Recuérdame [S/S] PFF - Terminado

¡Hola!

¡Espero que todas se encuentren muy bien y hallan tenido un excelente inicio de año!

Bueno, si ya sé que hace dos semanas inicio el año, pero en fin, que mejor manera de comenzarlo que con ¡un nuevo fic! Esta va a ser una historia pequeña, de solo ocho capitulos cortos, así que las actualizaciones serán pronto.

En fin, no les digo más y ¡espero que disfruten de esta historia!

Recuérdame
Por Serenity

Capítulo 1
El Despertar

Abrí mis ojos lentamente, sintiendo las luces contra ellos, de inmediato los cerré sintiendo que me dolía todo el cuerpo, principalmente la cabeza. Volví a abrir los ojos y parpadee varias veces hasta acostumbrarme a la luz, observe a mi alrededor y me di cuenta de que estoy acostada en una cama de hospital. Creo que estoy en el Hospital General de Tokio, donde trabaja Ami.

–¿Serena? ¡Al fin despertaste! –grito Mina acercándose a mí y me envolvió en un fuerte abrazo –Me alegro tanto que despertaras.

–También me da gusto verte, Mina… Pero me vas a matar con ese abrazo.

–Lo siento –dijo ella soltándome y se sentó a mi lado –Estoy tan feliz de verte despierta. Tenía tanto miedo. Esta vez sí que nos diste un buen susto.

–¿Qué me paso? ¿Por qué estoy aquí?

–¿No lo recuerdas?

–No… lo último que recuerdo es que estábamos en el Templo Hikawa con Rei, Ami y Lita.

–Eso fue ayer en la tarde. ¿Recuerdas que paso después?

–No… no lo sé… me duele mucho la cabeza –dije llevándome una mano a la cabeza. Logre sentir un vendaje en la frente, muy cerca de mi cien.

–Te tuvieron que dar tres puntos. Estabas sangrando demasiado.

Me asuste enormemente al escucharla ¿Qué me había pasado?

–Tranquila, Serena, estarás bien. Llamare a la enfermera para que te de algo para el dolor.

–¡Bombón!

Un hombre muy atractivo, aunque algo desalineado y con unas enormes ojeras que delatan que necesitaba una buena noche de sueño, apareció de pronto en el umbral de la puerta con un par de vasos de café. Esta vestido con un traje rojo y con la corbata torcida. Tiene el cabello largo de color negro peinado con una coleta y los ojos más impresionantes que había visto en toda mi vida de color zafiro.

Tan rápido que apenas y pude notarlo, él se acercó rápidamente a mí mirándome con una enorme sonrisa mientras Mina le quitaba de las manos los vasos, solo segundos antes de que se sentara a mi lado y me envolviera entre sus brazos, estrechándome en la calidez de su cuerpo como si nunca me quisiera dejar ir.

–No te imaginas lo preocupado que he estado por ti, Bombón… –musito él besando mi cabeza, muy cerca de mi herida, sin soltarle.

Lo aparte de mi totalmente confundida por lo que hizo –¿Quién eres tú? ¿Y por qué me llamas Bombón?

–Muy graciosa…–dijo él con una pequeña sonrisa –No, en realidad no. Esa no es una buena broma después del susto de muerte que me has dado… Y pensar que yo estaba a la mitad de un concierto cuando ocurrió todo –dio un largo suspiro –No sé qué habría sido de mí si te hubiera perdido, Bombón.

–¿De qué hablas? –voltee a ver a mi amiga –¿Quién es él, Mina?

–¿Qué te pasa, Serena? –pregunto ella confundida –Es Seiya.

–Pues mucho gusto, Seiya –dije con una pequeña sonrisa –Y no me llamo bombón, soy Serena Tsukino.

–Sé cuál es tu nombre, y sabes que para mí eres y siempre serás Bombón… mi dulce Bombón –dijo él acariciando mi rostro con mucha ternura. No es que me queje, porque es muy agradable su caricia, pero es raro. No tengo ni idea de quién es él.

–Oye, no deberías de tomarte tantas confianzas conmigo como si fuera tu novia o algo así.

–Pero es que si es algo así. Eres mi novia, Bombón.

–¿Qué? –grite sorprendida –¡Mina, ya no me está gustando tu broma!

–¿De qué hablas? Seiya te está diciendo la verdad.

–¿Qué te pasa, Bombón? ¿Por qué actúas así? –pregunto Seiya preocupado.

–¿Y cómo debería actuar ante un extraño que dice que es mi novio cuando es la primera vez que te veo?

–Eso no es cierto, Serena –replico Mina –Conoces a Seiya desde hace años.

–No es posible, no recuerdo haberlo visto antes de hoy.

–¿Por qué dice eso, Mina? –le pregunto Seiya.

–No lo sé. Ni siquiera logra recordar lo que sucedió.

–Eso no explica porque si sabe quién eres tú y no sabe quién soy.

–No tengo idea –dijo Mina preocupada –Serena ¿sabes quiénes son las Sailor Scouts?

–¿Un nuevo grupo musical? –replique confundida.

Mina y Seiya intercambiaron una mirada de preocupación, como si acabara de anunciar la Tercera Guerra Mundial. No entiendo porque actúan así.

–Ok, esto se está poniendo muy feo… Voy por Ami. Quédate con ella, Seiya –dijo Mina dejando los cafés en la mesita a un costado de la cama para después salir corriendo de la habitación.

–No te preocupes, Bombón. Todo estará bien.

–Seiya ¿verdad? –dije y él asintió con la cabeza –En primer lugar, no me llamo Bombón. Y es muy lindo de tu parte preocuparte por mí, pero pese a lo que diga Mina, no te conozco. Creo que será mejor que te vayas

–No me voy a ir. Te prometí que nunca te dejaría y eso voy a hacer –dijo él poniendo un mechón de cabello detrás de mi oreja y empezó a acariciar mi mejilla, lo cual tengo que me pareció muy agradable –Ya hemos recorrido un largo camino para estar juntos. Unidos hemos superado muchas cosas y también superaremos esto. No me apartare de ti ahora que más me necesitas. Yo te amo, Bombón…

Seiya se inclinó rompiendo la distancia que nos separaba acercando sus labios a los míos, eche mi cabeza hacia atrás sorprendida de lo que está haciendo, pero él deslizo su mano hasta mi cuello acercándome a él y…

–¡Aléjate de ella, Kou! –exigio una profunda voz masculina. Seiya se separó de mí y vi frente a mi cama a un hombre muy alto y pocos años mayor que Seiya, de cabello corto oscuro y sus ojos de un profundo negro. Al lado de él estaba Haruka.

–¡Haruka!

–¿Por qué no nos avisaste que la gatita había despertado, Kou?

–Porque apenas despertó hace unos minutos, pero hay algo importante que resolver primero –replico Seiya –Además, ¿qué hace él aquí? No tiene ningún derecho a estar aquí.

–Sabes que está preocupado por ella –respondió Haruka –Pese a todo, no podemos negarle que la vea.

