quiere decir que no me los traerás? —preguntó en tono melodramático y con un puchero de decepción bastante gracioso.
Darien, divertido y a la vez conmovido los pucheros de Serena, le dijo a su mejor amigo:
— Andrew, tráelos. Haz de cuenta de que es para mí, ya que yo solo quiero un café.
El rubio asintió y se dio la vuelta para dirigirse a la barra para solicitar y traer el pedido, mientras Serena y Darien se sentaron en la mesa que era ocupada, minutos antes, solo por él.
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Hasta aquí chicas, este capitulo me esta quedando realmente largo, así que lo dividiré en tres partes, espero sus comentarios o sugerencias si quieren aportar algo de que les gustaría tuviera este capitulo, ya saben nos vemos en la segunda parte del capitulo.
Última edición por USAKO-TENHOU el Sáb Ago 01, 2015 1:11 pm, editado 2 veces
Usako Tenoh- Neo Reina Serena
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por Leslie.Sailor_Mercury Vie Dic 11, 2009 11:55 pm
Ahhh(suspiro)....que lindo encuentro..el la protegio de las crueles aguas que un auto hizo aparecer..ahh(suspiro)...MM..jeje Darien como va a pensar que Andrew quiere engañar a reika con Serena..si el la considera su hermanita(como dijo)...jeje..ACTUALIZA PRONTO!!.saludos..bye
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por Seiya-Moon Vie Dic 11, 2009 11:57 pm
hay q lindo me encanto como se conoiero y como se enamoraron... sigue asi
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por haruka-moon Sáb Dic 12, 2009 4:24 pm
k lindo me gusto como se conocieron fue muy romantico ![[SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015 - Página 2 389229](https://sailormoonyalgomas.activoforo.com/users/2513/14/93/41/smiles/389229.gif)
aahhhhh yo kiero un chiko asi![[SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015 - Página 2 180572](https://sailormoonyalgomas.activoforo.com/users/2513/14/93/41/smiles/180572.gif)
......hasta la prox... ![[SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015 - Página 2 93362](https://sailormoonyalgomas.activoforo.com/users/2513/14/93/41/smiles/93362.gif)
aahhhhh yo kiero un chiko asi
......hasta la prox...
haruka-moon- Neo Reina Serena
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por seiloraraceli Dom Dic 13, 2009 1:39 pm
liindisiimo
creme tu tiienes
imagiinacion
y sensibilidad
te felicito0
me encanto el capitulo
haii esta liindicimo
creme tu tiienes
imagiinacion
y sensibilidad
te felicito0
me encanto el capitulo
haii esta liindicimo
seiloraraceli- Sailor Outer Scout
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por CherrieSA Dom Dic 13, 2009 1:48 pm
![[SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015 - Página 2 855714](/users/2513/14/93/41/smiles/855714.gif)
estuvo lindisimo, pero creo que Darien se habrá dado cuenta de que no hay que prejuzgar a las personas, ![[SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015 - Página 2 389469](/users/2513/14/93/41/smiles/389469.gif)
pero estuvo muy lindo en encuentro, 
lo que pasó en el crownpero quiero saber cómo fue le primer beso
CherrieSA- Sailor Inner Scout
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Re: [SAILOR MOON] [QUIERO VOLVER A TU LADO] [S&D] 01-08-2015
por ALIZUL MENESES ANDRIANO Dom Dic 13, 2009 2:42 pm
[b] ME ENCANTO.......ES UN FIC MUY ORIGINAL..... POBRE DARIEN ESTA SUFRIENDO MUCHO POR K SERENA LO DEJO....Y ASI DECEN K DARIEN ES INSENCIBLE SI ES UN NIÑO AMOROSO .........HHHHHHHHHHAAAAAAAAAAYYYYYYYYY..............POBRESITO.ME GUSTO MUCHO TU HISTORIA Y COMO LA CUENTAS...ESPERO VER PRONTO TUS ACTUALIZACIONES.
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