–Pues deberíamos…

El hombre que está al lado de Haruka, supongo que es el tal Darién, miro a Seiya con una profunda molestia. No le dijo nada mientras Haruka y él discutía, simplemente aprovecho para intentar acercarse a mi lado. No lo logro.

–¡Ni siquiera la toques, Chiba! –grito Seiya molesto interponiéndose en su camino.

–¿Quién es él?

–¿Tampoco sabes quién es él, Bombón?

–¿Debería? –musite confundida.

–Sí, para que así entienda que no tiene nada que hacer aquí.

Estaba por preguntarle a Seiya porque, cuando irrumpió en la habitación Mina junto con Ami.

–¿Qué hacen aquí? Les dije que esperaran con el resto de las chicas en la sala de espera –dijo Ami mirando a Haruka y al hombre que la acompaña.

–En lugar de regañarnos, deberías de hacer tu trabajo y ver a Serena.

–No me digas lo que tengo que hacer, Darién. Ya me dijo Mina lo que ocurre –le dijo Ami tras lo que se acercó a mi cama con una sonrisa amable –¡Hola, Serena! Soy la doctora Ami Mizuno.

–Ya sé quién eres, Ami.

–Me alegra que me recuerdes, esa es una buena señal –dijo ella con una dulce sonrisa –¿Cómo te sientes?

–Me duele la cabeza y creo que aumento mi dolor al escucharlos discutir.

–Comprendo. ¿Me permites? –Ami saco una pequeña linterna y me empezó a examinar los ojos por alguna razón que no entiendo –¿Puedes recordar que paso antes de que despertaras hace unos momentos, Serena?

–No, solo recuerdo que estaba contigo y las demás en el Templo Hikawa. Lo demás está en blanco hasta que desperté y a la primera que vi fue a Mina.

–¿Pero no tienes idea de quién es él? –pregunto Ami indicándome a Seiya.

–No, solo sé que dice que es mi novio.

–Eso es lo peor de todo….

–Lárgate ya de aquí, Chiba –musito Seiya molesto.

–Compórtense si no quieren que los saque a ambos –les pidió Ami a ambos.

–¿Crees que lo que le paso sea la causa de que no recuerde a Seiya? –pregunto Mina.

–Es probable… ¿Sabes quiénes son ellos, Serena? –pregunto Ami señalando a Haruka y al otro hombre que la acompaña.

–Solo reconozco a Haruka. No tengo idea de quien sea él.

–Soy Darién Chiba. Tu novio.

¿Otro novio?

–Ex novio –dijo Seiya de manera tajante –Ustedes terminaron hace mucho tiempo.

–Dejando a un lado el asunto del novio y el ex novio –dije interrumpiéndolos antes de que se desatara otra discusión y me duela más la cabeza –Quiero que alguien me diga porque estoy aquí. ¿Qué fue lo que me paso?

Todos intercambiaron miradas mientras se extendía el silencio a mi alrededor, lo cual empezó a asustarme de saber la respuesta.

–Tuviste un accidente en tu auto, gatita –respondió Haruka. Me quede paralizada cuando la escuche… un accidente automovilístico, así murieron mis padres y Sammy.

–No puedo creer que le dijeras eso, Tenoh, y más después de todo lo que le ha pasado –Musito Seiya molesto.

–Fue lo que le paso, Kou –dijo Haruka severamente –Sé que es duro y más después de lo que les paso a los Tsukino, pero afortunadamente la gatita está bien y se recuperara pronto.

Seiya la miro con molestia, como si no estuviera del todo de acuerdo con sus palabras.

¿Por qué tengo la sensación de que me están ocultando algo importante?

–Ami ¿por qué Serena no recuerda a Darién y a Seiya?

–Tiene amnesia selectiva, Mina. Significa que Serena perdió parte de su memoria, y parece que algunos de esos recuerdos que perdió tienen que ver con ellos –respondió ella –Supongo que es una forma en la que su cerebro la protege de lo que le ocurrió.

–¿La pérdida de los recuerdos de Serena podría ser a causa de su lesión en la cabeza? –pregunto Haruka.

–Sí, al parecer así es…

Seiya se acercó a la cama y me tomo la mano, apretándola con suavidad mientras Ami seguía hablando. Estaba consternada al sentir nuestros dedos entrelazados. Mi primer impulso fue retirar mi mano, pero por alguna extraña razón, me siento muy cómoda al sentir su cálida mano junto a la mía. Creo que ese golpe en la cabeza si me afecto ya que no entiendo porque siento el impulso de aferrarme con más fuerza al guapo desconocido a mi lado, mientras él apretó un poco más nuestras manos como en señal de apoyo.

–…Tendré que analizar a detalle los exámenes que se le realizaron para estar segura. Lo más probable es que sus recuerdos regresen una vez que baje la hinchazón de la lesión. Aunque no es ninguna garantía –dijo Ami, tras lo que volteo a mirarme –Sé que no es un consuelo, Serena, pero al menos no perdiste por completo tu memoria.

–¿Entonces porque tengo la sensación de que olvide una de las partes más importantes de mi vida?

–Porque realmente es así, Bombón –dijo Seiya –Pero no te preocupes porque pronto estarás bien y te ayudare a recuperar tus recuerdos.

–Los signos de Serena se han mantenido estables, así que no será necesario que se quede en el hospital –dijo Ami –Podrás llevártela a casa, Seiya, pero antes tendremos que hablar del medicamento que tomara para el dolor y…

–¡Espera! –grito Darién molesto interrumpiendo a Ami –No creo que en el estado de Serena, sea conveniente que se quede con ese sujeto.

–Tú ni opines, Chiba –dijo Seiya severamente –Yo mejor que nadie cuidare bien de Bombón, así que ella y yo volveremos juntos a nuestro hogar.

–Ella necesita de atenciones especiales para que se recupere. Creo que el más indicado para cuidarla soy yo.

–Estás loco si crees que voy a permitir que mi novia este contigo –replico Seiya, molesto.

–¡Oigan! Podre tener amnesia, pero soy una mujer adulta y no voy a quedarme con ninguno de ustedes –dije separando mi mano de la de Seiya –Y hasta donde recuerdo, yo vivo con Mina en un departamento frente al parque No. 10 –voltee a ver a Mina –Todavía seguimos viviendo ahí ¿verdad?

–Yo vivo ahí –dijo Mina –Vivimos juntas hasta hace unas semanas, después te mudaste al departamento de Seiya, así que ahora vives con él.

–¡Me dejaste mudarme con alguien que no conozco, Mina!

–Me conocías hasta hace veinticuatro horas, Bombón –dijo Seiya muy tranquilo. ¿Cómo puede tomarse las cosas con tanta calma mientras yo no sé ni qué hacer?

–Lo mejor sería que trataras de volver a tu vida normal, Serena –dijo Ami –Eso ayudaría a que pronto regresen tus recuerdos.

–¿Y eso incluye ir al lugar donde se supone que vivo con Seiya?

Ami asintió.

–¡No! ¡De ninguna manera! –exclame molesta –¡Ni loca iré allí!

¡Pobre Serena! Y más Seiya al ver a su novia así... Aunque si yo estuviera en el lugar de Serena, ni lo pensaba y ¡me iba a vivir al hogar de Seiya! En fin, ya vamos a ver en donde terminara nuestra rubia sin memoria...

Me despido por ahora esperando que les haya gustado el capítulo de hoy, como siempre, les pido que no olviden dejar sus comentarios, dudas, quejas o sugerencias que tengan. Muchos saludos para todos y ¡nos vemos en el proximo capitulo!

XOXO
Serenity

me encanto tu historia quiero mas

besos

felicitaciones. esta muy buena tu nueva historia

esta super interesante tu historia al igual que el resto

Me encanto, siguela pronto profiss

Muy buen capitulo, espero que actualices pronto..

en verdad me gusto mucho ya quiero saber que mas va a pasar

increible...esperare con ansie el siguiente capitulo...besitos...

hola! muy buena historia estaré al pendiente de actualizaciones

mi seiyaaaaaaaaaaa ahhh!! que hermosa descripcion :D
continualo please!!:3
quiero saber mas de mi seiya kouuu

Que buena forma para empezar el año y valla forma de empezar un fic y tan interesante como se ve este espero con ansias tu actualizacion.

Pobre Seiya**
pero ¿que fue lo que realmente le paso?**
lindo fics**

tu siempre me sorprendes amiga mia que fic tan interesante ...que paso realmente si tuvo un accidente o fue algo relacionado con darien y seiya porque veo que es asi porque termino con darien ??? y porqu haruka le respondio que darien tenia derecho a pesar de l que paso le puso cuernos=????? espero actualices pronto porque desde ya me encanta besos

Me encanta tu fic!. Esta muy interesante!!
espero que actualices pronto!!

¡Hola!

Primero que nada, ¡muchisimas gracias a todas ustedes por sus comentarios! Creanme que me hace muy feliz que les haya gustado el inicio de esta historia.

Yo sé que tienen muchas dudas sobre que le paso realmente a Serena para que terminara con una lesión en la cabeza y amnesia, como fue que termino con Darién y ahora esta con Seiya, y principalmente porque no los recuerda a ellos ni nada que tenga que ver con Sailor Moon o las Sailor Scouts, pero descuiden que eso lo iremos viendo conforme avancen los capitulos.

Ahora si, sin más preambulos las dejo con el capitulo 2 de esta historia ¡espero que la disfruten!


Capítulo 2
Hogar, Dulce Hogar

–¡Bienvenida a casa, Bombón! –exclamo Seiya al abrir la puerta de su departamento. Mina y yo entramos detrás de él.

De nada sirvieron mis quejas y, bajo el argumento de que debía seguir las indicaciones médicas, termine en el hogar de mi guapo y desconocido novio.

El lugar es bastante amplio, creo que es más del doble de grande del departamento que compartía con Mina. Aunque supongo que era de esperarse ya que se encuentra ubicado en una de las zonas más exclusivas de Tokio. Nos recibió una sala en donde se ve una chimenea al fondo, del otro lado está la cocina y un comedor; una amplia terraza en donde hay varias plantas y una pequeña mesita circular y da una impresionante vista de la ciudad. Al otro extremo hay un pasillo en donde logro ver al menos tres puertas. Supongo que al menos aquí habrá una habitación de huéspedes.

–Bueno, creo que estarás bien aquí, Serena –dijo Mina animada. Volteo a ver a Seiya –Será mejor que me vaya, así ustedes podrán ponerse al día.

¿Al día? ¿Está hablando en serio? ¿Mi mejor amiga me había acompañado hasta aquí, solo para abandonarme dos segundos después con alguien que no recuerdo?

–Seiya, ¿te importa si hablo con Mina un momento?

–Por supuesto –dijo él con una pequeña sonrisa y se retiró por el pasillo hacia una de las puertas.

–¡No puedes dejarme sola con él, Mina! –le dije casi al borde de la histeria.

–Estarás bien, no te preocupes. Ami dijo que debías retomar tu vida con normalidad ¿Lo recuerdas?

–Pues eso es algo que quisiera olvidar… Enserio, debería irme unos días a nuestro departamento.

–Querrás decir, mi departamento –dijo ella corrigiéndome –Este es tu hogar, Serena.

–No me siento como en tal –musite con un largo suspiro a pesar de que aquí veo algunas de mis cosas, como mi sillón favorito, por ejemplo, y que todo el lugar está inundado con fotografías de Seiya y yo, además de mis amigas y nuestras familias –Debí de haberle pedido asilo a Rei en el Templo Hikawa, o a cualquiera de las chicas… incluso ir a casa de Haruka y Michiru.

–Esa no hubiera sido buena idea. Allí, una vez que entraras, habrían cerrado la puerta con candado, hubieran perdido la llave y te tendrían encerrada con tal de que no volvieras a ver a Seiya.

–¿No crees que estas exagerando?

–Quizás… pero es mejor no arriesgarnos a que algo así suceda.

–Respóndeme algo, Mina ¿Por qué Haruka detesta a Seiya? ¿Y qué tiene que ver Darién en todo ese lio que se armó en el hospital?

–Pues con Seiya y Haruka pasa que desde siempre han tenido sus diferencias, así que es normal que siempre estén peleando por cualquier cosa –respondió Mina – Y aunque durante mucho tiempo, a Haruka le agradaba que Darién fuera tu novio, aun no acepta la idea de que ahora estás con Seiya.

–Entiendo que Haruka siempre me ha visto como su hermana menor y por eso es muy sobreprotectora conmigo, pero tengo veintitrés años... por no decir que en unas semanas cumpliré veinticuatro. Creo que ya estoy grandecita para saber lo que hago. Y eso incluye quien es mi novio… o quien se supone que lo es.

–Es lo mismo que yo digo, pero ya sabes cómo es Haruka…

–¿Y Darién? ¿Qué pasa con él? ¿Es un ex novio obsesionado conmigo que no acepta que terminamos?

–Es un poco más que eso, Serena. Pero esa es una larga historia…

–¿Por qué lo dices?

–Digamos que tu historia con Seiya es muy a lo Romeo y Julieta. Y Darién se opone totalmente a que estén juntos… En fin, como ya dije antes, es una larga historia. No tiene caso abrumarte con eso cuando lo importante es que te recuperes.

Asentí ante sus palabras. Intentare después que Seiya me cuente esa larga historia.

–Y tranquila, créeme que el mejor lugar en el que podrías estar, es al lado de Seiya.

–¿Enserio? –pregunte arqueando una ceja, escéptica. Es obvio que Seiya es un buen tipo, pero el problema es que no lo recuerdo y no puedo vivir bajo el mismo techo que un desconocido.

–¡Claro! No te dejaría sola con él si no fuera así. Además, aquí lo peor que podría pasarte es que Seiya te salte encima.

La mire con horror ante las imágenes que se formaron en mi cabeza por sus palabras –¡Cállate, Mina!

Mi mejor amiga simplemente estallo en carcajadas. Al ver que yo no me estaba divirtiendo, intento contener su risa.

–Está bien, lo siento…. Es solo que si recordaras la infinidad de veces que te he encontrado con Seiya mientras estaban…

–¡Ya no hables! ¡Por favor!

–Bien… Sé que ahora no te gusta la idea, pero créeme que es lo mejor. Seiya va a cuidar bien de ti. No podrías estar en mejores manos.

Considere sus palabras mientras me veía con esa expresión de "tengo razón y no discutas conmigo". Suspire derrotada. Es una misión imposible hacerla cambiar de opinión. Y yo no podré escapar de vivir la que supuestamente es mi vida al lado de Seiya Kou, y de la cual no tengo ninguna memoria.

–De acuerdo… pero sigo creyendo que esto es una locura.

–Lo sé… pero me agradecerás esta locura cuando recuperes la memoria –dijo ella con una sonrisa dándome un abrazo –Vendré mañana con las chicas para ver como sigues. Y descansa ¿de acuerdo?

Asentí, mientras ella se dirigía a la puerta.

No habían pasado ni sesenta segundos desde que Mina se fue, cuando Seiya ya estaba de regreso en la sala. Se había cambiado del traje sastre que traía anteriormente y ahora vestía una playera blanca y unos jeans, que sin duda daban una buena impresión de su muy bien formado cuerpo. Puede que no tenga ni un solo recuerdo de él previo a esta tarde en el hospital, pero hay que reconocer que Seiya es muy atractivo.

Así como yo había estado haciendo un escaneo de él, Seiya también había hecho lo mismo en mí. Un instante después, él decidió romper el silencio que nos rodeaba.

–¿Quieres comer algo? ¿O prefieras tomar una siesta? ¿Descansar un rato, Bombón?

–No me llamo Bombón.

–Sé muy bien cuál es tu nombre, pero eso no cambiara el hecho de que te seguiré llamando Bombón, Bombón –dijo él con una sonrisa –Y aun no respondes a mis preguntas.

–No, no y no –respondí sin que se me quitara la sensación de incomodidad a pesar que Seiya se muestra muy amable conmigo.

–Ok –musito él dando un suspiro –Entonces… ¿Qué tal una visita guiada por el departamento?

–Bien, así me podrás decir en donde está la habitación de huéspedes.

–¿Habitación de huéspedes? –repitió Seiya confundido.

–Por supuesto. ¿No esperaras que durmamos en la misma habitación?

–De hecho si… este es nuestro hogar y es lógico que durmamos en nuestra habitación.

Abrí los ojos como platos de la sorpresa ¿Lo dice enserio?

–Soy tu novio, Bombón. Si prestas atención, podrás ver que tus cosas están por todo el departamento, toda tu ropa está en el closet, en una de las habitaciones tienes tu propio estudio de trabajo, compras la mitad de los alimentos…

–Espera… –musite abrumada por sus palabras. Me senté rápidamente en el sofá. Sus palabras daban vueltas por mi cabeza, formando imágenes que no podía detener: compartir la misma habitación, preparar la cena juntos, fotos de nosotros en cada rincón del departamento. Toda una vida que no recuerdo.

–Lo siento –dijo Seiya sentándose a mi lado –Creo que debería ir más despacio. Aun me cuesta trabajo asimilar que tu no…

–Es que, yo solo… ¿Tengo mi propio estudio de trabajo? –esa fue una de las cosas que más llamaron mi atención de todo lo que dijo. ¿En verdad tengo un espacio en este lugar, aparte del enorme local que alquilamos Mina y yo, donde trabajo en los diseños de nuestra firma?

–Sí, así es. Allí creas los diseños que después junto con Mina conviertes en hermosos vestidos para "Moonlight Dreams"–dijo él con una sonrisa –Yo también tengo en otra habitación un pequeño estudio donde guardo mis instrumentos.

–¿Eres músico?

–Cantante profesional. Ahora soy solista, pero hace años estaba en un grupo llamado Three Lights junto con mis hermanos… ¿Te acuerdas de ellos? ¿Yaten y Taiki?

Seiya tomo una de las fotografías que estaban en una de las mesitas, allí aparece él junto a un joven muy alto de cabello castaño y otro de estatura un poco más baja de ojos verdes y peli plateado.

–Me parece que a ellos si los recuerdo vagamente… recuerdo que Mina hace tiempo estaba empeñada en salir con Yaten –dije señalando al peli plateado –Pero hace mucho que no los veo… o al menos eso creo.

–Tienes razón, ya ha pasado algún tiempo desde que ellos vinieron a visitarnos.

–¿No viven tus hermanos en Tokio?

–No, ellos viven lejos de aquí… pero vienen a vernos tan seguido como pueden. Tienen muchas responsabilidades que cumplir con su trabajo –dijo él con un largo suspiro. Parece que los extraña mucho –Entonces, ¿hacemos ese tour?

Asentí mientras nos poníamos de pie. Era mejor que supiera donde estaba todo con tal de no perderme en este lugar.

–Por supuesto, ya viste la sala y de aquel lado está la cocina, el comedor. Y por aquí está la terraza –dijo él tomando mi mano y tiro de mí.

Salimos a la terraza, y me di cuenta de que no era tan pequeña la mesita circular que había visto cuando llegue al departamento. Había decenas de macetas alrededor de la terraza, había muchos rosales, principalmente rojos, por todas partes.

–Es muy hermoso… –musite mientras contemplaba el lugar.

–Este es uno de tus lugares favoritos, Bombón. Desayunamos aquí cuando no estamos corriendo para ir al trabajo, pero generalmente aquí cenamos… se vuelve un sitio muy especial de noche, bajo la luna y las estrellas, rodeados de las rosas ¿Te trae algunos recuerdos este lugar? ¿Sientes algo?

–No… pero si recuerdo haber visto rosas antes. Pero no tantas como aquí.

–Bueno, algunos de los rosales fueron un regalo de Lita cuando te mudaste, para alegrar más el departamento –dijo él con una sonrisa –La mayoría las compre yo, para que tengas lo más cercano a un jardín hasta que tengamos uno de verdad.

–¿Un jardín de verdad?

–Sí, cuando compremos una casa más grande para...

Lo mire tratando de ocultar mi pánico ¡Por favor, qué no vaya a decir nuestros hijos!

Creo que se dio cuenta del miedo que me invadió ante sus palabras, porque se detuvo y suspiro profundamente.

–En fin, este es perfecto por ahora, así que… vamos para que veas tu estudio.

Nuevamente Seiya tomo mi mano, volvimos a entrar al departamento y caminamos hacia el pasillo. Entramos en la primera puerta del lado izquierdo. El estudio es amplio, hay un escritorio en donde está mi laptop, y a un costado una mesa de dibujo frente a una ventana que da hacia la terraza y sus rosas. Del otro lado, hay un librero enorme en donde hay varios libros con mis carpetas de trabajo.

Me acerque a la mesa de dibujo mientras Seiya se quedaba junto a la puerta, allí habían varias hojas con diseños a lápiz de algunos vestidos en los que estaba trabajando con Mina. Todo esto si lo recuerdo.

–¿Y bien, Bombón?

–Definitivamente si recuerdo mi trabajo. Creo que podré continuar realizando mis diseños para la próxima temporada.

–Debes tomártelo con calma. Necesitas descansar

–Necesito enfocarme en mi vida, y esto sí lo es… Mi vida es el diseño de modas.

–Yo también soy parte de tu vida…

–No para mí. No te conozco, Seiya… ya sabes, tengo amnesia.

–Sí, lo sé –musito él suspirando profundamente –¿Seguimos con el recorrido?

Asentí tras lo que salimos de mi estudio. Una vez en el pasillo, abrió la primera puerta que estaba del lado derecho: el baño.

–Es igual a todos los baños que he visto en mi vida –dije mientras le daba un vistazo, el lavabo, el inodoro, la regadera y una tina.

–¿No te trae ni un recuerdo? ¿Ni siquiera la tina?

Negué con la cabeza sin querer preguntarle que había querido decir con eso ¿acaso tomábamos baños de tina juntos?

Seiya volvió a suspirar de frustración –Guarde tu medicamento en el gabinete detrás del espejo. Allí también está tu cepillo de dientes y el resto de tus cosas.

–Ok…

–Ven, esta puerta conecta el baño con nuestra habitación –dijo él caminando hacia la puerta que estaba al costado izquierdo del lavabo.

–Si no te importa, preferiría ver antes el resto del departamento, Seiya –dije rápidamente. No quiero entrar a esa habitación.

Él me miro por un momento, antes de dar un enorme suspiro –De acuerdo, como quieras…

Regresamos al pasillo y, tras pasar de largo la siguiente puerta del lado derecho ya que era la de la habitación de Seiya –si, suya, porque me niego a pensar en que compartimos alguna vez la misma habitación– entramos en la última puerta de la derecha. Allí se encontraban en un costado varias guitarras, algunas muy bonitas y que parecen muy costosas, así como una batería que ocupa gran parte de la habitación. Del otro lado, hay varios taburetes, un pequeño escritorio a cuyo costado hay un librero con varias libretas y carpetas. El resto de las paredes están tapizadas de repisas con varios premios. Me acerque para observarlos mejor, en uno tiene como inscripción Seiya Kou, Mejor Artista del Año.

–¿Eres un cantante famoso, Seiya? –dije sorprendida. Aun me cuesta creer lo que estoy viendo.

–Sí. Muy, muy, muy famoso…

¿Tengo un novio guapo, que además es un famoso cantante? ¿Cómo es que alguien olvida algo así?

–Pero realmente nada de eso es importante. Me refiero a que, claro que agradezco el cariño y el apoyo de mis fans porque gracias a ellas son quién soy, pero yo lo único que hago es compartir mi música con el mundo. Cada disco, cada canción… todo lo he hecho teniéndote como mi musa, Bombón.

–No creo que alguien como yo pueda inspirar una canción.

–Para mí sí. Aunque no lo recuerdes, eres todo lo que más importa… eres mi vida.

Me siento totalmente abrumada por lo que dijo. Me lleve una mano a la cabeza, me está empezando a doler donde tengo los puntos.

–¿Bombón? –pregunto Seiya acercándose a mí, preocupado.

–Creo que necesito una siesta.

–Ven, te llevo a la habitación –dijo él tomando mi mano. Salimos rápidamente de su cuarto de música.

–¡Espera! ¿Qué hay en esas puertas? –dije señalando dos puertas del lado izquierdo a las que no habíamos entrado.

–Vamos a nuestra habitación para que descanses. Las veras después.

–Preferiría que fuese ahora –dije rápidamente. No quiero ir a esa habitación. No quiero –Por favor, solo será un momento.

–Está es otro baño –dijo Seiya señalando la puerta que estaba a un costado de mi estudio –La última es la habitación de huéspedes. Allí se quedan mis hermanos cuando vienen de visita.

–Entonces creo que es allí a donde debo ir –dije separándome de él mientras caminaba a la habitación de huéspedes.

–¿A dónde vas?

–A descansar un rato –dije volteando a verlo al detenerme frente a la habitación de huéspedes.

–Esa no es tu habitación.

–Pues ahora sí.

–Ami dijo que tienes que hacer tu vida con normalidad, y eso incluye dormir en tu habitación, en tu cama.

–No el día de hoy. Te veré después, Seiya.

–Espera un momento, Bombón –dijo él deteniéndome cuando estaba por abrir la puerta.

Cruzo la distancia que nos separaba rápidamente, pronto me vi atrapada entre la puerta de la habitación de huéspedes y él.

–¿Qué estás haciendo?

–Solo un pequeño experimento para ver si recuperas la memoria.

No me dio ni tiempo de responder, así que apenas y fui consciente del momento en que bajo su cabeza para unir sus labios con los míos. Una de sus manos se posó en mi cadera mientras que la otra fue detrás de mi cabeza, impidiéndome moverme. Aunque tampoco es que estuviera haciendo algo para apartarme de él. Mi mente no terminaba de asimilar que Seiya me estuviera besando, mientras que mi cuerpo, por alguna extraña razón, pedía con desesperación que no se detuviera.

Creo que me golpee la cabeza más fuerte de lo que pensé, porque mi cuerpo y mi cerebro se desconectaron. Casi por voluntad propia, mis brazos fueron alrededor de su cuello, atrayéndolo más hacia mí mientras le daba un mayor acceso a mi boca. Seiya me estrecho tanto a él, que me parece que no podría caber ni una aguja entre nosotros, mientras el beso iba subiendo de intensidad. Y vaya que este es un muy buen beso. Diría que este es uno de los mejores besos que he tenido, pero no puedo estar segura de ello porque no tengo con que compararlo. Fue entonces que pude sentir su… impresionante reacción ante nuestro contacto. Eso era lo que necesitaba para que mi cuerpo y mi cerebro se volvieran a conectar.

Puse mis manos sobre su pecho tras lo que lo empuje un poco, rompiendo así nuestro beso. Ni siquiera puedo describir la expresión del rostro de Seiya ante lo que hice.

–¿Ya me recuerdas, Bombón?

–No, lo siento… No creo que un beso haga que recupere la memoria.

–En ese caso, hay que intentarlo otra vez…

Gire mi rostro en cuanto note que nuevamente iba a besarme.

–Dudo que eso funcione. Y no puede volver a suceder. Entiendo que creas que soy tu novia, pero…

–No lo creo, realmente eres mi novia –replico él –Este departamento es prueba de nuestra vida juntos.

–Entiende que para mí no es así… En mi cabeza, eres alguien nuevo para mí y no puedes esperar que actúe como la Serena con la que estabas ayer. Yo no soy ella.

–Eso no tiene sentido. Eres mi Bombón.

–No es cierto. Tu Bombón y yo somos dos personas diferentes. Yo no he vivido lo que viviste con tu Bombón y mientras no recupere por completo la memoria, simplemente está esta Serena para quien eres alguien que conocí hace unas horas y con quien tengo que vivir bajo el mismo techo…

Sin darle tiempo de decir nada, abrí rápidamente la puerta detrás de mí y me refugie en la habitación de huéspedes, impidiendo que Seiya me siguiera.


Esta Serena nos va a volver locas a todas por como trata a Seiya y él que quiere que vuelva su Bombón... En fin, que ahora que viven juntos hay que ver como se van dando las cosas entre ellos.

Me despido por ahora esperando que les haya gustado el capítulo de hoy, como siempre, les pido que no olviden dejar sus comentarios, dudas, quejas o sugerencias que tengan. Muchos saludos para todos y ¡nos vemos en el proximo capitulo!

XOXO
Serenity

gracias por actualizar .... esta hermoso el capitulo, lastima que Seiya tenga que pasar por esta situación...pero se que sera paciente ante esta situación... ¿que fue lo que hizo Darien con Serena, para que las sailor lo odien? ...¿que fue lo que le ocurrio a Serena para que no recuerde nada de su verdadero amor con Seiya?...
espero que actualices pronto... que habrá en la habitación de Serena y Seiya....????

Me han encantado estos dos capitulos. Ver a Seiya como loco tratando de que Serena lo recuerde y ella tan testaruda!
Síguela pronto! =)

pobre seiya como esta sufriendo!!!! buabuabua

¡Hola!

Primero que nada, ¡muchisimas gracias a todas ustedes por sus comentarios! Creanme que me hace muy feliz que les haya gustado el capitulo anterior.

Aqui les traigo un nuevo capitulo y vamos a ver que tal avanzan las cosas con nuestra pareja favorita. ¡Espero que lo disfruten!

Capítulo 3
Negación

Después de una siesta que me cayó de maravilla, desperté muerta de hambre. Creo que era de esperarse considerando que hasta donde recuerdo, la última vez que comí algo fue ayer con las chicas en el Templo Hikawa. Mire el reloj, son más de las diez de la noche, es buena hora para cenar algo y luego volver a dormir.

Me dirigí por el pasillo hacia la cocina, pero logre escuchar a Seiya hablando con alguien, una mujer aparentemente, cuya voz me parece familiar. Cuando llegue a la sala, vi que tenia la chimenea encendida y simplemente estaba con Luna a su lado. La gata me miro fijamente, y fue entonces que Seiya también volteo a verme.

–La siesta te hizo bien, Bombón. Te ves mucho mejor.

Lo mire con una pequeña sonrisa. Sin duda está siendo amable porque no me siento mejor, pese a que había disminuido un poco el dolor en donde tengo los puntos .

–Creí que había alguien aquí, me pareció haberte escuchado hablar con una mujer.

–Solo con Luna –dijo señalando a la gata.

–Tengo una lesión en la cabeza, pero no enloquecí. Los gatos no hablan, Seiya –dije acercándome a Luna para acariciarla.

–Si tú lo dices… –musito él de forma casi inaudible.

Estoy segura de que lo escuche hablando con alguien, pero es una locura pensar que lo hacía con la gata. Fue entonces que vi un celular en la mesita frente a él. Seguramente tenía el altavoz mientras hacia una llamada y eso fue lo que escuche.

–¿Tienes hambre, Bombón?

–Sí. Pero si no te molesta, buscare algo en el refrigerador.

–Este es tu hogar. La comida, al igual que el resto de las cosas que hay en este departamento, es de ambos.

–Uhh… sí, claro –dije con un suspiro –¿Ya cenaste?

–No. Estaba esperando a que despertaras para que cenáramos juntos.

–Ah… gracias.

–Prepare pasta. Dame un momento y enseguida te llevo tu plato –dijo él poniéndose de pie. Rápidamente se dirigió a la cocina.

–¿Sabes cocinar?

–Uno de los dos tenía que aprender a hacerlo, Bombón. De no haber sido así, sobreviviríamos gracias al servicio a domicilio

Un novio guapo, que canta, es famoso y además cocina. ¿Cómo fue que tuve tanta suerte? Bueno, al menos no tengo que preocuparme por intoxicarme con mi propia comida.

–Ponte cómoda en la terraza, Bombón, en un segundo te alcanzo –dijo Seiya mientras sacaba un par de platos de la alacena.

–¿En la terraza?

–Hay que hacer las cosas que solías hacer normalmente para que tu memoria vuelva pronto… Por favor, hay que hacer el intento.

–De acuerdo –musite dando un suspiro.

Me dirigí hacia la terraza seguida por Luna, el lugar prácticamente estaba a oscuras y apenas y era iluminado por la luz de la luna sobre mí. No tenía ni treinta segundos ahí cuando de pronto encendieron una serie de luces, como las navideñas, iluminando por completo la terraza dando un espectáculo mágico. Voltee y vi a Seiya que estaba a un costado de la pared, tras haber iluminado el lugar gracias a un interruptor que no había visto, para después volver a la cocina.

Luna se acerco a mi lado, frotando su cabecita contra mi pierna, cuando me senté frente a la mesita. Estire mi brazo para acariciarla.

–Me da gusto que al menos tu no me dejaras sola con Seiya como lo hizo Mina –musite teniendo un maullido de respuesta por parte de Luna.

–Veo que algunas cosas no cambian –dijo Seiya al llegar con una charola con la comida.

–¿Y cómo lo harían si tengo a Luna desde que tengo memoria? O parte de ella –dije con una pequeña sonrisa mientras acariciaba a Luna –Me alegra no haber olvidado a la gatita que ha estado conmigo desde que era adolescente.

–Sí. Luna también está feliz de que la recuerdes.

Seiya dejo los platos sobre la mesa, así como los cubiertos y un par de vasos con agua. No pude evitar sonreír al ver la pasta a la boloñesa frente a mí, sin duda una de mis comidas favoritas, y que huele delicioso. Al probarla, comprobé que también esta riquísima.

–¡Está deliciosa la pasta, Seiya!

–Gracias. Creí que sería bueno cocinar uno de tus platillos favoritos.

–Definitivamente acertaste –le dije mientras me devoraba la pasta –Creo que hasta sabe mejor que la que prepara Lita… pero no lo sé lo vayas a decir.

–Descuida, ya me habías dicho eso antes. Y también entonces te dije que mantendríamos entre nosotros este pequeño secreto –dijo él guiñando un ojo.

Lo mire con una pequeña sonrisa mientras seguíamos comiendo, fue entonces que recordé algo que quería preguntarle.

–Seiya, ¿Qué fue lo que realmente paso en el hospital? ¿Por qué tanta discusión entre Darién y tú? ¿Qué es todo eso que me estoy perdiendo en esa historia del novio y el ex novio?

–Es una larga historia…

–Lo mismo me dijo Mina. Lo único qué dijo a grandes rasgos, es que él se opone a nuestra relación.

–No tenemos porque hablar de eso ahora, Bombón –dijo él tomando mi mano por encima de la mesa –Lo más importante es que te recuperes.

Mire nuestras manos unidas sobre la mesa antes de retirar sutilmente la mía. Después de nuestro primer beso –o al menos primero para mí– aun no termino de acostumbrarme a la forma tan cariñosa en que me trata Seiya. No es que me queje, pero es tan raro… demasiado raro que me trate como su novia, cuando para mí no es así.

–Mira, Seiya, ya es bastante dura mi situación de no saber con certeza todo lo que olvide. Lo único que te pido es que seas honesto conmigo, por favor…

–Y lo soy. Nunca hemos tenido secretos entre nosotros y no voy a empezar ahora a ocultarte cosas. Pero parte de esa historia es complicada de explicar, y…

–No importa lo que sea, quiero saberlo.

Seiya me miro durante lo que me pareció una eternidad mientras pensaba que hacer. Al final, dio un largo suspiro.

–De acuerdo, te lo voy a decir. Solo te pido que mantengas la mente abierta, porque hay unas cosas que quizás te cueste trabajo entender.

Luna empezó a maullar con fuerza. Un segundo después, Seiya salto de su lugar gritando de dolor.

–¡Luna!

–¿Qué te hizo? –pregunte preocupada.

–¡Destrozar mi pantalón! –dijo molesto, para después mirar a la gata –¿Pero qué pasa contigo?

Seguramente fue mi imaginación, pero Luna lo miro como si lo advirtiera de algo. Es imposible… Realmente fue duro ese golpe que recibí en la cabeza.

Seiya se agacho para tomar a Luna, pero ella le rasgo las mangas de la playera tras lo que escapo de sus manos. Él se puso de pie para perseguirla, y fue entonces que vi que la parte inferior de su pantalón también estaba rasgado. Al final, Luna salto a mi regazo y Seiya se quedo a unos pasos de distancia de nosotras, como si la gatita se hubiese convertido en mi protectora y no quisiera que él se acercara a mí.

No pude controlar mi risa al ver el estado en que Luna había dejado la ropa de Seiya después de tanto arañazo.

–¿Qué es tan divertido, Bombón?

–Lo siento… –musite intentando no reírme –Es que no puedo creer que una gatita tan linda como Luna te haya hecho eso.

–Esto es lo que pasa cuando la linda gatita se convierte en leona con tal de proteger a su princesa –dijo él volviendo a sentarse.

–Bueno, ahora si explícame ¿Qué quisiste decir con eso de que mantenga una mente abierta?

–¿Podías controlar a Luna para que no vuelva a atacarme? Después, con gusto te lo explico.

–Es una gata, Seiya. No entiende lo que decimos.

–Si lo hace. Por si no lo recuerdas, ella es muy inteligente.

–Ya deja de pelear con Luna y dime ¿sobre qué debo mantener la mente abierta? ¿Me vas a decir que eres un alíen o algo así?

–Alíen no, kinmokiano –dijo él con una sonrisa –Mi planeta natal se llama Kinmoku y está al otro lado de la Vía Láctea. La primera vez que vine a la Tierra fue cuando tenía dieciséis años. Al poco tiempo de llegar aquí, fue que te conocí.

Luna maulló tan fuerte que, más que un maullido, me pareció un grito de sorpresa. La sujete con fuerza al ver que estaba por saltar encima de la mesa. Parecía que nuevamente iba a atacar a Seiya.

–Buena broma, Seiya, muy original… Pero ya enserio, ¿qué me ibas a decir?

–No es ninguna broma. Te estoy diciendo la verdad, Bombón –dijo con una seriedad increíble, como si realmente creyera lo que dice.

–¿Alguna vez has considerado ser actor? Porque eres muy bueno y realmente estas metido dentro del papel del alíen.

–Kinmokiano –dijo Seiya corrigiéndome.

–Lo que sea… ¿Me dirás la verdad sobre esa larga historia con Darién?

–Te estoy diciendo la verdad, Bombón. Parte del problema es mi origen. Darién ha intentado expulsarme de la Tierra porque dice que no pertenezco a este mundo, pero tú se lo has impedido.

–Aja –musite con incredulidad –¿Y como se supone que hice eso? ¿Es que soy de la realeza o algo así?

–Sí, eres la Princesa de la Luna. Y no solo eso, también eres Sailor Moon.

–¿Sailor, qué? –pregunte confundida.

–Sailor Moon. La mejor heroína de este mundo. Corrección, la mejor heroína de todo el Universo –dijo con una gran sonrisa, lleno de orgullo –Luchas por el amor y la justicia, y te encargas de proteger la Tierra y del resto del sistema solar de todo aquel que amenace la paz… De hecho, había un sujeto que trató de conquistar la Tierra y ayer tuvieron una sorprendente batalla. Lo derrotaste, pero terminaste con esa lesión en la cabeza. Eso fue lo que realmente te paso, Bombón. No tuviste ningún accidente automovilístico como te dijo Tenoh. Aunque bueno, si ibas en tu auto cuando inicio el ataque, pero…

–¡Basta, Seiya! No es divertido tu jueguito –dije molesta –Y si no me quieres decir la verdad, no lo hagas.

–Te estoy diciendo la verdad.

–¿Enserio? Para tener una lesión en la cabeza, creo que yo no estoy loca como tú para inventar semejante historia, y menos cuando perdí a mi familia en un accidente automovilístico.

–No, Bombón, por favor déjame explicarte…

–¿Explicar qué? –exclame furiosa –Aunque no recuerdo parte de mi vida, yo no soy ninguna tonta como para creer tales estupideces.

Me puse de pie llevando en mis brazos a Luna como si fuera un escudo contra Seiya. Camine de regreso al interior del departamento, sintiendo como me dolía terriblemente la cabeza. Mentalmente revise cuando fue la última vez que había tomado mi medicamento, me alegro saber que ya podía tomar la siguiente dosis. Me dirigí a prisa al baño mientras Seiya me seguía.

–Por favor, Bombón… –me suplico Seiya tomándome del brazo.

Me aparte de él rápidamente –Déjame en paz. Tan pronto tome mi medicina, recogeré mis cosas y me largo de aquí. No quiero estar ni un minuto más en la casa de un loco.

Al llegar al baño, cerré dando un portazo impidiéndole en entrar. Le puse llave a la puerta con tal de asegurarme de que estaría sola al menos un rato.

Baje a Luna al suelo, que se quedo mirándome mientras me recargaba en la puerta dando un enorme suspiro para tranquilizarme, tras lo que finalmente me acerque al espejo. Me quede sorprendida al ver mi reflejo. Mi cabello es un completo desastre, aunque mi flecho cubre el vendaje en donde tengo los puntos y estoy totalmente pálida. Me lave el rostro con agua fría, lo cual me ayudo a relajarme un poco. Abrí el gabinete y estuve a nada de gritar por lo que vi. Por supuesto mi medicamento estaba allí tal como Seiya me había dicho, al igual que el resto de mis cosas como por ejemplo mis cremas para la cara y mi cepillo de dientes, e incluso una caja de tampones que me hizo ruborizarme cuando la vi. Pero la razón por la que casi grito, y por la que siento que estoy a un paso de la histeria es al ver entre mis cosas algo que yo nunca, o al menos hasta donde recuerdo, había usado antes: una caja de píldoras anticonceptivas.

Saque mi medicamento, mi peine y mi cepillo de dientes, tras lo que volví a cerrar el gabinete rápidamente, tratando de ignorar las imágenes que se formaron en mi mente después de lo que vi. Me tome mi medicamento tras un largo suspiro para mantener la calma. Deshice mis coletas y cepille mi cabello hasta que volvió a quedar lacio y brillante como siempre, tras lo que volví a peinarme como de costumbre. Al menos ya estoy más presentable y no pareceré un monstruo cuando llegue con Mina. Me lave los dientes, y una vez que me sentí mucho mejor, nuevamente tome a Luna en mis brazos, abrí la puerta del baño y salí. Seiya me estaba esperando.

–Bombón, escúchame…

–No pierdas el tiempo, me voy de aquí –dije pasando de largo de regreso a la sala. Tome mi bolso que estaba sobre el sofá. Guarde allí mi medicamento.

–No te vayas, por favor.

–Claro que me iré. ¿O es que quieres que haga que Luna te ataque otra vez? –dije mostrándole a la gatita como si fuera el arma más peligrosa del mundo.

–Tranquilízate y baja a Luna, por favor. Tenemos que hablar.

–¿De qué? ¿Ahora me vas a decir que Mina y las demás también son guerreras que luchan por el amor y la justicia? –pregunte con ironía.

–Pues… sí, eso también es verdad. Ellas son Sailor Scouts y tus guardianas.

–¡Estás loco! –dije manteniendo en alto a Luna para que no se me acercara.

–¡Ok, lo siento! Perdóname, realmente me excedí con todo lo que dije. Tengo que acordarme que tu no recuerdas todo y…

–Me largo de aquí –musite molesta caminando hacia la puerta.

–No te vayas, por favor…

–¿Por qué habría de hacerte caso, Seiya? –le grite al detener mis pasos y voltear a verlo –¿Vas a seguir contándome tontas historias sobre alíens, seres que invaden la Tierra y Sailor Moon?

–Kinmokiano –musito él corrigiéndome.

Arquee la ceja incrédula de que vuelva con el mismo tema.

–Lo siento, pero tú empezaste al mencionar alíens y cosas así…. Perdóname, realmente lo siento. Me imagino lo confundida que debes estar por todo lo que dije –dijo él con un largo suspiro –Es solo que… si tuvieras idea de todo el dolor que hemos pasado con tal de poder estar juntos, del daño que te hizo Darién por mucho tiempo. No es algo en lo que quiero que pienses, no cuando lo más importante en este momento es que te recuperes.

–Deberías de haber empezado diciéndome eso, en lugar de inventar semejantes historias.

–Créeme que en verdad lo siento, Bombón. Te lo suplico, no te vayas –me pidió desesperado.

Di un largo suspiro para tranquilizarme y pensar que hacer –Dame una buena razón por la que no deba salir corriendo de aquí e ir con Mina.

–Porque te amo, Bombón ¿No te parece eso suficiente?

–Se lo estás diciendo a la chica equivocada. Yo no soy tu Bombón. Entiende que ella no está aquí.

–No digas eso…

–Es la verdad, Seiya.

–Tal vez sea así, pero sé que está allí dentro, en alguna parte… –dijo Seiya dando un largo suspiro. Se acerco más a mí, y extendió su mano para acariciar mi mejilla sin importarle que tuviera a Luna en medio de nosotros –No te imaginas cuanto te extraño.

No sé ni en qué momento Luna dejo de funcionar como mi felino escudo, pero si se que Seiya se inclino para besarme y yo me quede clavada en mi lugar, esperando a recibir sus labios.

¿Qué rayos es lo que me hace este hombre? Por lo que se hasta ahora de él, es el loco más sexy que he conocido, que además es un famoso cantante, excelente cocinero, además de ser atento y divertido, que está haciendo hasta lo imposible por cuidarme y consentirme con pequeños detalles que son realmente maravillosos. Y yo simplemente no puedo dejar de besarlo… ¡Esa lesión en la cabeza me esta afectando!

No supe ni en qué momento paso, pero para cuando me di cuenta, me hallaba recostada en el sofá con Seiya encima de mí mientras nos seguíamos besando. Una de mis manos estaba enterrada en su cabello, mientras que con la otra recorría su espalda. En cambio, las manos de Seiya estaban muy ocupadas enviando chispas a cada punto donde me tocaba, y que empezaba a abrirse paso por debajo de mi ropa. Allí fue cuando un rayo de consciencia llego a mí, y me di cuenta de hasta donde podrían llegar las cosas de seguir así.

Me fui apartando lentamente, hasta que finalmente nos vimos a los ojos.

–¿Ahora si ya me recuerdas?

Odio oír ese tono de esperanza en su voz. Y odie aún más ver la desilusión en sus ojos cuando negué con la cabeza.

–¿Ni siquiera un poco, Bombón?

–No, pero te avisare cuando suceda.

–En ese caso, espero que sea pronto.

–Ehh... Seiya ¿podrías…? –musite señalándole con la mirada la intima posición en que nos encontramos –Esto no es algo que deba ver un gato –dije buscando a Luna con la mirada ¿Dónde se había metido?

–No te preocupes por eso, Luna nos ha hallado en peores situaciones que está.

Sentí mis mejillas enrojecer con lo que dijo mientras rápidamente me separaba de él, y me sentaba en el sofá manteniendo cierta distancia. Me acorde de lo que Mina me había dicho sobre las veces que me encontró con Seiya mientras estábamos… Ni siquiera quiero pensarlo. Suspire profundamente para tranquilizarme. Hasta me dieron ganas de llamar a Mina y disculparme por todo lo que tuvo que ver gracias a la famosa Bombón de Seiya.

–¿Aun quieres irte con Mina?

–¿Vas a seguir diciendo tonterías sobre que eres un alíen?

–¡Kinmkiano!

Fruncí el ceño molesta. Aquí vamos otra vez.

–Lo siento, no volverá a ocurrir... Te diré la verdad sobre todo lo que quieras saber, pero prométeme que te quedaras aquí esta noche.

–¿Realmente me dirás la verdad sobre todo lo que quiera saber?

–Absolutamente todo. Pero solo será así si te quedas.

–De acuerdo, me quedo –dije acomodándome en el sofá –Pero te advierto que tengo muchísimas preguntas.

–Y yo responderé a todas ellas, Bombón.

¡Esta Serena tan esceptica que no cree todo lo que le dijo Seiya! :[GOTITA]:

Aunque bueno, creo que con esto se resolvieron muchas de las dudas que todas tenian y en el proximo se resolveran más. Ya veremos como hara todo esto que evolucione la relación entre Serena y Seiya. :[Jujuju]:

Me despido por ahora esperando que les haya gustado el capítulo de hoy, como siempre, les pido que no olviden dejar sus comentarios, dudas, quejas o sugerencias que tengan. Muchos saludos para todos y ¡nos vemos en el proximo capitulo!

XOXO
Serenity

magnifico!!! me encantaaaa!!
buenisima la continuacion serenity!!
como quisiera verlo convertido en anime!!

Kinmkiano! jajajajaj Seiya es tan adorable. Auunque yo perdiera la memoria me daria igual, si es divino!
Siguela pronto porfiss se me hizo muy corto!